viernes, 24 de mayo de 2019

Migración admite que tiene instalaciones inadecuadas, ante fallas y violencia en estaciones

El comisionado Tonatiuh Guillén reconoció que las estaciones migratorias son “inadecuadas”, tras la muerte de una guatemalteca bajo custodia del INM.

El comisionado del Instituto Nacional de Migración (INM), Tonatiuh Guillén, admitió que sus instalaciones son “inadecuadas” para el flujo de familias centroamericanas que cruzan hacia Estados Unidos, por lo que prevé la construcción de un nuevo “albergue” en Tapachula, Chiapas, que funcionaría en paralelo a Siglo XXI, estación que en los últimos meses ha registrado episodios violentos y que actualmente está asegurada por la Guardia Nacional.

La muerte de una niña guatemalteca de 10 años, que falleció el 15 de mayo en un hospital de Ciudad de México cuando estaba bajo custodia del INM, ha vuelto a poner el foco sobre las condiciones en las que los migrantes en situación irregular son detenidos y privados de la libertad hasta su deportación.



Entrevistado por Animal Político, el comisionado reconoció que sus instalaciones no están preparadas para acoger a los centroamericanos que, como la menor y su madre, están en proceso de ser devueltos a su país de origen. Una investigación judicial determinará si hubo algún tipo de negligencia. La gran incógnita está en el tiempo transcurrido desde que la niña cayó de una litera en el centro de detención hasta su traslado al hospital. Si fue inmediatamente atendida o se perdió un tiempo precioso que, quizás, hubiese podido salvar su vida. Organizaciones de la sociedad civil como Pueblos Sin Fronteras han alertado que las condiciones en las estaciones migratorias no son las óptimas para atender a menores.

“Esta una investigación en curso de carácter judicial para saber si hubo responsabilidad de alguien del instituto”, dijo Guillén, por lo que la versión de los hechos que relata es “preliminar”.

Al final, serán los investigadores los que establezcan qué es lo que ocurrió en la estación y por qué falleció la menor. El comisionado aportó lo que sabe. Que la niña, junto a su mamá, su tía y su primo, de su misma edad, fueron trasladados desde Chihuahua a Ciudad de México en autobús.

“Llegaron en la madrugada del día 15, sobre las 2 de la mañana. La mamá reportó que la niña traía problemas en la garganta. De inmediato, a las 3 de la mañana, la reviso un médico, que le dio un medicamento”, afirmó Guillén.

“En la mañana, otro médico la volvió a revisar de la garganta y también le dio medicamento. En la tarde, no sé la hora, la mamá reporto que se cayó la niña de la litera. Por los datos posteriores, esa caída le provoco el fallecimiento”, explicó.

Desde que la menor cayó hasta que fue trasladada transcurrió un tiempo que Guillén dice desconocer. “No tengo el detalle, pero debió haber pasado tiempo. No se cuánto, porque llegó otro médico y es cuando se decide el traslado al hospital. Eso se tiene que investigar. No conozco las características de la caída ni qué pasó. Son cuestiones médicas”, afirmó.

Tampoco conoce los detalles sobre por qué la menor fue conducida al hospital pediátrico de Coyoacán y no al de Iztapalapa, que se encuentra más cerca de la estación migratoria. “No lo sé. Los médicos deben saber por qué toman una decisión”, aseguró.


En una primera tarjeta informativa publicada el 16 de mayo, un día después de la muerte de la menor, el INM reveló que esta había referido dolores en la garganta, lo que podía dar a entender que esta era la causa de su fallecimiento. Horas más tarde, Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración, revelaba que la causa del deceso era la caída de la litera. “Como la niña falleció debíamos comunicar lo que se sabía hasta el momento y eso es lo que se sabía”, afirma Guillén.





Dos días después del fallecimiento de la niña, Animal Político publicó que la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) investigaba una queja formulada por el consulado de Guatemala en Tijuana, que protestó por no haber sido informado de la detención de la familia guatemalteca en Chihuahua y su traslado a Ciudad de México. “No tengo conocimiento de la queja”, asegura el comisionado, que reitera que “se informó de inmediato al consulado”. “Tenemos una comunicación diaria y muy estrecha. Se informa siempre, hay un procedimiento de informe general. Cuando se tienen personas de la nacionalidad centroamericana hay un aviso muy pronto”, dice.


No se ha hecho público cuándo fue detenida la niña y sus familiares. Guillén cree que “lo más probable” es que fuese “el día previo” a su traslado a Ciudad de México. “En Chihuahua no hay espacio”, aseguró, lo que habría motivado su traslado, en autobús y por la noche, hasta llegar a las dos de la mañana a la capital.

“El flujo (de migrantes) ha crecido de manera impresionante, estimamos que la trayectoria de años anteriores se duplica”, dijo Guillén. En cifras absolutas, el comisionado cree que 2019 podría cerrarse con un horizonte de 700 mil u 800 mil personas.

Guillén aseguró que un tercio de las personas que han sido detenidas por el INM (aunque la institución habla de “aseguradas” y nunca “detenidas” o “arrestadas”) son menores, entre 18 mil y 19 mil solo en lo que va de año. Dice que suelen llegar con problemas digestivos, respiratorios, con varicela o enfermedades de la piel, provocadas por las condiciones de falta de higiene en las que viajan.

“Es una situación muy difícil, no solo por los números sino por las condiciones que llevan los niños”. El comisionado explica este cambio en las tendencias migratorias, de jóvenes solos a familias con niños pequeños, en que “el flujo ha aprendido que llegar con niños te abre posibilidades de atención y de recepción más favorables (en Estados Unidos) que llegar sin niños”.


Si se ha multiplicado el número de menores indocumentados que transitan por México hacia Estados Unidos, ¿qué cambios en la política migratoria ha planteado el presidente Andrés Manuel López Obrador?

Guillén planteó dos líneas de actuación: un protocolo de atención a menores no acompañados, que los canaliza a los sistemas DIF y no a las estaciones migratorias, así como mantener a los menores que van con sus familias junto a sus padres y no separarlos. Es el caso de la niña guatemalteca. El problema, admitió, es que los centros en los que se mantiene encerrados a los migrantes que no tienen su situación regularizada es que “no tienen la infraestructura adecuada”. ¿Cayó la menor guatemalteca de una litera no preparada para que durmiese en ella una niña? Eso lo determinará la investigación.


A falta de saber qué ocurrió en este caso concreto, el comisionado explicó las acciones planeadas para que no se repita un fallecimiento de estas características. Recientemente, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, habló de transformar las estaciones migratorias en “albergues” y señaló que quienes tuviesen tarjeta de visitante por motivos humanitarios o permiso de trabajo podrían entrar y salir libremente. Bajo esas condiciones, la niña que murió en “Las Agujas” hubiese estado igualmente encerrada, ya que ni ella ni su madre tenían documentación alguna y solo esperaban a ser deportadas.

Falta mucho por conocer sobre este proceso que plantea Gobernación. Aunque el responsable del INM anunció un primer paso: la construcción de un “albergue” en Tapachula, Chiapas, uno de los municipios que recibe un mayor número de migrantes. “Ya veremos qué haremos con Siglo XXI”, dijo, en referencia a la estación migratoria actualmente en funcionamiento.

En una entrevista concedida a Newsweek Mexico y Animal Político en noviembre, Guillén dejó abierta la puerta a la construcción de nuevas infraestructuras, aunque hasta ahora no se habían ofrecido datos concretos sobre un proyecto y su ubicación.


La nueva infraestructura se ubicaría en un terreno de 15 hectáreas cercano al aeropuerto de Tapachula y tendría, según Guillén. “otro concepto, otro equipamiento, adecuado al perfil de las familias”.

FUENTE: ANIMAL POLÍTICO.
AUTOR: ALBERTO PADILLA.
LINK: https://www.animalpolitico.com/2019/05/migracion-instalaciones-inadecuadas/