El anuncio del hallazgo fue hecho por la Secretaría de Gobernación y la Comisión Federal de Electricidad, que indicaron que los trabajos de rescate llevaron a la zona superior de donde se tiene registro que se encontraban 13 de los 63 mineros atrapados durante el siniestro en la mina a cargo de Grupo México.
Cristina Auerbach, integrante de la OFPC, señaló que la exigencia de las familias es que el rescate de los restos humanos se realice con garantías de seguridad para los rescatistas, así como que los restos sean resguardados de manera adecuada, se garantice su pronta identificación científica y se restituyan a los familiares de forma digna, “involucrando en todo el proceso a las familias”.
La OFPC añadió que es necesario que continúen los trabajos de rescate de todos los mineros en la zona del siniestro que en 2006 sepultó a 65 personas, de las cuales restaban 63 por rescatar.
Auerbach destacó que la organización seguirá con el litigio del caso ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) “por la responsabilidad del Estado mexicano al violar los derechos a la vida, integridad, garantías judiciales, protección ante la ley y los derechos económicos, sociales y culturales, en perjuicio de los trabajadores fallecidos en la explosión y sus familiares”.
Finalmente, aseguró que las familias continuarán con sus demandas para que se garantice verdad, justicia y medidas de no repetición sobre el desastre minero, entre las que se encuentran garantías de seguridad y bienestar para los trabajadores de las minas y sus familias en toda la zona carbonífera, así como labores de monitoreo e inspección de las minas.
AUTOR: REDACCIÓN.
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