“Ponderando el riesgo-beneficio de la ivermectina en etapas tempranas que pueda beneficiar y evitar complicaciones a etapas moderadas y severas ante la falta de un tratamiento comprobado, la utilidad de este fármaco de uso compasivo se hace relevante”, sostiene la dependencia.
“Comparativamente la Ivermectina vs otras (sic) terapias con efectos controversiales y que requieren de un manejo hospitalario, es un medicamento inocuo, económico, sin efectos adversos en cantidades controladas, seguro y que se sigue estudiando por sus efectos inhibitorios en proteínas virales”.
Animal Político publicó que el Gobierno de la CDMX gastó 29 millones de pesos en la compra de tratamientos no aprobados ni recomendados para atender a pacientes con Covid-19 entre los que se encontraba la ivermectina, la azitromicina y el ácido acetilsalicílico, fármacos que incluso en la Guía para el Tratamiento del Covid-19, que hizo la Secretaría de Salud federal, no son recomendados.
De acuerdo con la Sedesa, “hay muchos países en el mundo que utilizan ivermectina y diversos grupos médicos importantes que abogan por su uso, es el caso de los Estados Unidos de Norteamérica…”, sin embargo, la propia Food and Drug Administration (FDA) ha publicado una serie de comunicados y tuits en los que llama a su población a no tomar el medicamento.
Incluso, en uno de sus comunicados oficiales da cuenta de que ha recibido múltiples informes de pacientes que han requerido atención médica, incluida la hospitalización, tras automedicarse con ivermectina, un medicamento destinado al ganado.
Otros de los países que utilizan la ivermectina -de acuerdo con la Sedesa y que les llevó a entregarla en la CDMX- fueron India, Egipto, Perú, Paraguay y República Dominicana.
Recordar que en el caso de Perú la ivermectina se empezó a recomendar durante el 2020 pero en marzo de 2021 se dejó de prescribir una vez que la Agencia Europea de Medicamentos (EMA, por sus siglas en inglés) y la Organización Mundial de la Salud se pronunciaron sobre el uso de este medicamento y desaconsejaron tomarlo porque no tenía utilidad.
“La información oficial de la propia OMS es que hay trabajos que demuestran que (la ivermectina) no tiene el efecto positivo que se suponía que podría tener. Nosotros nos vamos a seguir rigiendo por las normas internacionales y las recomendaciones de los órganos competente”, declaró Oscar Ugalde, ministro de salud de Perú el 26 de marzo de 2021.
Otra de las razones por las que se continuó entregando ivermectina en la CDMX, abundó la dependencia, fue porque estudios en Iraq, Brasil y Argentina arrojaron resultados favorables, sin embargo, no detallaron de qué estudios se trató.
Además, la postura de entregar ivermectina “se fortaleció con un estudio local que indicaba de manera preliminar que los pacientes que fueron tratados con este medicamento tuvieron 68% menos probabilidad de ingresar al hospital que personas que no lo tomaron”, subrayó la Sedesa.
Se trata de un análisis “cuasi-experimental” que fue realizado por la propia Secretaría de Salud, la Agencia de Innovación Pública (ADIP) y el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y que fue desacreditado por el sitio SocArXiv que el 3 de mayo de 2021 publicó el análisis bajo el nombre “La ivermectina y las probabilidades de hospitalización por Covid-19: evidencia de un análisis cuasi-experimental basado en una intervención pública en la Ciudad de México.
En diciembre pasado este análisis fue desacreditado por el propio director y fundador del sitio web quien, además, lo tachó de “de muy mala calidad o deliberadamente falso y engañoso”.
La Sedesa también confirmó que hasta septiembre pasado entregó ivermectina a pacientes positivos de Covid-19, sin embargo, se ha podido corroborar, que el IMSS ha continuado con la entrega de estos fármacos aún en este 2022. Esto, a pesar de que la propia institución informó a Reuters que desde el 4 de enero había dejado de proporcionar el fármaco.
Entre el 21 de diciembre de 2020 y el 20 de diciembre de 2021, el IMSS distribuyó 465 mil 345 kits que contenían ivermectina.
FUENTE: ANIMAL POLÍTICO.
AUTOR: DALILA SARABIA.
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