En 1994 esta ciudad fue un cinturón de paz para detener los enfrentamientos entre el Ejército Zapatista de Liberación Nacional y el Ejército, que cobraron decenas de muertes.
Hoy sus calles coloniales viven una espiral de violencia: grupos civiles armados y pandillas dedicados al narcotráfico, extorsión, tráfico de indocumentados y de madera provocan el terror entre comerciantes, empresarios, turistas y la población. La autoridad municipal está rebasada; el gobierno estatal, ausente, y las fuerzas federales, omisas.
El martes 14, grupos de encapuchados armados con rifles de alto poder se enfrentaron en la zona norte, donde se disputan el control de la Central de Abastos y un mercado público.
Esa región fue controlada por estas bandas. Hubo bloqueos de vialidades, se limitaron los accesos a más de 30 colonias, vehículos incendiados y disparos. La población buscó refugio donde pudo.
La del martes 14 no es la primera irrupción de un grupo armado en la zona norte de la ciudad, pero sí la más documentada, según muestran los videos y fotografías que circularon ampliamente en redes sociales.
La Vieja Jovel, ciudad colonial declarada Pueblo Mágico en 2003, a la que en 2021 llegaron más de 1 millón de turistas que dejaron una derrama de 2 mil 250 millones de pesos pese a la pandemia, hoy presa de estas bandas que en motocicletas recorren impunemente sus calles, desafiando a los cuerpos policiacos y militares.
A los criminales, conocidos como motonetos, no les preocupa que a la entrada de la ciudad esté instalada la 31 zona militar y que en sus inmediaciones haya tres campamentos y el 43 Batallón de la Guardia Nacional. Portando armas largas, rifles de asalto y pistolas, a plena luz del día vigilan las calles y cobran cuotas por “derecho de piso” a comerciantes en la formalidad o informalidad.
"Los Motonetos" es un conglomerado de grupos que operan en toda esta región norte; se han contabilizado de 10 a 15: Los Vans, Los Torres, Los Patos, los de Huitepec Los Alcanfores, Los Narcisos, los del Lobo, Los Gerónimos, Élite, Los Ántrax, entre otros.
Algunos se incubaron en el gobierno municipal de Marco Cancino González, durante el periodo 2015-2018, cuando también tomaron fuerzas grupos como la Asociación de Locatarios de Mercados Tradicionales de Chiapas (Almetrach), la Coordinadora de Organizaciones por el Medio Ambiente para un Chiapas Mejor (Comach), el Frente Popular Sentimientos de la Nación (FPSN), la Asociación Cooperativa de Transportes del Estado de Chiapas (Acotrach) y la Organización de los Pueblos Evangélicos de los Altos de Chiapas (Opeach).
Necesario, el apoyo federal
En entrevista con Proceso, el alcalde Mariano Díaz Ochoa, admite que esos grupos superan a los cuerpos policíacos en armamento y número.
Díaz es un político que de 1999 a la fecha ha ocupado tres veces la alcaldía: entre 1999-2001 y 2008-2010 por el PRI y en 2021 llegó por el PVEM.
Fragmento del reportaje publicado en la edición 2381 de la revista Proceso
FUENTE: PROCESO.
AUTOR: ISAÍN MANDUJANO.
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