En octubre del 2020, la noticia de la detención del General Salvador Cienfuegos ocupó todos los espacios en la prensa al tratarse del primer militar mexicano de alto rango detenido en Estados Unidos. La Sedena hizo un monitoreo hora por hora sobre lo que reportaba la prensa y hasta elaboró un cuestionario –enviado a distintos mandos– con sus respectivas respuestas sobre la detención del extitular de esa dependencia.
Los informes enviados vía correo electrónico muestran los monitoreos realizados cada hora sobre las publicaciones de medios de comunicación y algunos análisis sobre la durabilidad del “enojo” en contra del Ejército.
En octubre del 2020, la noticia de la detención del extitular de esa dependencia durante la administración de Enrique Peña Nieto (2012-2018) ocupó todos los espacios en la prensa al tratarse del primer militar mexicano de alto rango detenido en Estados Unidos.
El Gobierno federal lo tomó como una afrenta contra la soberanía de México y días después, el 18 de noviembre de ese año, regresó al país luego de que Estados Unidos retirara los cargos en su contra por narcotráfico y lavado de dinero.
El exsecretario no fue detenido y autoridades mexicanas sólo le informaron que era investigado en el país, según informó ese día la Fiscalía General de la República (FGR), quien el 15 de enero de 2021 notificó a las autoridades estadounidenses la decisión de retirar los cargos contra Cienfuegos.
La Fiscalía, a cargo de Alejandro Gertz Manero, dijo tener la certeza de que el exfuncionario “no realizó acto alguno del que pudiera probársele cualquier conducta delictiva”.
Para el 12 de febrero, el General Secretario Luis Cresencio Sandoval recibió una actualización sobre “las publicaciones realizadas en redes sociales, referente a la exoneración por parte de la Fiscalía General de la República al exsecretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos Zepeda”, puede leerse en el documento, a la cabeza de la primera de las tres páginas.
A continuación hay un cuadro que detalla las publicaciones hechas en Facebook, Twitter y Youtube desde el 14 de enero, un día antes del anuncio de la FGR, hasta el 16 de enero.
Se le informa al General de la cantidad de reproducciones —en el caso de videos—, el número de Me Gusta y cuántas veces fue compartida la entrada.
Luego se encuentra el análisis: son dos filas en las que se dividen las opiniones positivas y negativas. Se incluyeron las publicaciones de SinEmbargo, Proceso, Milenio, El Universal, El País, Excélsior, Imagen, Foro TV, Aristegui Noticias, Animal Político y Telemundo, entre otros.
En total se detectaron 47 mil 803 notas y comentarios, de los cuales sólo 188 fueron positivos, la mayoría provenientes de los espacios de Ciro Gómez Leyva y Forbes. El porcentaje de positividad no llegó ni al uno por ciento.
También se enlistan algunos mensajes recibidos. Entre los positivos se destacan los siguientes: “Cienfuegos es inocente de todo cargo imputado injustamente por la DEA”, “Un abrazo para mi general Cienfuegos” y “Nuestro Cienfuegos no es un criminal”.
Entre los negativos están: “Que se haga justicia en nombre de todos los soldados que murieron por la patria y a órdenes de este maldito”.
Sobre este caso hay otros dos documentos relevantes enviados a distintos mandos de la actual Sedena fechados en octubre de 2020. Uno es un cuestionario con sus respectivas respuestas sobre la detención de Cienfuegos.
Estas son algunos de los planteamientos:
—¿Desde cuándo sabía de la actividad ilegal del General Cienfuegos?
—Es necesario destacar que no debemos de caer en especulaciones ni emitir juicios apresurados sobre lo acontecido.
—¿Se investigará a los otros generales comandantes de región cuando el Gral. Cienfuegos era Secretario de la Defensa Nacional?
—Es necesario reiterar que la fortaleza del Instituto Armado radica en la unión y espíritu de cuerpo de todos sus integrantes; y qué, como una gran cadena, todos los eslabones que conformamos al Ejército y Fuerza Aérea debemos cerrar filas por el bien de la institución y de nuestro país”.
En el otro se indican los temas que se deben reforzar en las declaraciones:
“Es necesario destacar que el Presidente López Obrador y la ciudadanía tienen puesta su confianza en el Ejército Mexicano y los militares sabremos corresponderles”.
Y otro más:
“En todas las épocas se nos han presentado situaciones difíciles, que hemos superado con el amor por México, respeto a las instituciones y el convencimiento de que somos surgidos del pueblo”.
EL MONITOREO CON PEÑA NIETO
Antes de ser el objeto de análisis por la percepción negativa, el General Cienfuegos recibió reportes titulados “Diario de información y análisis” sobre las opiniones de la gente en episodios específicos, en donde también le indicaban que el enojo no le afectaba a él en particular, en comparación con otros funcionarios y también le dan tranquilidad al asegurarle que aún tratándose de actos de tortura en donde estaba inmiscuido el Ejército los temas dejarían de ser asuntos mediáticos.
El 23 de abril de 2016, se le informó al entonces Alto Mando —como se le identifica al Secretario General— que los efectos provocados por un video donde se ve a personal militar y de la Policía Federal “vulnerando los derechos humanos de una civil”, y asegurando que en el corto plazo dejaría de ser un “asunto mediático, al perder el interés del auditorio objetivo”.
Se elaboró una gráfica de los comentarios positivos y negativos sobre el General frente a Miguel Ángel Osorio Chong, Secretario de Gobernación; Luis Videgaray, titular de la Secretaría de Hacienda y la Procuradora Arely Gómez, por entonces todos funcionarios con Peña Nieto y se concluyó:
“En términos de aceptación, la cuenta oficial del titular de esta Secretaría representa el 78 por ciento en las últimas 24 horas. Lo anterior refleja la confianza de la población hacia este instituto armado con relación a otras dependencias del Ejecutivo federal”.
El video en cuestión es uno en donde se observa a un par de militares y a otra persona con uniforme de la Policía Federal torturando a una mujer en Ajuchitlán, Guerrero. La mujer está sentada sobre la tierra, tiene el rostro cubierto con una camiseta, sus manos están atadas, y llora mientras es interrogada por una militar que luego le coloca una arma sobre la cabeza y luego una bolsa de plástico para impedirle respirar.
Al quitarle la bolsa la militar le dice: “Pinche vieja dramática, si estabas respirando, hija de tu puta madre… ¿Ya te acordaste, o quieres más bolsa? ¿O quieres agüita, o quieres toques?”.
Este, según la información que se desprende de los correos, es uno de los episodios a los que dio puntual seguimiento la Sedena.
AUTOR: DANIELA BARRAGÁN.
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