Desde este miércoles 15, el Departamento de Estado, dirigido por el secretario Antony Blinken, agregó a la lista de bloqueos financieros y activos en Estados Unidos a la banda de Los Rojos, Guerreros Unidos y La Familia Michoacana, tres organizaciones criminales escindidas del cártel de Los Beltrán Leyva y que actualmente tienen su centro de operaciones en las regiones Centro, Norte y Tierra Caliente.
De acuerdo a las órdenes ejecutivas del gobierno de Estados Unidos que contempla imponer sanciones a las personas y organizaciones involucradas en el tráfico ilícito de drogas a nivel mundial, “en los últimos años” Los Rojos, grupo formado por Jesús Nava Romero y actualmente dirigido por Onésimo Marquina Chapa "El Necho", se ha convertido en una de las organizaciones criminales “más poderosas de México”.
“Además de generar violencia en México, la banda de Los Rojos es responsable del tráfico de numerosas drogas ilícitas, incluida la heroína, hacia los Estados Unidos”, señala el documento emitido por el gobierno estadounidense.
En el caso de los Guerreros Unidos, organización fundada por el fallecido Mario Casarrubias Salgado en Teloloapan y vinculada con la masacre y desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, se indica que originalmente era un grupo escindido del cartel de los Beltrán Leyva, pero que “a través de la violencia, expandió su papel en el comercio de heroína”.
“Los Guerreros Unidos colabora con la organización mexicana de narcotráfico, Cártel de Jalisco Nueva Generación, y comparte las mismas redes de transporte para trasladar cargamentos de drogas a Estados Unidos y devolver las ganancias de las drogas a México”, indica el documento del Departamento de Estado.
Mientras que de la Familia Michoacana, grupo liderado por los hermanos Johnny "El Mojarro" y Alfredo "La Fresa" Hurtado Olascoaga y afincado en el municipio de Arcelia, se indica que son responsables del trasiego de drogas a los Estados Unidos procedentes de los estados de México, Guerrero y Michoacán.
En junio de 2018, Proceso informó que al menos, 19 “grupos civiles armados” y una organización denominada “policía comunitaria” operan en el 50% del territorio guerrerense -40 de los 81 municipios- donde 18 bandas criminales controlan y mantienen una brutal disputa por el control de las zonas de producción, trasiego y venta de droga en las siete regiones de la entidad, indica un informe oficial de la administración del ex gobernador Héctor Astudillo Flores.
El documento oficial señaló en ese entonces que en la zona Norte de Guerrero operan los grupos de Guerreros Unidos; la Familia Michoacana; Gente Nueva y Los Rojos donde mantiene presencia los grupos civiles armados denominados como la policía comunitaria de Tepecoacuilco, de Mezcala y Cuetzala; así como La Tecampanera y el movimiento Apaxtlense.
Mientras que en la región de Tierra Caliente, el gobierno estatal ubica a los grupos delictivos de los Caballeros Templarios; la Familia Michoacana; Los Tequileros y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) donde operan de forma paralela la autodefensa de San Miguel Totolapan y la Guardia Rural de Ejidos Unidos de Guerrero, principalmente en la Sierra.
Actualmente, en la Zona Norte y la región Centro de Guerrero se ha desatado una ola de violencia relacionado con el reacomodo de las estructuras delictivas que no sólo disputan las zonas de producción y trasiego de drogas, sino también el control de las empresas mineras canadienses que se encuentran en la franja conocida como El Cinturón de oro del río Mezcala.
FUENTE: PROCESO.
AUTOR: EZEQUIEL FLORES CONTRERAS.
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