En un escrito dado a conocer el pasado miércoles, sobresale el reciente caso de la reportera de Cancún, Jazmín Ramos, quien renunció a su labor en un medio de comunicación de esa ciudad tras la petición de su jefe de información de dejar de cubrir a la candidata a la gubernatura de aquel estado, Mara Lezama Espinoza, de la coalición encabezada por Morena, pues supuestamente el equipo de prensa de la contendiente se molestó por preguntas que hizo en una entrevista.
Relata el colectivo de defensa del gremio periodístico quintanarroense que, en un video difundido por la propia afectada se aprecia que los cuestionamientos realizados a Mara Lezama fueron de manera respetuosa sin invadir su espacio personal.
Este no es el único hecho contra periodistas en la cobertura del actual proceso electoral porque un reportero acusó a Josse Rebolledo, candidato a una diputación local por el partido Movimiento Auténtico Social, de presuntamente haberlo amenazado.
Destaca en el pronunciamiento, la petición a los medios de comunicación que aún aplican descuentos salariales de hasta el 50% con el pretexto de la pandemia, como el caso del periódico Quequi, empresa editorial relacionada con la candidata a una diputación Odalis Gómez, cuyos familiares son dueños y la contendiente a la curul constantemente se relaciona con el medio de comunicación.
En suma, con estos y otros casos, desde la Red de Periodistas de Quintana Roo vemos con preocupación que las prácticas político-empresariales van en detrimento de la libertad de las y los periodistas y del derecho de la sociedad de estar informada” (sic), expone el comunicado de la Red.
FUENTE: PROCESO.
AUTOR: OCTAVIO MARTÍNEZ.
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