A 11 años de la represión sufrida por habitantes de San Salvador Atenco, Estado de México, y activistas y defensores de los derechos humanos que los acompañaban en su proceso de resistencia al despojo de sus tierras, los actos de tortura sexual en los que incurrieron policías estatales y federales permanecen impunes.
A través de un comunicado de prensa, el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez informa que las 11 mujeres víctimas denunciaron la tortura sexual ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos, derivada de los hechos de represión en San Salvador Atenco y Texcoco del 3 y 4 de mayo de 2006.