El pasado 20 de septiembre, la Fiscalía General del Estado (FGE) localizó los cuerpos de la activista feminista y militante de Morena, Rosalba G.A.R., de 36 años de edad, y de sus hijas Zoelmy y Rubí, de 13 años y 11 años, respectivamente, quienes desde el 13 de septiembre habían sido reportadas como desaparecidas por la madre de la primera.
Los cadáveres se encontraron en una fosa séptica de la sala de fiestas Los Sauces, en el poblado de Chiná, conurbado a esta capital. De acuerdo con la necropsia, las tres fallecieron por sofocación y traumatismo craneoencefálico.
Hernández Zavala, expareja de la mayor de las víctimas, fue detenido ese mismo día, igual que una mujer, identificada con las iniciales M.G.C.C., quien fue imputada como presunta cómplice del feminicida en el delito de desaparición de personas.
La pareja fue presentada ante un juez de control en audiencia de imputación.
Hernández Zavala confesó su crimen y, con la aceptación de la contraparte, se acogió a un procedimiento abreviado en el que se le declaró culpable y se le condenó a 80 años de prisión por los delitos de feminicidio y desaparición de personas.
También se le ordenó pagar a las víctimas indirectas, como reparación del daño, 2 millones 855 mil 255 pesos, que serán cubiertos con mensualidades de 2 mil 974.24.
Por su parte, la presunta cómplice solicitó la ampliación del término constitucional, por lo que en su caso la audiencia continuará el 27 de septiembre. Mientras tanto, se le impuso la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa.
FUENTE: PROCESO.
AUTOR: ROSA SANTANA.
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