Alma Itzel Romero García, de 21 años de edad y desaparecida el pasado 3 de noviembre, fue hallada sin vida en el municipio de Santa Cruz Itundujia, en Oaxaca.
De acuerdo con los reportes, el cuerpo sin vida de la joven fue hallado el 7 de noviembre en la comunidad Zaragoza, y presentaba señales de violencia y se presume que fue arrojado al río.
Apenas concluyó sus estudios de bachillerato en 2017, Alma Itzel Romero emigró a la ciudad de Tijuana, Baja California, para trabajar en una fábrica, con el sueño de algún día poder estudiar la licenciatura en Gastronomía.
Sin embargo, el pasado 25 de octubre Alma Itzel regresó a su comunidad de Morelos Itundujia para pasar con su familia la celebración de Todos Santos y los Fieles Difuntos. Sin embargo, un excompañero del bachillerato la invitó a la celebración del Día de Muertos en la casa de su familia, ubicada en la comunidad de Victoria Itundujia, a la que acudió por ser una persona de confianza.
La madre relató que el día 2 de noviembre del 2020, un joven de nombre Arturo Ramírez Peña paso por Alma Itzel a bordo de una motocicleta, llevándola a casa de los padres de su amigo Javier Sánchez. Por la distancia y por lo accidentado del lugar, Alma Itzel le mandó mensajes a su mamá para decirle que llegaría el 3 de noviembre.
Al perder contacto con su hija, el día 4 de noviembre la señora Mayra García Cruz fue a la comunidad de Victoria Itundujia a entrevistarse con el joven Javier Sánchez, quien le manifestó que Alma Itzel ya se había ido desde el día 3 de noviembre y que le había pedido a su primo, Nicanor Ramírez Peña, que la llevara en su moto
Por su parte, Nicanor Ramírez Peña le confirmó que él llevaba Alma Itzel de regreso pero que, en el camino antes de llegar al rio, en la barranca del mamey, él se bajó para ir al baño, pero, cuando regresó, la joven ya no estaba.
Según él, Alma Itzel le había quitado la bujía de la moto, pero la siguió hasta la colonia Primavera y después ya no la vio.
La señora Mayra García Cruz, Javier Sánchez y Nicanor Ramírez Peña se trasladaron a la Agencia Municipal de Victoria Itundujia informándole al Agente de Policía la desaparición de Alma Itzel.
Ahí, la madre de la joven solicitó que detuvieran a Nicanor Ramírez Peña; sin embargo, el agente manifestó que tenía que consultarlo con las autoridades del municipio, diciéndole que no se podía detener en ese momento hasta que se pusiera la denuncia en la sindicatura y en la Fiscalía de Tlaxiaco.
Y en lo que se presentó la denuncia ante la Sindicatura y la Fiscalía de Tlaxiaco, transcurrió el tiempo suficiente para que el joven Nicanor Ramírez Peña se diera a la fuga.
Una vez que se le dio aviso a las autoridades, los vecinos de la comunidad de Morelos Itundujia iniciaron la búsqueda el 4 de noviembre, mientras que la Fiscalía y de la Guardia Nacional lo hizo un día después.
Desafortunadamente, el cadáver de Alma Itzel fue encontrado el día 7 de noviembre aproximadamente a las 15:00 horas en la comunidad de Zaragoza en el paraje “el pescadillo”, sobre el río grande.
Con el acompañamiento de los Centros de Derechos Humanos y Asesoría a Pueblos Indígenas (CEDHAPI) y “Bartolomé Carrasco Briseño” (BARCA), la madre de la víctima insistió:
“Yo lo único que le pido a las autoridades es que hagan su trabajo, que ahora no queremos venganza, queremos justicia; como dijo el padre, nada me va a devolver a mi hija, pero sí nos va a devolver la seguridad de otras niñas y otros niños, nos va a devolver esa seguridad, porque teniendo una persona así en nuestra comunidad nunca estamos tranquilos de dejar a nuestros hijos. Los jóvenes y los niños son libres de disfrutar la vida, de vivir, de gozar, nadie tiene derecho a quitarles la vida ni mucho menos como le hicieron a mi hija”.
“En nombre de mi hija yo si les pido a todos que me apoyen en eso para que las autoridades, que en su momento no actuaron, que por favor busquen a la persona y se haga responsable, que pague por lo que le hizo a mi hija y lo que les pueda pasar a otras jóvenes”, añadió.
Insistió en que “yo creo que todos somos libres de hacer lo que queramos, cada quien vive su propia vida, nadie mantiene a nadie y cada quien se porta como puede, pero eso no le da ningún derecho de quitarle la vida, de destruir a una familia así y el corazón de una madre”.
Finalmente los defensores de derechos humanos, Minerva Nora Martínez Lázaro (BARCA) y Maurilio Santiago Reyes (CEDHAPI) se pronunciaron porque la Fiscalía General de Oaxaca investigue el feminicidio de Alma Itzel Romero García y se castigue a los responsables.
FUENTE: PROCESO.
AUTOR: PEDRO MATÍAS.
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