Eduardo Arellano Félix optó por no declarar en la la audiencia de imputación que se realizó en el Estado de México y en la que la FGR lo acusó de al menos tres delitos.
La audiencia se celebró la noche del martes a través del sistema de videoconferencia, la cual fue presidida por Enrique Beltrán Santes, Juez Segundo de Distrito de Procesos Penales con sede en Toluca, Estado de México. El capo sinaloense escuchó las imputaciones en una sala del Centro de Justicia Penal, en el Centro Federal de Readaptación Social Número 1, “El Altiplano”, ubicado en el municipio de Almoloya de Juárez.
Después de que Eduardo Arellano Félix optó por su negativa por declarar, comenzó a correr el término de 72 horas –que podrían ser ampliados si así lo solicita la defensa de Arellano Félix– para resolver su situación jurídica y que el Juez federal determine si le dicta auto de formal prisión o de formal libertad.
El 23 de agosto, Elementos de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) de la FGR y de la Sedena recibieron al capo en medio de un fuerte operativo de seguridad.
“El Doctor”, como se le conoce, fue entregado a México por el Servicio de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE), luego que en Estados Unidos fuera condenado a 15 años de prisión, pena que no completó debido a su amplia cooperación con las autoridades estadounidenses, la cual comenzó en mayo de 2013 cuando se declaró culpable.
La FGR confirmó que Arellano Félix fue entregado a México e informó que se cumplimentó la orden de aprehensión por delitos de delincuencia organizada y otros.
#FGRInfoma: #FGR y la @SEDENAmx recibieron a Eduardo “A”, para el cumplimiento de una orden de aprehensión en su contra, por su probable responsabilidad en los delitos de delincuencia organizada, contra la salud y asociación delictuosa.
— FGR México (@FGRMexico) August 23, 2021
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La dependencia precisó que a las 17:15 horas del lunes 23 de agosto fue recibido en el Puente Internacional Brownsville-Matamoros. Arellano Félix fue detenido en 2008 en Tijuana, Baja California, para ser posteriormente extraditado a los Estados Unidos de América en 2012, por numerosas acusaciones de diversos delitos, respecto a lo cual las autoridades de ese país ofrecían una recompensa de cinco millones de dólares.
Eduardo Arellano fue condenado a 15 años de cárcel y, en razón de su cooperación con las autoridades de ese país, fue condenado sólo por dos de los siete cargos por los que fue acusado en su extradición.
Después de cumplir esa parte de condena en una prisión federal de baja seguridad en Allentown, Pensilvania, las autoridades migratorias de los Estados Unidos de América (Servicio de Control de Inmigración y Aduanas), lo pusieron a disposición de las autoridades mexicanas.
AUTOR: REDACCIÓN.
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