El Gobierno de Guerrero dijo que “derivado de los hechos registrados la tarde de este jueves en el municipio de Taxco, elementos de la Secretaría de Seguridad Pública, Sedena y Guardia Nacional lograron asegurar a los presuntos agresores” de Camila, “quienes se pondrán a disposición de las autoridades correspondientes”. En un comunicado, aseguró que “no hay, ni habrá impunidad ante estos hechos, en donde lamentablemente perdió la vida una menor”, y que “se castigará con todo el peso de la Ley a los responsables”.
Enardecidos, vecinos de Taxco irrumpieron con barretas y palos la casa de los presuntos secuestradores y asesinos de la niña Camila, en el barrio de La Florida, en protesta por la inacción de la Fiscalía General del Estado (FGE) para detenerlos.
Los vecinos sacaron a golpes a dos hombres y una mujer, a los que pretendían linchar. Esta última murió la tarde de este jueves.
Medios locales en Guerrero y también nacionales reportaron que Ana Rosa Aguilar, quien es señalada como una de las supuestas partícipes del secuestro y asesinato de Camilia, falleció a causa de los golpes que recibió por parte de vecinos de la zona durante su linchamiento.
A casi 17 horas de que se instalara un plantón afuera de la casa de los presuntos implicados para evitar que se fugaran, a las 12:40 del mediodía, los enfurecidos vecinos se abrieron paso entre gritos de justicia y para exigir la detención de los presuntos culpables.
Los militares que resguardaban la casa se retiraron, y con palos, barretas y piedras, los vecinos lograron abrir la puerta y sacar a las tres personas.
Desde que fueron sacados de la casa, una multitud de hombres y mujeres los empezó a golpear con lo que tenía: palos, piedras, tubos, cinturones, con botellas de vidrio que les reventaron en la cabeza, puñetazos y patadas.
Los bajaron arrastrando de los pies por las escaleras del callejón hasta la avenida de Los Plateros, donde una multitud los siguió golpeando con brutalidad, ante las miradas de efectivos de la Policía Estatal, Municipal, Ejército y Guardia Nacional que poco pudieron hacer.
Después de que fueron golpeados hasta ser dejados casi inconscientes, un grupo de militares y efectivos de la Guardia Nacional logró extraer a pie a los dos hombres y los entregaron a policías, mientras que a la mujer la dejaron en una patrulla de la Policía Municipal, donde vecinos la siguieron golpeando frente a los agentes que no intervinieron.
Hubo personas que llegaron con garrafas con gasolina con intenciones de prenderle fuego a la mujer, pero a la 1:18 cedieron y la entregaron a los policías, ya cuando estaba inconsciente por los golpes.
Los agentes se retiraron con la presunta responsable del secuestro y asesinato de Camila, mientras que la avenida continuaba cerrada.
AUTOR: REDACCIÓN/ALEJANDRO GUERRERO.
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