La detención de esa célula criminal, en una casa de seguridad del fraccionamiento Paraíso Maya, se logró en un operativo conjunto entre autoridades estatales y fuerzas federales el pasado 18 de marzo y permitió rescatar a tres personas privadas de la libertad, entre ellas un menor y un hombre al que le fue amputado un dedo.
También llevó a localizar tiraderos clandestinos en baldíos del mismo sector de la ciudad de las que se recuperaron los restos de ocho víctimas.
“No se puede determinar que sean narcofosas porque abandonaban los cuerpos a flor de tierra”, aclaró el fiscal Óscar Montes de Oca.
Y añadió que “con el transcurso del tiempo se iban cubriendo con la propia vegetación, y en algunos casos se colocaron piedras para tratar de disimular u ocultarlos, todo esto fue en la supermanzana 107 en una zona selvática y áreas verdes, muy cerca de donde fueron detenidos”.
Los detenidos, entre ellos una mujer, privaban de su libertad a narcomenudistas de bandas rivales para sacarles información o matarlos, pero también secuestraban empresarios.
El grupo fue trasladado la víspera al Centro de Reinserción Social Benito Juárez en medio de un operativo a cargo de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Guardia Nacional (GN), y de la Secretaría de Seguridad Pública estatal (SSP) y ya están a disposición de un juez de control.
Los trece asesinatos que hasta ahora se les imputan fueron perpetrados en el último semestre.
El primero de los cuerpos de las víctimas se encontró el 14 de septiembre de 2021. Y este año, uno el 8 de enero y tres más el día 25 del mismo mes. El 18 de marzo, cuatro y al día siguiente cuatro más.
FUENTE: PROCESO.
AUTOR: ROSA SANTANA.
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