El Movimiento Morelense Contra las Concesiones de Minería por Metales lanzó una petición para exigir la cancelación de dos concesiones otorgadas a la empresa Esperanza Silver de México, subsidiaria de la canadiense Alamos Gold Inc., en el municipio de Temixco, Morelos.
Agregó que la minería aceleraría la escasez de agua que ya existe en la región, pues diariamente extraería 2 millones de litros de agua del acuífero de Cuernavaca, lo que «pone en riesgo la seguridad del derecho humano al agua -incluyendo el servicio del agua potable-, al generar una disputa por el uso del hídrico y la contaminación de los mantos acuíferos, causando una afectación en la salud y calidad de vida».
Finalmente, el Movimiento Morelense denunció que las detonaciones producidas por la actividad extractiva de minería metálica también vulnerarán a la vecina Zona Arqueológica de Xochicalco, «afectando irremediablemente sus estructuras, y degradando de manera irreversible su entorno».
La petición completa:
Los firmantes, con base en los artículos 1, 4, 6 y 8 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, 42, fracción IV, 43 y 45 de la Ley Minera y 74 fracción IV, 75 y 77 de su Reglamento y bajo el Principio Precautorio señalado en el numeral 15 de la Declaración de Río sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo, solicitamos su involucramiento activo para que sean canceladas las concesiones mineras núm. 215624 “Esperanza I” y núm. 220742 “Esperanza II”, a favor de la empresa Esperanza Silver de México S.A. de C.V. subsidiaria de la canadiense Alamos Gold Inc. en el municipio de Temixco, Morelos, ahora que la empresa ha anunciado que planea iniciar la etapa de explotación para extraer oro de dichas concesiones en 2022. Morelos claramente no tiene vocación económica para desarrollar minería metálica y sí en cambio, turística, agrícola y de otros giros industriales.
En un radio de 10 kilómetros desde donde se proyecta realizar el emprendimiento minero, abarcando superficies de los municipios de Temixco, Xochitepec, Miacatlán, Emiliano Zapata y Coatetelco, 200,000 personas se verán afectadas de manera irremediable en su salud, en su entorno ambiental, en la posibilidad de desarrollar actividades económicas sustentables y en su patrimonio, por el polvo, la contaminación de la tierra y el agua superficial y subterránea como efecto de la extracción y procesamiento minero.
Además, aceleraría la escasez de agua que ya existe en la región por la extracción diaria de 2,000,000 de litros de agua del acuífero de Cuernavaca que pone en riesgo la seguridad del derecho humano al agua -incluyendo el servicio del agua potable-, al generar una disputa por el uso del hídrico y la contaminación de los mantos acuíferos, causando una afectación en la salud y calidad de vida. Dichos impactos ambientales también afectarán el entorno adyacente, abarcando superficies de los municipios de Cuernavaca y Jiutepec a 15 km de distancia.
Las detonaciones producidas por la actividad extractiva de minería metálica también vulnerarán a la vecina Zona Arqueológica de Xochicalco, afectando irremediablemente sus estructuras, y degradando de manera irreversible su entorno.
Nuestra petición se atiene al Principio Precautorio y por ello hacemos esta solicitud antes de que la empresa presente nuevamente su Manifestación de Impacto Ambiental a la Semarnat para iniciar la explotación minera, ante las afectaciones múltiples e irreversibles ambientales –contaminación, cambio climático, escasez de agua y pérdida de la biodiversidad– pero también por ello económicas, sanitarias y culturales que genera este tipo de minería, ya documentadas en todo el mundo.
Movimiento Morelense Contra las Concesiones de Minería por Metales
AUTOR: REDACCIÓN.
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