El pasado sábado la sede de la Organización Civil Las Abejas de Acteal, en Chiapas, fue atacada por un grupo de personas armadas. Dicho lugar fue el campamento de personas desplazadas “Los Naranjos”, en el municipio de Chenalhó, Chiapas.
A través de un comunicado, Las Abejas de Acteal, detallaron que el ataque se inició el sábado alrededor de las 6:45 de la tarde, mientras realizaban trabajos de alambrado en el perímetro de la sede de la Organización y Casa de la Memoria y la Esperanza, para delimitar su territorio.
En ese momento, “se comenzaron a escuchar disparos de armas de fuego desde la casa del señor Javier Luna Pérez del PVEM, por lo que las mujeres, hombres y niñas y niños que nos encontrábamos en nuestra sede, corrimos y nos refugiamos en la iglesia de la Virgen de la Masacre de Acteal”.
La agresión no se detuvo ahí, alrededor de las 10:30 de la noche, seis jóvenes arribaron a la sede con armas de fuego, palos, piedras “para destruir el alambrado que habíamos hecho alrededor de nuestra sede y al mismo tiempo disparaban sus armas de fuego”, cuentan en el comunicado.
Cuando destruyeron por el completo el alambrado realizaron 4 disparos de armas de fuego y huyeron del lugar.
Después de la destrucción del alambrado, a las 11:30 de la noche, este mismo grupo de personas armadas regresó para destruir la casa de la Organización de Las Abejas que se había construido en la orilla de la carretera.
En ese momento se encontraban dentro de ella varias mujeres, quienes tuvieron que realizar un cinturón de seguridad para evitar que terminaran con la casa. Sin embargo aseguran que los agresores continuaron con la destrucción, “aventando a la carretera las maderas de la casa y algunas se las llevaron a su casa”.
Este último ataque duró aproximadamente 10 minutos. Al terminar con la destrucción, los seis agresores se reunieron en la puerta de la casa de Antonio Gómez Pérez, presidente del grupo “Concejo Pacifista Sembradores de Paz”, (grupo usurpador del nombre de Las Abejas de Acteal) y desde ahí le dispararon con un arma al foco del alumbrado público con la finalidad de dejar a oscuras toda la zona.
El Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas, A. C. (Frayba), registró los hechos y entrevistó a los afectados. Uno de ellos comentó: “esta agresión nos hizo muy presente la Masacre (de Acteal), revivimos nuestro dolor, porque quienes destruyeron el alambrado y la casa, han actuado como los grupos paramilitares del 22 de diciembre de 1997, para desalojarnos. No solo actuaron desde la carretera, también se escucharon disparos cerca del río”.
Las Abejas de Acteal denunciaron los hechos y solicitaron de manera urgente que “se envíen llamamientos al Estado mexicano exigiendo cese de agresiones que violentan la autonomía de Las Abejas de Acteal”.
“Tenemos mucho miedo de que el grupo armado entre a donde se encuentran las personas refugiadas. No queremos que más hechos violentos se sigan cometiendo en contra de nuestra Organización”, plantean en el comunicado.
Ante hechos violentos como estos, Las Abejas de Acteal exigen:
- Al mal gobierno municipal, estatal y federal detener urgentemente esta violencia y se garantice nuestra seguridad como Organización Sociedad Civil Las Abejas de Acteal en las diferentes comunidades en las que habitamos.
- A la Comisión Interamericana de Derechos Humanos se pronuncie pronto sobre la responsabilidad del Estado mexicano respecto a la Masacre de Acteal y, debido a este retardo, el Estado mexicano ha aprovechado para administrar la impunidad y generado más violencia en nuestra región.
Dos décadas viviendo bajo el miedo
En 1998, tras la masacre de Acteal, tres de los sobrevivientes: Francisco Vázquez Hernández (fallecido 2016), María Vázquez Gómez y Juan Vázquez Luna, donaron una parte de su predio para crear la sede de nuestra Organización Las Abejas de Acteal.
Desde el año pasado, acusan Las Abejas, que los integrantes de “Los Sembradores de Paz”, han intentado “despojarnos de nuestra sede y llegaron a agredirnos”, con la finalidad de apropiarse de sus terrenos.
En 2017 en entrevista para Animal Político, integrantes de Las Abejas contaron las condiciones de violencia que viven a diario. Aseguran que el paramilitarismo sigue vigente con la participación de personas que ejecutaron la masacre de 1997.
Incluso detallaron que los programas del gobierno implementados en la zona no tienen otro fin más que desbaratar el tejido social en las comunidades indígenas, con el fin de disolver organizaciones como Las Abejas.
Por este motivo es que las familias de Las Abejas han optado por generar sus propios servicios como su propio sistema de recolección de agua, el cual también ha sido blanco de actos vandálicos.
La violencia paramilitar a consecuencia de conflictos territoriales no cesa en el estado de Chiapas. En zonas como Los Altos desde hace años se desarrolla un conflicto territorial entre los municipios de Chenalhó y Chalchihuitán, que ha causado el desplazamiento forzado de más de 5 mil personas.
FUENTE: ANIMAL POLÍTICO.
AUTOR: REDACCIÓN.
LINK: https://www.animalpolitico.com/2018/04/hombres-armados-destruyen-sede-de-las-abejas-de-acteal-en-chiapas/