Pero la minera no sólo ha provocado daños ambientales. En el proceso de resistencia ante el proyecto, los habitantes sufrieron represión “imponiendo grupos de paramilitares, que por supuesto han contribuido en los asesinatos de Bernardo Vásquez Sánchez y Bernardo Méndez”, de acuerdo con un comunicado de la Rema.
El proyecto minero San José de la empresa minera Cuzcatlán, SA de CV, filial de la canadiense Fortuna Silver Mines, Inc, comenzó su producción desde julio de 2011, y desde entonces extrae oro y plata. Tan sólo en 2017 produjo 7.5 millones de onzas de plata y 55 mil 950 onzas de oro, de acuerdo con datos de su página oficial.
Sin embargo, para la comunidad “los megaproyectos mineros son una terrible amenaza para la vida de los pueblos, además de atentar contra lo más preciado de los territorios de nuestro país y de ninguna manera son progreso y desarrollo”, se precisa en el comunicado de Rema.
Aunque la Profepa señala en un comunicado que en caso de que se acredite la contaminación del suelo se aplicarán sanciones contra la minera Cuzcatlán, los integrantes de Rema señalan que la empresa ha operado con impunidad.
FUENTE: CONTRALINEA
AUTOR: BERENICE SANTOS