jueves, 11 de abril de 2024

Autoridades de SLP detienen al presunto autor material del asesinato de “El Tiburón”

“El Tiburón” se hizo viral por el video de una cámara de seguridad, el cual muestra cómo golpeó severamente a un joven menor de edad, quien era empleado de la cadena de comida rápida Subway en San Luis Potosí.

Elementos de la Policía de Investigación (PDI), durante la tarde de ayer miércoles 10 de abril, detuvieron a un sujeto conocido con el mote de “El Diablillo”, presunto autor material del homicidio de Fernando Medina Ramírez, alias “El Tiburón”, ejecutado a balazos el 12 de marzo pasado, en calles de la colonia General I. Martínez, informaron a El Pulso fuentes al interior de la Fiscalía General del Estado (FGE).

La detención de “El Diablillo” y otros dos sujetos se realizó alrededor de las 18:30 horas, en calles del sur de la ciudad por elementos de la PDI, al parecer es investigado también por al menos otros dos asesinatos. El detenido y sus acompañantes fueron puestos a disposición de la FGE para que ahonde en sus investigaciones.

La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana de San Luis Potosí informó que fueron detenidas tres personas en la colonia Morales de la capital potosina por su presunta responsabilidad en delitos contra la salud en su modalidad de posesión de droga, además de portación de arma de fuego.

El pasado 11 de marzo, se reportó el homicidio de Fernando Medina, “El Tiburón”, quien fue identificado por un video en redes sociales, grabado el 15 de julio del año pasado, por ser el sujeto golpeó brutalmente a un joven empleado de un restaurante de comida rápida Subway.


De acuerdo con la información, el llamado “agresor del Subway” fue ultimado a balazos afuera de su gimnasio de la calle Iztaccíhuatl, en la colonia General I Martínez.

Además, se reporta que quedó tendido a un lado de una camioneta de color negro.

La Guardia Civil Estatal fue la primera respondiente tras el reporte del homicidio, quienes solicitaron la presencia de Servicios Periciales de la Fiscalía General del Estado (FGE) para dar fe del suceso.

En agosto del año pasado, un fuerte video se hizo viral en redes sociales, ya que se mostraba a un joven empleado de la cadena de comida rápida Subway, de la sucursal Rutilo Torres, fue severamente golpeado por un cliente que se enojó porque no se le atendía rápido a pesar de que se le explicaba que había más personas delante de él.

El video tiene una duración de 58 segundos y se observa cuando un hombre de complexión alta y robusto, que vestía camisa azul y pantalón negro, abre intempestivamente la puerta de la cocina y se abalanza contra un joven empleado que permanece recargado en una barra metálica.

Sin dar tiempo de nada, el sujeto lo agarró a puñetazos en el rostro, propinándole múltiples golpes, luego de una patada lo tiró al piso, en donde siguió con la golpiza, sin que el joven pudiera hacer algo para defenderse.

Todo esto sucedía sin que los demás empleados pudieran meterse, solamente una trabajadora intentó calmar al agresor, pero no logró hacer que parara.

Luego de la fuerte golpiza, el sujeto se retiró del sitio y los empleados avisaron lo sucedido a sus superiores, mientras que el afectado fue trasladado a un hospital privado para recibir atención médica; se reportaba que presentaba fracturas en la nariz e inflamación en el cerebro.

Días después, elementos de seguridad de San Luis Potosí informaron su detención y posterior imputación por homicidio calificado en grado de tentativa agravado; sin embargo, meses después fue liberado.

Un Juez del fuero común determinó liberar con medidas cautelares a Fernando “N” luego de alcanzar un acuerdo reparatorio con el menor de edad agredido.

El acuerdo se derivó de un juicio de amparo que el agresor interpuso ante la instancia federal para lograr la reclasificación del delito como lesiones graves.

Una vez obtenido el amparo, el Juez federal le otorgó la medida cautelar de suspensión del proceso a prueba, con diversas medidas de reparación del daño.
Entre las medidas cautelares, “El Tiburón” podía dar por concluido su proceso penal una vez que hubiera llegado al cumplimiento de todas las acciones de reparación del daño, entre las que se incluía además de la indemnización, diversas medidas cautelares tales como permanecer en su lugar de residencia, no salir de la ciudad y no acercarse a la víctima.

Con el juicio de amparo a su favor y las medidas de reparación del daño acordadas, el proceso penal quedaría concluido sin necesidad de llegar al tribunal de juicio oral que dictaría la sentencia en cualquier sentido.

FUENTE: SIN EMBARGO.
AUTOR: REDACCIÓN.

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