“Cemex ha mantenido comunicación constante con el Gobierno Federal mexicano para determinar si alguno de sus productos o servicios es necesario para garantizar la continuidad de las actividades esenciales definidas en el decreto”, informó la cementera en un comunicado enviado a la Bolsa Mexicana de Valores.El documento estableció que la empresa está lista, en línea con los requisitos sanitarios y de salud establecidos por la Administración federal, para reanudar operaciones en cuanto las autoridades determinen que la industria de la construcción debe reiniciar actividades, aún si esto ocurre antes de lo programado.
“La salud y la seguridad de empleados, contratistas, proveedores, clientes y comunidades son prioridad para la compañía”, expresó Cemex, por lo que tomó medidas para reforzar su posición operativa y financiera.Desde la activación de la emergencia sanitaria, el 30 de marzo, Cemex activó sus equipos de respuesta ráida, dijo su presidente Fernando González Olivieri, con el fin de generar estrategias de medias preventivas para enfrentar la crisis de salud “sin precedente”.
El empresario expresó el apoyo de la cementera mexicana con el Gobierno y la sociedad. “Somos conscientes del reto que enfrentamos, pero confío en que juntos saldremos adelante”, dijo. Además, recordó que los equipos comerciales de Cemex alrededor del mundo se han mantenido en contacto constante con sus clientes de manera remota a través de la plataforma Cemex Go.
Cemex identificó iniciativas de reducción de costos por 200 millones de dólares que, anticipó, se lograrán en 2020 y está evaluando aplazar ciertas inversiones en activo fijo que se habían contemplado para este año. En fechas recientes la empresa dispuso mil 135 millones de dólares de su contrato de crédito revolvente al haber recibido 500 millones de dólares por la venta de activos.
“Dada la incertidumbre sobre la duración, severidad y alcance global de la situación del COVID-19, los estimados para el año 2020 previamente anunciados por CEMEX ya no son válidos. La compañía monitorea de cerca la pandemia global de COVID-19 y dará una actualización de información durante su llamada de resultados del primer trimestre de 2020”, afirmó la compañía.
El 1 de abril la Cámara Nacional de Cemento (Canacem) anunció la suspensión de las operaciones, a partir del 4 de abril, de todas las cementeras afiliadas al organismo ante la declaración de emergencia sanitaria por el COVID-19.
Al no ser considerada como una actividad esencial, las empresas dejarán de abastecer a la obra pública y privada, así como a las más de 62 mil ferreterías y otros distribuidores. Sus trabajadores recibirá de manera íntegra su salario y prestaciones del 3o de marzo al 30 de abril.
FUENTE: SIN EMBARGO.
AUTOR: REDACCIÓN.
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