A cinco días de la irrupción de la Guardia Nacional en la casa de los pueblos Altepelmecalli, Puebla, y a tres años del asesinato Samir Flores Soberanes, defensor del territorio y comunicador comunitario asesinado en Amilcingo, integrantes de diversos colectivos protestaron frente a la representación de Puebla en la Ciudad de México, donde, además de demandar justicia para Samir y poner fin al saqueo del agua de sus manantiales por parte de la empresa Bonafont, se dijeron dispuestos a dialogar con el gobierno federal, estatal y municipal.
“A pesar de la rabia y el dolor que sentimos de ver que nuestra vida se pone en manos de quienes comercian con ella, estamos dispuestos a antes que cualquier otra acción, darle una oportunidad a la palabra, a sentarnos en una mesa e intentar dialogar. No estamos aceptando ni invitando a una negociación para ponerle precio a nuestra dignidad. Los estamos invitando, una vez más, como aquel día 22 de marzo o el día 8 de agosto de 2021 a presentar nuestras demandas legítimas por la vida y el bienestar de nuestros pueblos”, señaló la organización Pueblos Unidos en un comunicado leído en la actividad.