Los jornaleros habrían desaparecido en el camino a su comunidad, Zacapexco, que pertenece al municipio de Chilapa, porque de acuerdo con la organización que tiene presencia en la zona nahua de Montaña baja, los jornaleros abordaron una camioneta Urvan del transporte público hacia sus comunidades de Chilapa.
“Los tres compañeros son indígenas, campesinos y jornaleros que regresaban de Sinaloa por el término de la temporada de cosecha; llegaron el día 17 de agosto aproximadamente a las 7:00 horas a Chilpancingo y de ahí se trasladaron a Chilapa. Se ha perdido toda comunicación con ellos”, se lee en el comunicado lanzado por el Cipog-EZ.
Los desaparecidos son Nicolás Rodríguez Díaz, Marcelino Hernández Tecorral y Ángel Villalba Salvador.
La organización señaló como responsable de esta desaparición a los principales ediles de Chilapa, encabezados por el alcalde Aldy Esteban Román.
“Responsabilizamos al presidente Aldy Esteban Román, a los síndicos Néstor Parra Domínguez y Rosa Elena Chavelas Gutiérrez por la desaparición de los compañeros y la permisibilidad de todos los asesinatos, desapariciones forzadas y crímenes de lesa humanidad que se perpetran en contra de los pobladores indígenas por el grupo de narcotráfico Los Ardillos, liderado por Celso Ortega”, es el párrafo donde la organización expone quiénes para ellos tienen responsabilidad en el caso.
El Cipog-EZ convocó a las organizaciones e instituciones de derechos humanos, en particular a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y al Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), para que intervengan en la búsqueda y localización de sus compañeros jornaleros.
Esta es la segunda agresión contra integrantes del Cipog-EZ en la última semana. Apenas el domingo 13 de agosto civiles armados asesinaron a balazos a dos hombres, uno de ellos menor de edad, en una gasolinera ubicada en la avenida Eucaria Apreza de la cabecera municipal de Chilapa.
El asesinato ocurrió, según los reportes policiacos, durante la mañana del domingo pasado, en el momento en que los integrantes del Cipog-EZ cargaban combustible a una camioneta marca Nissan doble cabina. La zona de los hechos es una de las más transitadas de la cabecera municipal, considerada el centro económico de la región.
Las víctima que eran miembros de la organización son Esteban Xochitempa, de 40 años y su hijo Juan, de 16 años, habitantes de la comunidad de Xochitempa, municipio de Chilapa. Uno de los cadáveres quedaría dentro de la camioneta y otro afuera, según los detalles expuesto en los reportes.
La organización alertó del riesgo que les atraviesa en estos momentos. “Nos están asesinando y ningún gobierno, llámese municipal, estatal o federal nos protege”, párrafo con que el Cipog-EZ cierra el comunicado de hoy.
FUENTE: PROCESO.
AUTOR: MARGENA DE LA O.
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