Habitantes del norte de esta capital bloquearon el acceso a los tiraderos de basura a cielo abierto que – sin importar el daño ambiental, según denunciaron- los gobiernos estatal y municipal habilitaron en medio de asentamientos urbanos y el Hospital General.
Esta situación provocó nuevamente una contingencia sanitaria en Chilpancingo. Y es que los ciudadanos decidieron tirar en las calles la basura porque los conductores de las unidades particulares de recolección que administra -presuntamente, de manera irregular- el director de Imagen Urbana municipal, Carlos Ramírez González, suspendieron labores ante la falta de un lugar adecuado para depositar los desechos sólidos.
La mañana de este lunes, habitantes de la colonia Tierras Prietas Rotaria, encabezados por el líder vecinal David López Hernández, bloquearon el acceso a dos tiraderos a cielo abierto ubicados al norte de la capital, sobre el libramiento que conecta Chilpancingo con el municipio de Tixtla.
Este lugar, que presuntamente funciona sin cumplir con normas ambientales, fue habilitado por autoridades estatales en dos predios rústicos. El primero es propiedad de un medio hermano del gobernador Astudillo. El otro es de un particular identificado como Pedro Jiménez Alonso.
Los inconformes denunciaron que, desde hace un año, los gobiernos estatal y municipal solo han administrado el conflicto de la basura y se niegan a resolverlo de fondo, situación que provoca contingencias sanitarias y daños ambientales que ponen en riesgo la salud de las personas y el entorno ecológico de la zona.
David López lamentó que las autoridades beneficien a los dueños de los predios privados a costa de la salud de los habitantes.
Además, dijo que a escasos 200 metros de ambos tiraderos se encuentra el hospital general de Chilpancingo, situación que agudiza más el problema ambiental y de salud pública.
Por ello, los manifestantes acordaron impedir el acceso a las camionetas privadas de recolección de basura debido a que en ambos tiraderos ya existen más de 600 toneladas de desechos.
El líder de los inconformes recordó que las autoridades municipales y estatales prometieron regularizar la colonia, así como introducir servicios básicos, pero a la fecha no han cumplido. Advirtió que, en caso de que no resuelvan el problema, se van a manifestar en la autopista del Sol.
La confrontación
En octubre pasado, Apro documentó este conflicto generado por la confrontación entre el gobernador, Héctor Astudillo Flores, y el alcalde con licencia de Chilpancingo, Marco Leyva Mena, del PRI, por el control del negocio de la recolección y destino final de residuos sólidos en esta capital.
Se trata de un lugar conformado por 600 colonias donde habitan en promedio unas 300 mil personas que generan al día aproximadamente 300 toneladas de basura, de acuerdo con información del ayuntamiento.
Esta agencia también dio a conocer que el director de Imagen Urbana municipal, Carlos Ramírez González también se desempeña como empresario del reciclaje de la basura. Es uno de los cuatro líderes de la flotilla privada de recolectores en la capital de la entidad.
El funcionario municipal de primer nivel, vinculado directamente con el grupo priista del gobernador, además de cobrar un salario del erario, también se beneficia directamente con el negocio de los residuos sólidos en Chilpancingo, admitió en ese entonces Leyva Mena.
Ahora, el conflicto sanitario se vuelve a agudizar a cinco meses de la primera contingencia en Chilpancingo, ante la falta de un espacio adecuado para el destino final de los residuos sólidos y la privatización del servicio de recolección que provocó la salida de Marco Leyva y el arribo del actual alcalde suplente, el empresario trasportista Jesús Tejeda Vargas.
FUENTE: PROCESO.
AUTOR: EZEQUIEL FLORES CONTRARAS.
LINK: http://www.proceso.com.mx/524884/tiraderos-de-basura-cielo-abierto-provocan-nueva-contingencia-sanitaria-en-chilpancingo