Los soldados “están desatados” en Tamaulipas, truena el presidente del Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo (CDHNL), Raymundo Ramos.
Para el defensor, la presunta ejecución extrajudicial de cinco hombres a manos de militares ocurrida el 18 de mayo en una colonia de la ciudad –que se conoció por un video que también registró cómo los soldados alteraron la escena– debe tener una enérgica respuesta del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien ante el video reconoció el ajusticiamiento.
“En Tamaulipas se les da carta abierta para que cometan cualquier abuso de autoridad. Si un grupo de militares está fuera de control, generará violencia e impunidad. ¿Para qué los protegen? El reconocimiento de culpa del presidente es insuficiente, tiene qué ser más enérgico”, dice el activista.
Ramos considera que, ante estos últimos hechos, que suman víctimas a una lista que documenta el CDHNL, el presidente “tiene que ir al campo militar a decirles en su cara a los soldados que no se permiten masacres, que tiene que haber respeto a los derechos humanos y de los heridos”.
Como parte de un informe preliminar de recientes ataques de soldados a la población civil, Raymundo Ramos documenta, por lo menos y sólo desde el año pasado a la fecha, dos decenas de muertos y agraviados, todos con el sello de la impunidad.
“Ese grupo de militares debe estar arrestado ya, y puestos todos a disposición de la FGR, porque evidentemente mintieron en sus declaraciones. Pedimos que se les detenga, que no se les proteja. Dicen que fueron agredidos, pero eso no se ve en el video ¿Quién asumirá la muerte de esas personas?”, increpa.
La grabación de los hechos del 18 de mayo –difundida por Proceso el 6 de junio– muestra el proceder de un grupo de militares sometiendo a cinco hombres que viajaban en una camioneta que se estrelló en una barda, en la colonia Los Presidentes. Los soldados colocan a los hombres en fila contra el muro y, se ve en el video, les disparan.
El reporte oficial presentó las muertes de los civiles como resultado de un enfrentamiento e intercambio de disparos con los soldados.
Lo ocurrido no había trascendido públicamente pues en su momento no hubo comunicado oficial. No fue sino hasta que la videograbación tomada de una cámara de seguridad se difundió masivamente, la tarde del 6 de junio, cuando reaccionó la Secretaría de la Defensa Nacional, como si recién se enterara del incidente.
Fragmento del reportaje publicado en la edición 2432 de la revista Proceso
FUENTE: PROCESO.
AUTOR: LUCIANO CAMPOS GARZA.
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