La autopsia habla de asfixia y traumatismo, pero no se precisa si la muerte del ambientalista fue accidental o si lo asesinaron.
“Pasamos varias veces por esos pozos. Traíamos la espinita, no solamente yo, varios. Porque estaban llenos de agua y estaba complicado. Incluso pensamos en meter unos buzos, porque son cuatro o cinco metros. Por desgracia ahí apareció. El cuerpo empezó a descomponerse y flotó”.
Juan Gómez, de 44 años, es hermano de Homero Gómez, el ambientalista michoacano cuyo cuerpo apareció el miércoles tras dos semanas desaparecido. No quiere especular sobre si el cadáver pudo ser colocado después o, simplemente, emergió a la superficie por un proceso natural. “Confiemos en las autoridades”, dice el cuarto de una saga de diez hermanos, que estaba encabezada por el activista ahora fallecido.
“Pasamos varias veces por esos pozos. Traíamos la espinita, no solamente yo, varios. Porque estaban llenos de agua y estaba complicado. Incluso pensamos en meter unos buzos, porque son cuatro o cinco metros. Por desgracia ahí apareció. El cuerpo empezó a descomponerse y flotó”.
Juan Gómez, de 44 años, es hermano de Homero Gómez, el ambientalista michoacano cuyo cuerpo apareció el miércoles tras dos semanas desaparecido. No quiere especular sobre si el cadáver pudo ser colocado después o, simplemente, emergió a la superficie por un proceso natural. “Confiemos en las autoridades”, dice el cuarto de una saga de diez hermanos, que estaba encabezada por el activista ahora fallecido.