La compra y distribución consolidada de medicamentos en México está bajo fuego. A casi dos años de que el gobierno federal eliminó a los proveedores que, durante los últimos gobiernos del PRI y del PAN, compraban, financiaban y entregaban medicamentos a todos los hospitales del sector público, la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS) aún enfrenta problemas para cumplir en tiempo y forma los alcances del acuerdo firmado con el gobierno federal, para hacerse cargo de la adquisición integrada de medicamentos hasta 2024.
Por ello, el organismo de la ONU intentó que el gobierno mexicano reconsiderara las posiciones del Laboratorio PISA para la compra de fármacos contra el cáncer.
Proceso confirmó que, al recibir las posiciones de Laboratorios PISA para vender medicamentos oncológicos al Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), la UNOPS consultó al gobierno federal sobre la posibilidad de analizar y considerar las propuestas del grupo con sede en Jalisco, que fue inhabilitado y cuya participación en las compras de gobierno ha disminuido sustancialmente luego de que la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) suspendió a finales de 2019 la operación de sus plantas ante el incumplimiento de algunas medidas sanitarias en sus instalaciones.
Ahora PISA cuenta con una planta nueva en Jalisco, con registros sanitarios en orden y, en teoría, estaría lista para comenzar a producir los medicamentos oncológicos. Además, tanto PISA como su filial DIMESA, proveedora de los servicios de mezclas para los medicamentos oncológicos, obtuvieron amparos de los tribunales de justicia administrativa contra los procesos de inhabilitación promovidos por la Secretaría de la Función Pública.
Estos fueron algunos de los argumentos que la UNOPS expuso ante el Insabi para que le permitieran analizar las propuestas que PISA presentó sobre la adquisición de medicamentos oncológicos para la compra consolidada de entidades federales, con miras al abastecimiento en el año 2021, lo que permitiría adquirir los medicamentos en el mercado interno y reducir las importaciones.
No obstante, el Insabi rechazó esta posibilidad. “Sí hubo desencuentros con los funcionarios de la UNOPS por este motivo”, aseguró una fuente del sector salud.
En su informe anual, incluso, el Insabi fijó su posición en un informe de sus actividades en 2020 y recordó que en 2019 los Laboratorios PISA aparecen como empresa monopólica del mercado de medicamentos oncológicos. En la licitación de 2019 fue el mayor adjudicado, con un monto de 888.3 millones de pesos y un total de 75 millones 443 mil 313 piezas correspondientes a 65 claves.
Para la licitación de 2020, a Laboratorios PISA se le adjudicó 9.6% del total de las claves licitadas. Alertó también “que existe la posibilidad de repetir la historia de los oncológicos, ya que son estos laboratorios los únicos proveedores nacionales con registro vigente, certificado de buenas prácticas de fabricación vigente y sin suspensión de actividades”.
Fragmento del reportaje publicado en la edición 2329 del semanario Proceso
FUENTE: PROCESO.
AUTOR: CLAUDIA VILLEGAS.
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