“El Estado mexicano es responsable de racismo ambiental en la medida que ha priorizado otros intereses sobre el derecho a un ambiente sano de la población afromexicana”, evidenció ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Nadia Alvarado Salas, del Colectivo para Eliminar el Racismo (COOPERA).
Durante audiencia sobre los derechos de personas afromexicanas y afrodescendientes del 169 periodo de sesiones, que se realiza en Denver, Estados Unidos, diversas organizaciones afromexicanas denunciaron que el Estado mexicano aún no reconoce en la Constitución a los pueblos afrodescendientes, lo que fomenta diversas afectaciones a sus derechos humanos.
Alvarado Salas, también señaló que el gobierno mexicano “ha incurrido en racismo institucional al menospreciar el conocimiento local e ignorar las recomendaciones hechas por las comunidades sobre el uso y manejo de los recursos y excluirlos de la administración y la toma de decisiones, situación que los expone a la imposición de proyectos, bajo contratos cuestionados que violentan su forma de vida”.
FUENTE: EDUCA OAXACA
AUTOR: REDACCION