“El retorno se da en un contexto de falta de protección a las personas en situación de desplazamiento forzado interno en Chiapas, así como la falta de verdad y acceso a la justicia”, denunció el Frayba y exigió al Estado mexicano atender las causas de fondo, así como garantizar la salud, la integridad y la seguridad personal de las 30 personas que retornaron a su comunidad. Además, la organización civil exigió la reparación integral del daño para las familias tsotsiles.
El Frayba aseguró que la violencia en la región continúa, principalmente en los municipios de Aldama, Chalchihuitán, Chilón, Pantelhó y Venustiano Carranza, y recalcó la falta de respuesta del Estado que “permite la vulneración continua y múltiple de derechos, enmarcándose dentro de una situación estructural de tratos crueles, inhumanos y degradantes y tortura”.
Las familias de Río Jordán fueron desplazadas de manera violenta el 16 de agosto de 2019 por no aceptar proyectos gubernamentales, indicó el Centro de Derechos Humanos, además, durante el periodo del desplazamiento forzado fallecieron las niñas María Angélica Jiménez y la niña María del Carmen Jiménez Ramírez.
La Red Todos los Derechos para Todas y Todos (TdT) exigió a las autoridades de los distintos niveles de gobierno atender la «violencia estructural y sistemática» en la región, así como proteger a las personas víctimas de desplazamiento quienes presentan «graves impactos psicosociales».
Ante la falta de respuesta por parte de las autoridades, las familias tsotsiles decidieron retornar en compañía de integrantes de las autoridades de la Mesa Directiva de Las Abejas de Acteal, colectivos en solidaridad, autoridades religiosas, organizaciones de derechos humanos y medios de comunicación, señaló el Frayba.
AUTOR: REDACCIÓN.
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