Acusó que la Fiscalía General del Estado de Guerrero (FGE) fabrica delitos y delincuentes por presión social y política.

En el linchamiento de una mujer y dos de sus hijos acusados del secuestro y muerte de Camila, no sólo fueron rebasados policías municipales, ministeriales y estatales, sino también agentes del Ejército y la Guardia Nacional.

Todos estuvieron presentes desde la mañana del jueves 28 en los pasillos y andadores del barrio La Florida, donde vecinos tenía cercada la vivienda en la que sabía que fue secuestrada y asesinada un día antes Camila, de 8 años.

La Fiscalía General del Estado (FGE) de Guerrero cumplimentó dos ordenes de aprehensión contra Axel Alejandro “N” y de un menor de edad, por su supuesta responsabilidad en el feminicidio de la niña Camila en Taxco.

Asimismo, informó que tras obtener de un juez la orden de aprehensión, se detuvo formalmente a los jóvenes presuntamente relacionados con el crimen.

Luego el asesinato de Camila, una niña de ocho años en Taxco, Guerrero, la madre de la pequeña expreso su dolor y descontento con las autoridades locales. Esto tras las declaraciones del Secretario de Seguridad del municipio, Doroteo Vázquez, quien aseguró la muerte de la menor fue una “responsabilidad maternal” y “una omisión”.

Un día después de que se diera a conocer el secuestro y asesinato de Camila, de ocho años de edad, en Taxco, la gobernadora de Guerrero Evelyn Salgado condenó el hecho, prometió que no habrá impunidad para los responsables y omitió hablar del linchamiento que derivó en la muerte de uno de ellos.

La noticia del secuestro y muerte de Camila marcó el inicio de la Semana Santa en el pueblo mágico cuyos habitantes decidieron hacer justicia por propia mano ante la inacción de las autoridades.

El gobierno estatal informó que uno presenta fractura en cráneo y otro fractura doble de brazo.