Arnulfo Cerón Soriano, defensor de derechos humanos, fue localizado sin vida en una fosa clandestina de Tlapa de Comonfort, en el estado de Guerrero.
Autoridades y activistas llevaron a cabo búsquedas en una zona que habría sido señalada por lo supuestos asesinos del activista.
Después de jornadas de trabajo con maquinaria pesada, el cadáver de Cerón Soriano fue hallado en el paraje conocido como Los Tres Postes, en el municipio guerrerense.
“Este miércoles, a las 12 del día, se confirmó el hallazgo del cuerpo de Arnulfo Cerón Soriano, desaparecido desde el 12 de octubre”, confirmó el Fiscal estatal Jorge Zuriel.
“Esta localización fue resultado del trabajo que se hizo con la carpeta de investigación, la aula permitió la detención de dos personas, quienes se encuentran vinculados como probables responsables”, señaló en una conferencia de prensa en la que estuvo presente el Gobernador Héctor Astudillo Flores.
“La Fiscalía investiga a cuatro sujetos más que estarían involucrados en la investigación y asesinato del activista”, agregó el funcionario.
Arnulfo fue víctima de intimidación y criminalización desde la administración priista anterior en Tlapa, Guerrero, pero la situación recrudeció con el Gobierno morenista actual, acusaron defensores.
El abogado salió de su casa el pasado 11 de octubre rumbo al Centro de Rehabilitación “La última esperanza”, del que es fundador y al que asistía para encabezar una sesión, pero no llegó.
Un día después, pese a que familiares del defensor de 47 años interpusieron una denuncia para urgir a las autoridades su búsqueda, fueron los integrantes del Frente Popular de la Montaña quienes encontraron su vehículo vacío y con las llaves aún colocadas, en la colonia Magistrado.
Desde hace aproximadamente tres años, Arnulfo acompaña a la organización de comerciantes indígenas y campesinos con asesorías jurídicas y es el intermediario con autoridades locales, estatales y federales a través del Frente Popular de la Montaña.
Abel Barrera, director del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, recordó en entrevista con SinEmbargo que las amenazas hacia Arnulfo incrementaron cuando, a finales de 2018, el Frente Popular buscó al morenista Dionicio Merced Pichardo García, Presidente municipal de Tlapa, para exigir que se transparentara el uso de recursos previstos para obras públicas desde el Gobierno de su antecesor, el priista Jesús Noé Abundiz García.
Sin embargo, Pichardo García aseguró que no contaban con el dinero necesario y no podían comprometerse a cumplir promesas de la administración pasada, desde entonces, el Frente Popular de la Montaña inició una serie de protestas y el Gobierno respondió al descalificar a Arnulfo Cerón.
“El Frente Popular exigía que se pudieran ejercer 26 millones de pesos que supuestamente la administración pasada había entregado para que se hicieran las obras que quedaron pendientes, desde esa fecha exigieron al nuevo Presidente y el dijo que no podía responder a dicha cantidad, lo que motivó a que la actual administración focalizará su lucha contra Arnulfo y el Frente”, denunció Abel Barrera.
En este contexto, Arnulfo Cerón responsabilizó desde el 26 de febrero de este año al Presidente Pichardo García y al jefe de su Gabinete, Marco Antonio García Morales, de lo que pudiera pasarle a él o a sus compañeros de la organización.
VIDA DE ACTIVISMO
Arnulfo Cerón Soriano inició su vida en el activismo cuando era universitario. En 1995 ingresó al Centro Tlachinollan como parte de su servicio social, cuando la organización llevaba un año operando, y trabajó por 18 meses con ellos.
Originario del pueblo nahua, Arnulfo pasó su infancia en Coyahualco,en el municipio Huamuxtitlán. “Siempre ha mantenido un perfil muy definido en la defensa de los derechos de la población de Tlapa”, recuerda Abel Barrera y menciona que desde su paso por Tlachinollan se interesó en trabajar con personas indígenas.
Después, se desempeñó como asesor jurídico en el ayuntamiento municipal de Metlátonoc, donde se enfrentó a la barrera lingüística, pues personas de distintos pueblos originarios acudían en busca de su apoyo.
El abogado fue también integrante de Movimiento Popular Guerrerense y otras causas que abrazó fueron la exigencia por justicia del asesinato del activista Antonio Vivar Díaz, cometido por policías federales en junio de 2017, además de participar en movilizaciones para la petición de la presentación con vida de los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa.
Desde hace años, Arnulfo ha recibido amenazas por su activismo. “Él no confiaba en las autoridades ministeriales, por eso tampoco pensó en interponer alguna denuncia”, aseguró Abel Barrera.
El activista miraba con desconfianza a las autoridades luego de que en el 2000 fue detenido por policías ministeriales de Guerrero acusado sin pruebas fiables del homicidio de unos de sus familiares. En esa ocasión, fue torturado para obligarlo a firmar una declaración de su culpabilidad. El Centro Tlachinollan logró que se le aplicara el protocolo de Estambul para probar que fue víctima de tortura y en esa ocasión obtuvo su sentencia absolutoria.
Con estos antecedentes, Cerón Soriano se incorporó como parte de la dirección colectiva del Frente Popular de Tlapa, que tiempo después se transformó en el Frente Popular de las Montaña porque su incidencia se extendió a al menos 10 municipios, ahí se encargó de fomentar la organización de las colonias y comunidades.
FUENTE: SIN EMBARGO.
AUTOR: REDACCIÓN.
FECHA: 20 NOVIEMBRE 2019.
LINK: https://www.sinembargo.mx/20-11-2019/3682292