El apodado “El Bombero”, “Rica”, “Ricky”, es identificado por los tres niveles de gobierno como uno de los generadores de violencia de Baja California y uno de los distribuidores de fentanilo en el sur de California.
Aguilar Jacobo está relacionado con dos homicidios y trasiego de droga, presuntamente obligaba a sus víctimas a trabajar para él; también realizaba trasiego de droga mediante la modalidad de “mulas ciegas”. De acuerdo a información preliminar, el ahora occiso había sido detenido en dos ocasiones.
El 3 de enero de 2014, “El Bombero” fue detenido luego de una orden de aprehensión por el homicidio en contra de un menor de edad febrero de 2013 en Módulos de Otay cuando el ahora occiso tuvo una riña con un chofer de taxi, y al agredirlo con un arma de fuego asesinó a un joven de 14 años. La extinta Policía Ministerial logró ubicado y arrestado en ese mismo mes y año, pero un juez ordenó su libertad por lo que fue reaprehendido casi un año después.
Mediante un comunicado, la entonces Procuraduría General de Justicia del Estado informó enero de 2014 que Aguilar Jacobo estaba relacionado con un homicidio registrado el 5 de julio de 2013 por lo que fue detenido en la colonia Tomás Aquino, en Tijuana.
Ricardo Aguilar Jacobo era conocido como “El Bombero”, ya que presumía haber pertenecido a la corporación de bomberos en Tijuana, sin embargo fue dado de baja por reprobar los exámenes toxicológicos de ley.
Información de grupos de Inteligencia de las autoridades de la Mesa de Coordinación para la Paz y Seguridad de Baja California, refieren que Aguilar Jacobo fue operador criminal de Christian Rodríguez “El Búho” , cabecilla del Cartel Jalisco Nueva Generación que controla el narcomenudeo en la zona norte y luego perteneció a la célula de Pablo Edwin Huerta Nuño “El Flaquito” , quien ahora delinque para “Los Chapitos” Iván Archivaldo y Alfredo Guzmán Salazar, así como Ovidio Guzmán López.
FUENTE: SEMANARIO ZETA.
AUTOR: REDACCIÓN.
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