El 7 de enero del 2022 la mujer de 29 años de edad fue encontrada en un paraje sobre la carretera Yecapixtla -Achichipico, al oriente de Morelos, al otro día de que sus familiares no tuvieron información de ella.
El informe de necropsia determinó asfixia mecánica como causa de muerte; puesto su uniforme de trabajo, Beatriz tenía marcas de estrangulamiento y de lesiones en varias partes del cuerpo. El hecho se clasificó como feminicidio con el número de carpeta FEDF-RO/04/2022.
Un mes antes, el 27 noviembre del 2021, con número de carpeta de investigación CT-UCD/1021/2021 Beatriz denunció amenazas de muerte, pero la Fiscalía de Morelos determinó “no vinculación por no acreditar vínculo familiar” (sic) aún con el señalamiento directo contra su expareja.
La persona directamente señalada fue puesta a disposición, se realizaron exámenes que arrojaron que se encontraba en estado alcohólico; para los familiares, la Fiscalía desestimó las declaraciones de Beatriz que pudieron haber evitado su muerte.
Beatriz denunció también amenazas de muerte ante la Fiscalía Regional Oriente, el 10 de noviembre del 2021 en la carpeta YX-UIDD-01/415/2021, pero el agente del Ministerio Público que tomó su declaración le pidió volver al otro día para firmar su denuncia reteniendo su credencial de elector como “garantía” porque “esos casos luego se arreglan entre ellos”. Pese al trato, Beatriz volvió para reiterar su denuncia.
Madre de dos niñas de 6 y 11 años de edad, Beatriz trabajaba como mesera en uno de los restaurantes familiares que abundan en el municipio para la venta de cecina, fue apoyada siempre por su familia con quien mantenía comunicación constante. El día de su desaparición salió de su trabajo rumbo a casa de sus padres donde vivía con sus hijas, pero ya no regresó.
“La Fiscalía tiene todo para investigar, todo está muy claro para nosotros sobre quién es el responsable de su muerte”, dice su padre Marcos sosteniendo apenas una decena de hojas de cada denuncia inicial.
Ningún seguimiento hay a pesar del compromiso que aseguró en el caso la titular de la Fiscalía Especializada en Feminicidios de la Fiscalía General del Estado, Fabiola Betanzos, quien dejó de responder las llamadas telefónicas de los familiares para conocer los avances en la investigación.
Familiares y vecinos marcharon días después de que encontraron a Beatriz. En ese momento fueron recibidos por el presidente municipal de Yecapixtla, Rafael Sánchez Zavala, hermano del actual presidente del Congreso de Morelos, Francisco Sánchez Zavala, con el compromiso de dar seguimiento, pero hasta la fecha esa ha sido la única mesa de diálogo.
“Basta de impunidad, pido y exijo justicia para Beatriz Toscano Sánchez y todas las víctimas de feminicidio. Que la Fiscalía haga su trabajo”, es el clamor de Marcos, padre de Beatriz.
Feminicidios en Morelos ya superan a los de todo 2021
Los 28 feminicidios contabilizados en Morelos entre enero y septiembre rebasan ya a los 23 del mismo periodo de 2021, de acuerdo con las estadísticas del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
En años anteriores, en los mismos periodos enero-septiembre, se contabilizaron 18 feminicidios en 2018, 28 en 2019 y 28 en 2020.
Consultada sobre su metodología para registrar los feminicidios, la Fiscalía General de Morelos señaló que en las muertes de mujeres las autoridades aplican un protocolo de atención con perspectiva de género para determinar si hay un posible feminicidio o no.
La Fiscalía de Morelos ha sido cuestionada por víctimas, activistas y autoridades por su trabajo en el caso de la joven Ariadna Fernanda López, cuyo cuerpo fue encontrado abandonado en una carretera en el municipio Tepoztlán.
La institución sostiene que Ariadna murió por una “grave intoxicación alcohólica”, conclusión que la familia rechazó, por lo que acudió a un estudio de la Fiscalía de la Ciudad de México, quien determinó que la joven fue asesinada.
FUENTE: ANIMAL POLÍTICO.
AUTOR: DULCE VALDEPEÑA.
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