MÉXICO, D.F: Era la tarde del 4 de septiembre de 2014. Karla Silvana, reportera de El Heraldo de León, se encontraba en la redacción del diario donde laboraba. En los últimos días había publicado información sobre presuntas irregularidades cometidas por el alcalde de Silao, Enrique Benjamín Solís Arzola.
Ese día Luis Gerardo Hernández Valdenegro, José Samuel Ornelas Martínez, El Buda, y Joaquín Oswaldo Valero Garnica, El Bayo, irrumpieron violentamente en la redacción.
Luis Gerardo amenazaba con un cuchillo a la secretaria, Adriana Elizabeth Palacios, mientras El Buda propinaba sin freno puñetazos, y puntapiés a Karla. Con un objeto le abrió la frente.
“Bájale a tus pinches notas o te va a cargar la chingada”, le alcanzaron a decir antes de salir tranquilamente de la redacción.
Afuera los esperaba Aguirre Guerrero para llevarlos de regreso a su casa. En el trayecto le preguntó a Luis Gerardo, quien viajaba como copiloto, quién había golpeado a la reportera y “si la habían madreado bien”.
El sujeto les respondió que El Buda se había encargado de los golpes y que el mensaje había sido trasmitido como se les había ordenado.
Desde el día de la agresión, el periódico y la reportera atribuyeron el hecho a su trabajo crítico contra la administración municipal de Silao, caracterizada “por su opacidad y por no haber respondido a las demandas de sus ciudadanos en cuanto a servicios públicos y principalmente seguridad”, publicó ese día el diario.
El testimonio de Hernández Valdenegro durante la audiencia de procedimiento abreviado de El Buda y El Bayo, confirmó las acusaciones del diario y la periodista.
El portal zonafranca.mx publica hoy que durante la mencionada audiencia la fiscal del caso, Yolanda Ramírez Domínguez afirmó que Luis Gerardo confesó que la orden para agredir a la reportera provino del “señor alcalde”.
Hernández Valdenegro rindió su testimonio ante el Ministerio Público tras ser liberado al ser favorecido por un procedimiento abreviado y hundió al alcalde, a su director de Seguridad Pública, Nicasio Aguirre Guerrero y a quienes, junto con él, agredieron a la periodista.
Según su relato, fue Aguirre Guerrero quien lo contrató para atentar contra Karla Silvana. Una vez concluido el “trabajo”, cada uno de los agresores recibiría cinco mil pesos. Además a Luis Gerardo le daba armas y drogas.
La fiscal relató que Aguirre Rivero, quien se fugó luego de la agresión, le dio instrucciones precisas a su socio y amigo:
“Le dijo que tenía que dejarle claro, bien claro, a la periodista que tenía que bajarle a sus notas, porque en éstas le tiraba mucha tierra a ‘los de arriba’”, comentó la fiscal.
Hernández Valdenegro dijo en su declaración que nunca habló con “los de arriba” pero antes de la agresión Aguirre Rivero le mostró en la pantalla de su celular de dónde venía la orden: “señor alcalde”.
Durante casi una semana el exdirector de Seguridad, condujo a Hernández Valdenegro a El Heraldo para “ubicar” a Karla Silvana.
Cuando la vio se negó a concluir su parte del trato e intentó esconderse de Aguirre quien un día recibió una llamada del “señor alcalde” en la que según la declaración del agresor confeso, le preguntó si “le faltaban huevos para ‘hacer el jale’, y si no podía para poner a otra persona”.
Para asegurar que hiciera el “trabajo”, el exfuncionario prófugo le prometió a Luis Gerardo que si tenía problemas la gente de “arriba” se encargaría de ayudarlo y si caía en prisión lo sacarían.
Hasta este día, la fiscalía sostenía la hipótesis de que Jorge Alejandro Fonseca Durán, director operativo de la Policía Municipal, fue quien condujo a Luis Gerardo, a El Buda y El Bayo a la oficina de El Heraldo.
Sin embargo, según la declaración de Hernández Valdenegro, Fonseca Durán sólo los condujo hasta la casa de Aguirre Guerrero y fue éste último quien los llevó a la redacción del diario en una camioneta RAM blanca, propiedad del municipio.
La audiencia, en la que estuvo presente Karla Silvana, duró más de 10 horas.
El Buda y El Bayo exigían ser liberados como su cómplice confeso mientras Karla Silvana exigía justicia y respeto.
La joven rompió en llanto cundo escuchó decir a la fiscal, Yolanda Ramírez Domínguez, que con la agresión su vida corrió un grave riesgo y que la única razón por la que fue agredida y amenazada fue su labor periodística.
Al finalizar la exposición del Ministerio Público, éste solicitó al Juez José Luis Argüello Uribe, dar a El Buda y a El Bayo –culpables confesos tras solicitar el procedimiento abreviado- la máxima pena por los delitos de lesiones, robo y amenazas.
La petición fue reprobada por los imputados, quienes exigieron ser juzgados de la misma manera que Hernández Valdenegro, libre desde enero pasado.
El juez emitió un fallo condenatorio, sin embargo este jueves 30 será dictada la sentencia definitiva.
Jorge Alejandro Fonseca, el único de los inculpados que no ha solicitado el abreviado, se encuentra a la espera de que su caso llegue a la etapa intermedia.
Este último junto con El Buda y El Bayo permanecen en prisión preventiva en el Centro de Readaptación Social (Cereso) de Irapuato.
FUENTE: PROCESO.
AUTOR: REDACCIÓN.