Laura Montes y Mariana Cruz Marín, mujeres habitantes de Xochimilco, expusieron el caso este miércoles 9 de agosto en el foro «Derechos Humanos y Militarización: ¿Necesitamos a la Guardia Nacional y al Ejército en la Ciudad de México?». Dicho foro fue organizado por el Centro de Derechos Humanos Agustín Pro Juárez (Centro Prodh), el cual, además, está defendiendo legalmente a las xochimilcas organizadas.
En dicho foro, las defensoras de la tierra explicaron que en Xochimilco hay un cuartel de la Guardia Nacional (GN) concluido y otro más cuyas obras fueron suspendidas en febrero de este año gracias a un amparo interpuesto el 30 de diciembre de 2022 por las xochimilcas y el Centro Prodh.
Este cuartel del que apenas iniciaban las obras planea edificarse en un área de 33 mil metros cuadrados pertenecientes al Vivero Nezahualcóyotl; dicho vivero está considerado un Área Natural Protegida desde 1987. El juicio de amparo de este último caso aún continúa, por lo que este año se definirá si la construcción de este segundo cuartel podrá reanudarse o, por el contrario, si quedará suspendida de forma definitiva.
En el caso del cuartel que ya está construido en una zona de humedales del pueblo de San Luis Tlaxialtemalco, las defensoras de la tierra (junto con el Centro Prodh) interpusieron una queja frente a la CDHCDMX para que revise el caso y reconozca las violaciones a derechos humanos que ha habido desde antes de la construcción del cuartel. Estas violaciones incluyen la falta de una consulta dirigida a los pueblos originarios de Xochimilco para la aprobación de la obra, misma que no se realizó en ninguno de los dos casos.
Las xochimilcas y el Centro Prodh detallaron que esta queja se interpuso el 10 de agosto de 2022 junto con otra queja más por una situación similar en la alcaldía Azcapotzalco. Aquí, la GN construyó un cuartel en un espacio público que las y los vecinos usaban recreativamente. Pero hoy, a un año del envío de estas quejas, la CDHCDMX aún no las admite.
Según explicó el abogado Neftalí Pérez Rodríguez (abogado del área de Defensa Integral del Centro Prodh) a Cimacnoticias, la Comisión de Derechos Humanos argumenta que aún están en la etapa de indagación preliminar. En esta etapa, la Comisión de Derechos Humanos realiza las investigaciones correspondientes para determinar si hubo violaciones a derechos humanos y, por lo tanto, si se pueden admitir las quejas.
De acuerdo con el litigante, esta etapa tiene una duración aproximada de tres o cuatro meses, por lo que el tiempo que ha tardado la CDHCDMX en esta fase ya es preocupante. En caso de que la Comisión local no acepte las quejas, éstas serán turnadas a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) para continuar con el proceso. Al final —de acuerdo con Neftalí Pérez—, este organismo podría emitir una resolución en la que se recomienden medidas de mitigación del impacto de estas construcciones en el contexto de las y los ciudadanos.
Neftalí Pérez Rodríguez advierte a Cimacnoticias que hay planes de construir 16 cuarteles de la GN en la Ciudad de México, de los cuales entre siete u ocho ya se construyeron o están en proceso de edificarse. Uno más estaría en Milpa Alta, desde donde ya contactaron al Centro Prodh para iniciar una defensa como la de las mujeres xochimilcas.
En este sentido, el abogado recuerda a las y los ciudadanos que pueden acercarse a esta organización de defensa de los derechos humanos para denunciar actos como los que están teniendo lugar en Xochimilco y Azcapotzalco con la llegada de esta institución de seguridad.
Guardia Nacional NO disminuye violencia en Xochimilco: habitantes
Principalmente, hay dos razones por las cuales las mujeres xochimilcas se oponen a la construcción de cuarteles y a la presencia de la Guardia Nacional en su territorio. La primera de ellas es el evidente impacto que estas construcciones tienen en el medio ambiente. Durante el foro, Neftalí Pérez Rodríguez explicó que el gobierno de la Ciudad de México ha logrado esquivar el tema cometiendo diversas omisiones en los procedimientos administrativos de la adquisición de terrenos.
Al respecto, el defensor legal detalló que el gobierno federal ha conseguido hacerse de hectáreas de territorios protegidos desincorporándolos de las Áreas Naturales Protegidas y cediendo su control al gobierno de la Ciudad de México para que éste ordene la construcción de los cuarteles de la Guardia Nacional o a la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA).
El abogado advierte que en este proceso ha habido diversas irregularidades como el no haber consultado a los pueblos y barrios originarios de la CDMX sobre la desincorporación de sus territorios a las áreas protegidas. Por otro lado, tampoco se hicieron análisis sobre los impactos medioambientales de la construcción de los cuarteles en las zonas.
La otra razón para oponerse a la presencia de la Guardia Nacional en territorio xochimilca es la estrategia de seguridad que se ha desplegado tanto en la CDMX como en diversas partes del país. Al respecto, tanto Laura Montes como Mariana Cruz Marín declararon que en Xochimilco hay una percepción generalizada de un marcado aumento en los índices delictivos y de violencia. Ambas destacan que uno de los delitos que más ha aumentado es la desaparición forzada de mujeres en la alcaldía.
Cifras del Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas (RNPDNO) respaldan esta percepción. De acuerdo con su base de datos, las desapariciones en la alcaldía han tenido un incremento marcado desde 2019, en el que se registraron 21 desapariciones. Los registros muestran, además, que 2022 fue el año en el que más desapariciones se registraron en Xochimilco desde 1998 hasta la fecha. Del total de las 204 personas desaparecidas y no localizadas hasta este 2023, el 32 por ciento corresponde a mujeres; la mayoría de ellas tienen entre 15 y 19 años de edad.
Por otro lado, Mariana Cruz denuncia que la imagen intimidante de la Guardia Nacional (cuyo porte es más militar que civil), con armas largas y uniformes de camuflaje, también contribuye a formar ambiente de tensión e inseguridad. Al respecto, otro de los asistentes al foro (Ricardo Retana, habitante y defensor de la tierra en Milpa Alta) declaró que en su alcaldía se quiere instalar un cuartel de la GN frente a un kinder, ante lo cual se abre la pregunta: con la apariencia de los miembros de esta institución, ¿qué mensaje se está dando a las infancias?
Además de estas expresiones simbólicas y materiales de la violencia, las mujeres de la alcaldía (una de las demarcaciones con más áreas naturales además de La Magdalena Contreras y Milpa Alta) también experimentan las consecuencias indirectas de las obras de la GN.
Al respecto, Mariana Cruz declaró a Cimacnoticias: “las mujeres somos las que vivimos el asunto de la casa, de lavar, de hacer los alimentos, de tener limpia la casa”. Por lo tanto, el hecho de que los cuarteles de la Guardia Nacional estén afectando zonas esenciales para el suministro del agua (un líquido vital para todas estas labores, afirma Mariana) dificulta estas labores básicas para la reproducción de la vida.
La resistencia de las mujeres ante estos hechos se ha dado en los territorios pero también en los medios de comunicación. Por ello, en el foro también participó Daliri Oropeza Álvarez, periodista que ha dado seguimiento al caso de los cuarteles de la Guardia Nacional en Xochimilco.
Oropeza Álvarez señaló que quienes encabezan la resistencia en Xochimilco son mujeres como Laura y Mariana. También destacó que no es casualidad que los cuarteles de la Guardia Nacional estén en lugares o con recursos naturales abundantes o en sitios donde se están llevando a cabo los megaproyectos de la administración de Andrés Manuel López Obrador.
En este sentido, la comunicadora observa graves fallas en lo que se supone que es el objetivo de la GN (la protección de la ciudadanía) y su verdadera actuación. Sin embargo, ni la CDHCDMX ni ninguna institución del gobierno obradorista parecen advertirlo.
AUTOR: DIANA HERNÁNDEZ GÓMEZ.
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