Hasta siete mil integrantes del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) –el mecanismo de reconocimiento a los científicos más prolíficos del país– están en el limbo, debido a que sus nombramientos vencieron el 31 de diciembre y el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) debía publicar los resultados de las evaluaciones para determinar su ingreso, promoción y permanencia en el sistema antes de esa fecha.
Esta es la primera vez que ocurre una situación así en los 37 años de funcionamiento del SNI, afirma José Luis Solleiro, quien ingresó al sistema en 1986, y es investigador del Instituto de Ciencias Aplicadas y Tecnologías de la UNAM; y además, dice, el Consejo no les ha informado nada hasta el momento.
“Los investigadores estaríamos más tranquilos si hubiésemos recibido alguna comunicación, al menos por correo electrónico. Decirnos ‘vamos a demorarnos unos días más, estamos en eso. No se preocupen’. O al revés ‘preocúpense porque van a pasar meses en que no recibirán estímulo económico’. La comunicación reduciría la incertidumbre, pero no ocurrió”, dice Solleiro.
Animal Político preguntó al Conacyt la razón del retraso y la fecha en que se darán a conocer los resultados, pero no hubo respuesta.
El Conacyt emitió la convocatoria para el ingreso, promoción o permanencia en el SNI en mayo pasado, pese a que debió haber sido publicada en diciembre del año previo. Esto significó que los aspirantes tuvieran menos tiempo para enviar los requisitos y documentos probatorios para ser evaluados. También, que las comisiones dictaminadoras, quienes hacen la evaluación, lo hicieran a contratiempo.
En la convocatoria, el Conacyt dice que los resultados “serán publicados en la página electrónica del Conacyt a más tardar en el mes de enero de 2022”, pero en otro apartado advierte que “las distinciones de quienes obtengan un dictamen aprobatorio tendrán vigencia a partir del primero de enero de 2022”. En el documento no tiene alguna disposición para hacerlo retroactivo.
El investigador de ciencias genómicas e integrante del colectivo ProCiencia, David Romero, afirma que estiman que entre 6 mil y 7 mil investigadores tienen nombramientos vencidos al 31 de diciembre y “al no haberse publicado los resultados, en este momento están en el limbo”.
“El estímulo económico normalmente se deposita hacia el 25 de cada mes. En la mejor de las circunstancias, a quienes se les renueve o ingresen al sistema, tendrán un retraso en sus depósitos de al menos un mes. En el peor de los escenarios, perderían los estímulos previos a la publicación de los resultados”, afirmó en entrevista con Animal Político.
El pago del estímulo económico, en algunos casos, representa la parte fuerte de su ingreso, puesto que los salarios en los centros de investigación son menores, pero este sistema funciona como una ‘compensación’. “Hay quienes deben pagar sus hipotecas, las colegiaturas”, advirtió Nicolás Loza, investigador del FLACSO.
Otro aspecto importante, dijo, es que quienes quieran apelar el resultado de las comisiones dictaminadoras en caso de no ser favorable, también tendrían menos tiempo para hacerlo, pero por el momento tampoco se sabe cuándo tendrían esa posibilidad.
“Este retraso es prueba de la ineficacia y tal vez para probar la reacción de los investigadores ante una eventual desaparición del Sistema porque no concuerdan con él. En política pública, estos incentivos se conoce como ‘cuasi mercado’ y este gobierno lo ha dicho, no está de acurdo con ese sistema”, afirmó Loza.
Para ingresar, permanecer o conseguir algún nivel superior en el SNI, los investigadores deben acreditar la generación de nuevos conocimientos científicos, formación de recursos humanos (asesorías de tesis, docencia), publicación de artículos en revistas reconocidas, y este fue el primer año en que entre las preguntas estuvo si su investigación “aporta al bienestar” y calificaran si su trabajo tiene un beneficio social.
FUENTE: ANIMAL POLÍTICO.
AUTOR: NAYELI ROLDÁN.
No hay comentarios:
Publicar un comentario