Nuevas pruebas ubican a militares en puntos y horas clave mientras se desarrollaba la detención de estudiantes normalistas durante la llamada noche de Iguala, y escuchas telefónicas de la DEA vinculan a un capitán con el cártel Guerreros Unidos.
Militares en lugares y horas cruciales durante la noche de la desaparición de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa y escuchas inéditas que vinculan a un capitán con el cártel Guerreros Unidos, son parte de nuevas evidencias que apuntan a la participación del Ejército en la noche de Iguala y a las que Animal Político tuvo acceso.