A pocas semanas de que una delegación zapatista viaje por vía aérea para encontrarse con movimientos y organizaciones sociales de Europa, la cancillería les ha negado sistemáticamente el trámite de su pasaporte, aún cumpliendo con todos los requisitos, denunció la comunidad otomí la mañana de este miércoles.
Los otomíes, quienes sostienen la toma del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) desde el pasado 12 de octubre, denunciaron que, al igual que los zapatistas, han sufrido discriminación por parte del gobierno de Claudia Sheinbaum, pues, a ocho meses de la toma del INPI, no ha habido respuesta a sus demandas de salud, trabajo, vivienda, educación, alimentación y autonomía.
“Desprecio y racismo ha sido la respuesta por nuestro color de piel, por tener una lengua originaria, por ser mujeres y hombres de la tierra, por abrazar una cultura milenaria y no sentirnos avergonzados de lo que somos”, señalaron, y agregaron que “vergüenza debería de darle a los gobiernos, al canciller Marcerlo Ebrard, culpable de la tragedia de la línea 12 del metro”.
Advirtieron que, además de racismo y desprecio, el gobierno también tiene miedo a la palabra de los zapatistas, y que “no quieren que salgan a decir lo que pasa en este país atormentado por malos gobernantes y capitalistas”.
AUTOR: ERIKA LOZANO.
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