Sin embargo, ya se han presentado quejas en relación a la atención a los derechos humanos, ya que Comisión de Derechos Humanos del Estado de Campeche (Codhecam) detectó a migrantes con síntomas asociados al Covid-19, por lo que reportó a la Coordinación Regional del INM, que prácticamente obligó a la Secretaría de Salud Estatal a enviar brigadas de salud a revisar el problema.
Como resultado, la Secretaria de Salud Estatal, Liliana Montejo León, emitió un comunicado en el que descarta que hubiese casos de contagios con el virus entre ellos, pero después admitió que la dependencia a su cargo no había realizado pruebas a todos los migrantes, sino que se aplicó las mismas a solamente cuatrocientos de los Mil 200 que se encuentran en ambos campamentos, lo que ha causado la preocupación y la indignación del Congreso, por lo que la Presidenta de la comisión de Salud, Karla Toledo Zamora, calificó de alarmante el descuido e irresponsabilidad de la Secretaría de Salud Estatal, y la exhortó a atender con más puntualidad el tema y no minimizar el peligro de contagio, por la salud de los mismos migrantes y la de todos los campechanos.
Las quejas se han multiplicado en los diferentes albergues. En los de Villahermosa, Tabasco, los migrantes que se encontraban allí, en su mayoría salvadoreños y hondureños, denuncian malos tratos al interior del albergue: “tenemos cinco días de no bañarnos, sin comida, sin leche, sin nada. Mira yo embarazada, no es justo”, se quejaba una mujer, por lo cual decidieron fugarse.
En los albergues de Campeche también ya empezaron a retirarse los inmigrantes albergados, la mayoría de ellos sin haber recibido aún una respuesta respecto a su solicitud de asilo.
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