La pandemia de covid-19 evidenció en el Estado de México las carencias del sector salud en materia de infraestructura hospitalaria y dotación de insumos, a pesar de que en 2019 se le asignó 26% del gasto programable estatal, a decir de Rodrigo Jarque, secretario mexiquense de Finanzas.
Pese a las recomendaciones oficiales de sana distancia y las jornadas para mitigar la transmisión de coronavirus, los casos confirmados en la entidad aumentaron de 910 el 20 de abril a 3 mil 130 el 30, lo que implica un crecimiento de casi 300%.
La semana pasada el gobernador Alfredo del Mazo alertó sobre la posible saturación de los hospitales en la etapa más álgida de contagios, que se prevé sea este mes. El mandatario priista dijo que se reorganizaron los 106 hospitales del estado, se designaron 30 de ellos para atender a pacientes de covid-19, se dotó al personal de salud con más equipo médico, camas y ventiladores, así como se adaptaron otras instalaciones para aumentar la capacidad de atención.
Sin embargo, personal del sector, lo mismo que vecinos y actores políticos, señalan que las deficiencias en materia de salud prevalecen en la entidad al menos desde el sexenio anterior y se hicieron más evidentes en la presente emergencia sanitaria.
Esto provocó ya movilizaciones de médicos, enfermeras y empleados administrativos de diversos nosocomios en municipios como Toluca, Chimalhuacán, Nezahualcóyotl, Lerma, Xonacatlán, Zinacantepec, Texcoco, Chiautla, Atizapán, Ecatepec, Ixtapaluca y Tlalnepantla. Demandan que se les surta el equipo necesario para garantizar la atención adecuada a los pacientes.
Además, el Sindicato Estatal de Servicios de Salud del Estado de México promovió al menos dos amparos y logró que se ordenara dotar de equipo de protección al personal hospitalario dependiente del Instituto de Salud del Estado de México (ISEM).
En cuanto a los espacios de atención, comienzan a verse rebasados. En el Hospital La Perla, de Nezahualcóyotl, sólo se prepararon 40 camas para atender los casos positivos de covid-19, cuando la Secretaría de Salud reporta que 50.77% de los casos en el municipio han requerido hospitalización y su población hasta 2015 era de 1 millón 131 mil 976 habitantes, según datos del Instituto Nacional de Geografía y Estadística.
En Ecatepec, donde 58.16% de los contagiados han sido hospitalizados, la diputada local morenista Azucena Cisneros calificó de “una vacilada” la designación del Hospital Las Américas para atender la pandemia, pues apenas tiene entre 50 y 60 camas y “se encuentra rebasado desde hace años” por las necesidades de 1 millón 677 mil 687 habitantes (hasta 2015).
En Tlalnepantla, cuarto lugar estatal en contagios, el exregidor perredista José Luis Cortés Trejo promovió una denuncia ante la Secretaría estatal de la Contraloría contra el secretario de Salud, Gabriel O’Shea, por incumplimiento de las funciones, atribuciones y comisiones encomendadas.
Cortés Trejo recuerda en su denuncia que el 19 de septiembre de 2017 fue cerrado el Hospital General Valle Ceylán, que daba servicio a más de 500 mil personas de Tlalnepantla y Tultitlán, quienes a la fecha “se encuentran sin la protección de la salud” porque el nosocomio no ha sido reabierto ni repuesto.
Lo anterior, a pesar de que el 9 de octubre de ese año el gobernador Del Mazo ordenó reactivar de inmediato el nuevo hospital en el oriente de Tlalnepantla y pidió dictamen sobre la estructura del Hospital General Valle Ceylán, supuestamente afectado por el sismo. En la presente emergencia, 38% de los casos positivos de coronavirus en Tlalnepantla ha requerido hospitalización y en promedio se detectan 15 diariamente.
En tanto, ediles y funcionarios de Chimalhuacán –el quinto municipio mexiquense más afectado por la pandemia, gobernado por el antorchista Jesús Tolentino Román Bojórquez– exigieron al gobierno de Del Mazo que se incremente el apoyo o los servicios de salud colapsarán en menos de una semana, considerando que 77.78% de los contagiados locales han sido hospitalizados.
La novena regidora de esa demarcación, Socorro Pérez, indicó que el hospital local “90 Camas” sólo cuenta con 60 lugares para pacientes de covid-19, pues recientemente fue ampliado pero no equipado. Urgió también a integrar el hospital San Agustín a la red de nosocomios contra el coronavirus y a habilitar el teatro Acolmixtli Nezahualcóyotl con 140 camas para atender a los afectados.
A su vez el secretario del ayuntamiento, Saúl Torres, indicó que el ISEM no les ha dado ninguna respuesta a la solicitud de insumos y sólo recomendó guardar “sana distancia”. Este escenario se repite en diversos nosocomios de las zonas con mayor contagio.
Un sistema frágil
Las deficiencias de infraestructura e insumos de salud datan del sexenio de Eruviel Ávila, cuando se empezó pero no se concluyó la construcción de hospitales como los de Acolman, Chicoloapan, Coacalco, Izcalli, Tepotzotlán y Zumpango.
Esto, sumado a una deuda de al menos 9 mil millones de pesos y otras inconsistencias, llevaron a la mayoría morenista en la Legislatura local a no aprobar, por primera ocasión, la Cuenta Pública 2018 en dependencias como el ISEM.
El Órgano Superior de Fiscalización del Estado de México (OSFEM), ahora Auditoría Superior del Estado de México, debe concluir revisiones especiales a los ejercicios 2014-2018 para instaurar procedimientos de responsabilidad administrativa y dar vista a las autoridades a fin de sancionar a los responsables de las irregularidades.
El dictamen sobre dicha cuenta pública especifica que la Auditoría Superior estatal debe continuar los procesos de aclaración y solventación de los organismos y programas con mal índice de cumplimiento financiero y de resultados, como el Hospital Regional de Zumpango y el programa Salud para la Mujer, entre otros.
En el informe de revisión de ese ejercicio, el OSFEM encontró que el ISEM debe aclarar el uso de más de 26 mil millones de pesos –39% del gasto en salud modificado (66 mil 807 millones)–, en tanto que deben reintegrarse a la hacienda pública más de 725 millones y medio.
En la actualidad, con 17 millones 245 mil 551 habitantes en 2019, el Estado de México es el más populoso, con 13.6% de la población nacional. Hasta el cierre de edición, según datos de la Secretaría de Salud, es la segunda entidad en casos confirmados de covid-19, sólo después de la Ciudad de México.
Los contagios se concentran en municipios colindantes con la capital del país y Toluca. Nezahualcóyotl es el de mayor incidencia, con cerca de 400 casos confirmados y más de 20 defunciones. Con un índice de letalidad superior a 5%, las estadísticas de la autoridad federal de Salud registran en la demarcación 37 o 38 casos positivos diariamente.
Le siguen Ecatepec, con un promedio diario de 27 casos confirmados; Naucalpan y Tlalnepantla, con más de 200 acumulados cada uno; Chimalhuacán, Chalco, Atizapán de Zaragoza, Izcalli e Ixtapaluca, con más de 100 acumulados, mientras que Tecámac, Huixquilucan, Nicolás Romero y Tultitlán ya se acercan a la centena. Por su parte, Valle de Chalco, Los Reyes La Paz, Cuautitlán y Coacalco ya rebasan los 50 casos acumulados y Texcoco se acerca a esa cifra.
Todos ellos son municipios urbanos, lo que dificulta la aplicación de la medida de sana distancia. Con menos habitantes que Ecatepec, Nezahualcóyotl lidera la tasa de contagios, lo que el alcalde Juan Hugo de la Rosa atribuye a su mayor densidad poblacional: 16 mil 436.2 habitantes por kilómetro cuadrado.
Ecatepec, el municipio más poblado de América Latina, tiene el segundo lugar de contagios y su densidad es de 10 mil 740.9 habitantes por kilómetro cuadrado. En el estado la densidad media es de 771.56 habitantes por kilómetro cuadrado, con base en las proyecciones del Consejo Nacional de Población 2016-2050 y de límites territoriales del Instituto de Información e Investigación Geográfica, Estadística y Catastral del Estado de México.
Incredulidad y apatía
Lourdes vive en la colonia Jardines de Morelos, una de las más peligrosas de Ecatepec, y advierte que poca gente usa cubrebocas, mantiene su sana distancia o limita sus salidas a la calle, porque los vecinos “no creen en la existencia del virus… En las calles hay jóvenes jugando en cuadrillas… Hay apatía, incredulidad y un alto nivel de descomposición social de 2001 a la fecha, cuando comenzaron a asentarse vecinos de fuera”.
Señala que la mayoría de los 301 tianguis siguen operando, igual que más de la mitad de los establecimientos de actividades no sustantivas, incluidos “centros cheleros” clandestinos, cuyos propietarios arrancan los sellos si los clausuran. Son contados los establecimientos que recientemente colocaron señales en el piso para marcar la sana distancia entre clientes, además de cubrir sus ventanillas y cajas con hule cristal.
Por lo pronto, los gobiernos de Ecatepec y Nezahualcóyotl acordaron acciones coordinadas para frenar el avance de los contagios e invitaron a sumarse a su esfuerzo a los alcaldes de Gustavo A. Madero, Venustiano Carranza, Iztapalapa, Iztacalco, Texcoco y La Paz.
Fernando Vilchis, presidente municipal de Ecatepec, considera que algunas prioridades en esta contingencia son reducir la alta movilidad en la zona metropolitana, garantizar la sanitización de unidades del transporte público e insistir a la ciudadanía para que acate las recomendaciones sanitarias, sobre todo la de quedarse en casa.
Ese ayuntamiento informó que dispuso, a través del DIF municipal, consultorios gratuitos en sus unidades médicas para detectar casos de coronavirus. Añadió que, para imponer la sana distancia, desmanteló cerca de 28 fiestas clandestinas donde adolescentes y jóvenes ingerían bebidas alcohólicas, restringió la venta de éstas y detuvo a 50 de los presuntos organizadores, además de realizar operativos permanentes para suspender actividades de negocios no esenciales, de los cuales ha cerrado más de 250 por no respetar las medidas sanitarias.
A su vez, la diputada local morenista Azucena Cisneros se opone a las sanciones contra los vecinos como política pública. “Todo por la razón, nada por la fuerza”, dijo. Indica que no se perciben como deberían las campañas para persuadir a la gente de protegerse del virus: “No veo carteles, campañas de penetración. Tienes que ayudarle a la gente para que lo entienda, hay que agotar el diálogo”.
A decir de la legisladora, debe tomarse en cuenta el bajo nivel económico de la mayoría de la población y que un porcentaje importante vive de la informalidad, lo que hace vulnerable a 70% de los habitantes frente a la pandemia.
“Lo coercitivo, quizá en otro país funcione, no en México; no tenemos seguro de desempleo efectivo, aquí la gente se muere de hambre, no hay condiciones”, plantea.
Finalmente, lamenta la falta de iniciativa del gobierno estatal para instalar una mesa de trabajo metropolitana y una estrategia conjunta. “El gobernador debe convocar, pero brilla por su ausencia”.
FUENTE: PROCESO.
AUTOR: VENERANDA MENDOZA.
LINK: https://www.proceso.com.mx/628582/la-zona-conurbada-mexiquense-una-bomba-viral