En un comunicado, las organizaciones y activistas recordaron que el día de su desaparición, Salazar Cano «entró a trabajar, pero jamás salió de la empresa», por lo que Prime Wheel «es la responsable directa», así como su presidente ejecutivo Henry Chen y el contralor Jaime Carreón.
«Cuando desapareció Salazar Cano se debió activar un protocolo, hay radios, teléfonos, y se debió haber avisado a la cuadrilla de seguridad, y si no se encontraba, hacer un voceo en toda la planta. Y no lo hicieron», recordaron en el documento, difundido para recabar firmar en exigencia de justicia.
Señalaron también la falta de acciones por parte de la Secretaría de Trabajo y Previsión Social (STPS) para resolver el caso, pues al saber que había una persona desaparecida en una empresa debieron ordenar el paro de labores para realizar las investigaciones, «y no lo hicieron».
La desaparición de Servando sucedió dos meses antes de que Eduardo Ortiz, también trabajador de Prime Wheel, muriera prensado por una máquina de la misma empresa. «Si puedes desaparecer y dos meses después muere un trabajador prensado, cuando hay denuncias de múltiples incidentes de salud en la empresa por las condiciones de trabajo, entonces lo que sucede ahí no son accidentes, son crímenes industriales», aseguraron los colectivos y organizaciones.
Añadieron que la actuación de la Fiscalía del Estado de Baja California «deja mucho que desear no sólo por lo ineficaz, sino por las constantes contaminaciones de las escenas del crimen», pues permitió que los hornos y tanques de fundición funcionaran 25 días después, «cuando ya nada se podría encontrar dentro de ellos», y que fueran robadas todas las pertenencias de Servando Salazar de su automóvil.
«La cadena de responsabilidades llega a la Secretaría de Economía del Estado, y a l@s gobernador@s que promueven a la maquiladora en base a los bajos salarios y las pocas medidas de seguridad y salud para l@s trabajadoras y trabajadores», agregaron.
Las organizaciones, colectivos y personas exigieron que cada una de las autoridades implicadas cumplan con sus obligaciones en la procuración de justicia e investigación del caso, así como a la empresa PW a que cumpla con las leyes mexicanas de salud y seguridad en el trabajo.
Finalmente, demandaron a la STPS que entregue el informe de Prime Wheel y se corrijan las medidas y protocolos que no cumplieron con Servando Salazar Cano y con Eduardo Ortiz Franco.
COMUNICADO:
Exigimos verdad y justicia en el caso de Servando Salazar Cano, trabajador desaparecido al interior de la empresa Prime Wheel.
A 4 meses de la misteriosa e inexplicable desaparición del trabajador Servando Salazar Cano, al interior de la empresa Prime Wheel (PW), la fiscalía general del Estado de BC, a cargo de la fiscal Ma. Elena Andrade, sigue siendo omisa ante la desaparición de Servando Salazar; y la empresa PW sigue guardando un sospechoso silencio sobre el caso.
El 23 de agosto del 2024, Salazar Cano, entró a trabajar, pero jamás salió de la empresa, 2 meses después Eduardo Ortiz Franco muere al aplastarle la cabeza una máquina en la misma empresa, lo de Servando es un hecho inédito y PW le debía haber garantizado la salud y la seguridad en el trabajo, así como la vida, al igual que a Eduardo y a tod@s sus trabajador@s.
Si la familia de Servando no hubiera hecho los plantones que realizó, nunca se hubiera sabido nada. Después de su ida a la Cd. De México, a hablar con la prensa nacional, se volvió a empezar a mover, pero aún no hay nada claro. La empresa se deslinda de toda responsabilidad, cuando dentro de ella hay más de 80 cámaras, guardias de seguridad, supervisores, checadores, etc.
En el caso de Servando la empresa es la responsable de la desaparición, porque ahí ocurrió dentro de la empresa, están las pruebas que así lo indican, por lo que PW es la responsable directa. Henry Chen presidente ejecutivo de la empresa y Jaime Carreón contralor de la misma, son responsables directos pues son los más altos ejecutivos de PW.
Cuanto desapareció Salazar Cano se debió activar un protocolo, hay radios, teléfonos y se debió haber avisado a la cuadrilla de seguridad y si no se encontraba, hacer un voceo en toda la planta y no lo hicieron. Esta empresa tiene hornos de altas temperaturas (1 400° F), cuando entregaron el segundo turno, el supervisor de turno, debe entregar un reporte de su actividad, los ingenieros de procesos de manufactura, se deberían de haber comunicado que había una persona desaparecida, y buscarla inmediatamente, esos protocolos no se activaron.
La fábrica no buscó en sus cadenas de mando las omisiones a los protocolos, porque no les interesa. Sólo seguir produciendo es lo que le importa. Cuando Wendy Salazar Bravo hizo los plantones le decían “ya retírense, necesitamos que salga la producción”. Eso es lo que les importa: producir, generar ingresos. Los empleados son solo un número. PW quiere dar carpetazo al caso, detrás de la desaparición de Servando hay alguien de más alto rango involucrado en el hecho, todo indica que esto fue planeado y no fue solo una sola persona.
La Secretaria de Trabajo y Previsión Social (STPS) al saber que hay una persona desaparecida en una empresa, deberían haber ordenado el paro de labores, para poder investigar y no lo hicieron. La desaparición de Servando, y la muerte de Eduardo Ortiz, en menos de dos meses en la misma empresa, es un extremo escandaloso, si puedes desaparecer y dos meses después muere un trabajador prensado, cuando hay denuncias de múltiples incidentes de salud en la empresa por las condiciones de trabajo, entonces lo que sucede ahí no son accidentes, son crímenes industriales.
La actuación de la Fiscalía del Estado deja mucho que desear no solo por lo ineficaz, sino por las constantes contaminaciones de las escenas del crimen: al permitir que los hornos y tanques de fundición siguieran funcionando 25 días después, cuando ya nada se podría encontrar dentro de ellos; al permitir que fueran robadas todas las pertenencias de Servando Salazar de su automóvil que lo tenía bajo resguardo; al actuar con suma lentitud, etc.
La cadena de responsabilidades llega a la Secretaría de Economía del Estado, y a l@s gobernador@s que promueven a la maquiladora en base a los bajos salarios y las pocas medidas de seguridad y salud para l@s trabajadoras y trabajadores.
La existencia de peligros graves para la seguridad y salud de l@s trabajador@s, por carecer de condiciones higiénicas en la maquiladora PW, porque no se cumplen las medidas preventivas y de seguridad que las leyes establecen, y compromete el patrón con su irresponsabilidad o descuido inexcusable, la seguridad y vida de las personas que trabajan para la mencionada empresa. Lo que sucede supera todas las denuncias en contra de la explotación inhumana que se vive en la maquila
Vapores tóxicos todo el día de la fundición de aluminio, y de sosa cáustica, faltas de mascarillas especiales con filtro por los tóxicos que manejan. Se aspiran vapores con metales sulfámicos, que puede producir quemaduras graves en la piel, irritación de garganta y pulmones y hasta la asfixia, hay derrames de metal fundido en las áreas de trabajo, ruido tan alto que los tapones de oído no sirven para contenerlo, no proporcionan protección auditiva adecuada. El calor que emanan las máquinas es insoportable, hay ocasiones en que la temperatura llega a los 60° C.
Pero ni la desaparición de Servando, ni la muerte de Eduardo, ni las pésimas condiciones de trabajo en PW, fueron el motivo de su cierre parcial y temporal, las causas de la multa y el cierre de la empresa, fue la falta de un permiso del municipio para operar.
La STPS, a través del registro de avisos de accidentes, informó que, en Baja California en 2023, hubo 8 mil 811 accidentes laborales. El 11.5% de los accidentes laborales ocurridos en el País se han registrado en la entidad.
Tijuana es primer lugar en accidentes laborales, realmente son crímenes industriales lo que está sucediendo, si no se les da la debida capacitación a l@s trabajador@s y las medidas de seguridad no son activadas o corregidas, entonces no son accidentes, Todo esto es un ejemplo de la situación violatoria de los derechos humanos laborales, amplia y reiterada, cuya causa principal son los problemas estructurales del Estado mexicano que le impiden cumplir con sus obligaciones de respeto y garantía de los derechos humanos, cuando terceros en éste caso la industria maquiladora, cómete violación de derechos humanos laborales.
Con políticas de estar a favor de la industria maquiladora porque significa empleos, y que es muy importante apoyar el desarrollo de esta industria. Que esta es una industria importantísima para el país y por eso la cuidan, la apoyan, la protegen, y la fomentan. Por ello vienen este tipo de inversiones, que no les importan l@s trabajador@s, vienen por las grandes ganancias, que producen l@s trabajador@s en sus líneas y que el gobierno les sirve en bandeja de plata.
La Cámara Americana de Comercio en México dice que: “Las operaciones de las maquiladoras están estrechamente vinculadas a procesos integrales de producción y a condiciones del mercado extranjero sobre las cuales el gobierno mexicano no tiene ningún control (…) por lo que no hay nada que el gobierno mexicano pueda hacer (…) excepto bajar los costos de la mano de obra”. Es esta la manera en que se compite con EEUU y Canadá a costa de la salud y la vida de los trabajadores.
Es obligación de las autoridades del Estado y del País que haya condiciones de medidas de seguridad y queremos saber los resultados de la investigación de la STPS sobre las condiciones de salud y seguridad e higiene industrial en Prime Wheel y las estadísticas de los accidentes de trabajo en Tijuana, debe haber una inspección general en la maquila, exigimos a las autoridades mexicanas que actúen con la debida celeridad. Una de las cosas que se ven y permiten estas violaciones es porque no hay sindicatos o hay sindicatos de protección patronal, por lo tanto, l@ss trabajador@s están indefens@s.
La única forma, cómo sociedad civil de Tijuana, de Baja California y de San Diego, California es obligar a las empresas, a las autoridades laborales, a la fiscalía del estado, a que cumplan con lo que supuestamente están obligadas a hacer.
L@s individu@s, colectivos, sindicatos, organizaciones abajo firmantes llamamos organizarnos como trabajador@s en organizaciones independientes y democráticas, hay que perder el miedo a la organización y acabar con esta situación de faltas de medidas de seguridad e higiene industrial en Prime Wheel y en la maquila en Tijuana.
Exigimos que cada una de las autoridades mencionadas en este escrito cumplan con su papel respectivo y a la empresa PW a qué cumpla con las leyes mexicanas de salud y seguridad en el trabajo y a la STPS que entregué el informe de Prime Wheel y se corrijan las medidas y protocolos que no cumplieron con Servando Salazar Cano y con Eduardo Ortiz Franco
¡Verdad y justicia para Servando Salazar Cano!
¡Por la organización independiente, democrática y autónoma de L@s Trabajador@s de las maquiladoras!
AUTOR: REDACCIÓN.
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