Un policía y un periodista murieron el lunes en un ataque armado en el estado mexicano de Sonora en la última manifestación de la creciente violencia que azota a varias regiones del país y que llevó al Gobierno a reforzar presencia de la Guardia Nacional (GN) en una zona rural, cercana a la frontera con Guatemala, donde criminales han sitiado comunidades y han cortado el servicio eléctrico.

El ataque ocurrió cerca de la madrugada en una barriada de la localidad de San Luis Río Colorado, próxima a la frontera con Arizona, cuando cuatro policías que se encontraban fuera de servicio fueron tiroteados desde un vehículo, dijo en un comunicado la Fiscalía General del estado de Sonora.