Grupo Carso respondió a la acusación del presidente Andrés Manuel López Obrador por incumplimiento en la autopista Jala-Puerto Vallarta. “La obra se encuentra en total cumplimiento del programa vigente", y los retrasos se deben, en parte, a que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) no ha entregado un proyecto definitivo para toda la vía.
El fin de semana en gira por Nayarit, López Obrador censuró los incumplimientos en las concesiones de carreteras y amagó con quitar los permisos de la autopista Jala-Puerto Vallarta. "Ya lleva una empresa 10 años con la concesión y no avanza. Ya voy a hablar con ellos. O trabajan o se les quita la concesión. Que hagan las obras quienes quieran trabajar en beneficio del país", dijo sin mencionar a Impulsora del Desarrollo y el Empleo en América Latina (Ideal), filial de Grupo Carso.
A la alusión del presidente, la firma de Slim respondió que la construcción de la autopista se divide en tres tramos: Jala-Compostela, Compostela-Las Varas y Las Varas-Puerto Vallarta. Los dos primeros fueron concesionados al Fondo Nacional de Infraestructura (Fonadin) y sólo el último está a cargo de la Ideal y no desde hace diez años, sino tres.
"Es de nuestro conocimiento que el tramo Compostela-Las Varas ya se terminó y el tramo Jala-Compostela muestra un avance, pero sus trabajos fueron suspendidos hace varios meses", expuso Carso.
Y destacó que el proyecto del tercer tramo, de Las Varas a Puerto Vallarta, se adjudicó en junio de 2016 por medio de una licitación pública, bajo la figura de asociación público-privada (APP) y el título de concesión la SCT lo entregó para enero de 2017. Luego de un proceso de revisión, observaciones y autorización, la dependencia autorizó los primeros 11.7 km el 30 de agosto de 2018.
La empresa subrayó que el proyecto a su cargo, se divide en tres subtramos: del entronque Capomo al entronque Florida, donde se trabaja en 11.7 km (terracerías y obras de drenaje; otro más del entronque Florida al entronque Bucerías, donde se erigen los portales de los 3 túneles, siendo el Túnel Guamúchil, de 1.1 km, “la ruta crítica del proyecto”; y el último de Bucerías al Aeropuerto, donde la SCT no ha entregado un proyecto definitivo.
Entre los pendientes que denuncia Grupo Carso, se cuentan la "necesaria liberación de sobreanchos, entronques y algunos lunares en la troncal" a cargo de la SCT, así como estudios ambientales.
FUENTE: LA JORNADA
AUTOR: DORA VILLANUEVA