“Ya sometida y esposada, con las manos hacia atrás, la mujer policía la tenía con su rodilla colocada en el cuello y los otros tres policías no hacían nada, solo observaron sin auxiliarla”.
Ese es uno de los testimonios que recabó la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) sobre el caso de la mujer salvadoreña Victoria Esperanza Salazar Arriaza, de 36 años, quien murió a manos de la policía el pasado 27 de marzo de 2021, en Tulum, Quintana Roo.