El Presidente expresó su respaldo al Gobernador Samuel García y recalcó que no se pueden utilizar las fiscalías con propósitos político-electorales.
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“Yo quiero manifestar aquí mi apoyo al Gobernador de Nuevo Léon Samuel García Sepúlveda, mi solidaridad porque está enfrentando una embestida que considero es de tinte partidista y no tiene que ver nada con la justicia”, expresó el Presidente al finalizar su discurso durante la sesión del Consejo Nacional de Seguridad Pública a la que acudieron integrantes del Gabinete y 30 de los 32 gobernadores.
El Ejecutivo federal expresó su respaldo al Gobernador emanado de Movimiento Ciudadano (MC) y recalcó que no se pueden utilizar las fiscalías con propósitos político-electorales.
“No puedo más que expresarme a favor del Gobernador de Nuevo León y espero que se resuelvan las cosas en ese estado, porque al final de cuentas, los pleitos arriba, lo que provocan es afectar a la gente, generar inestabilidad y lo que necesitamos es justicia y paz en todo México”, destacó.
Luego del gesto de solidaridad, el Gobernador se puso de pie y agradeció al Presidente, mientras los integrantes del Consejo aplaudían.
El Gobernador de Nuevo León García mantiene una confrontación con el Congreso de Nuevo León por el nombramiento del nuevo Fiscal General de Justicia y por la discusión del Presupuesto de Egresos para 2023.
García propuso un encuentro con los legisladores para abordar ambos temas, pues señaló que tras la suspensión otorgada por la Suprema Corte de Justicia de la Nación, la selección del nuevo Fiscal de justicia del estado demoraría hasta año y medio.
Esto, agregó, les daría oportunidad de reunirse (gobierno y diputados), ciudadanos y estudiar los mejores perfiles para el cargo.
“¿Por qué ocultar?, ¿por qué el fast track?, ¿por qué hacer las cosas a escondidas en un estado tan potente, tan pleno y tan lleno de ciudadanía?”, declaró ayer el Gobernador.
García añadió que si no se logra un nuevo presupuesto, a él le iría mejor con el del año anterior.
Otra confrontación que el Gobernador mantiene con el Congreso de Nuevo León es porque los legisladores locales aprobaron el pasado miércoles, en primera vuelta, reformas a la Constitución en la que se obliga al mandatario estatal a pedir permiso sobre sus viajes.
La reforma fue propuesta por diputados del PRI y PAN con el objetivo de que cuando el Gobernador decida salir del país por un término mayor de tres días naturales deba pedir permiso al Congreso.
En el marco del viaje a Italia para reunirse con empresarios y el Papa, el bloque opositor del PRI y PAN en el Congreso local consumó así la primera reforma a la “nueva Constitución”.
Ayer, el Gobernador respondió a los diputados locales: “No son mis papás, yo no le pido permiso a nadie”.
AUTOR: REDACCIÓN.
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