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miércoles, 25 de enero de 2017

Calderón llama hipócrita a AMLO por integrar a Esteban Moctezuma a su equipo

CIUDAD DE MÉXICO: El expresidente Felipe Calderón criticó la llegada de Esteban Moctezuma, presidente ejecutivo de Fundación Azteca, al equipo de Andrés Manuel López, a quien acusó de ser hipócrita o negociar “en lo oscurito”.


Ayer, el presidente nacional de Morena anunció que el expriista y exfuncionario del gobierno de Ernesto Zedillo, será el responsable de Desarrollo Social de su equipo para que, junto con otros empresarios e intelectuales, elaboren el Proyecto de Nación 2018-2024.

“El renacimiento de México no es tarea de un solo hombre, sino de la suma de voluntades y de la responsabilidad de todas y de todos”, indicó el tabasqueño en su cuenta de Facebook.


Esta mañana, Felipe Calderón, quien contendió contra López Obrador en el 2006 por la presidencia de la República, compartió un mensaje a sus seguidores en Twitter:





Por su parte, al confirmar que formará parte del equipo que elaborará el proyecto de Andrés Manuel, Moctezuma afirmó que no dejará su cargo, pues contribuirá con ideas y no haciendo campaña ni militancia.


“Es una contribución de ideas, creo que este año México tiene que voltearse hacia dentro, voltearse hacia qué somos como país, cómo nos vamos a definir después del TLC”, mencionó.

FUENTE: PROCESO.
AUTOR: REDACCIÓN.
LINK: http://www.proceso.com.mx/471653/calderon-llama-hipocrita-a-amlo-integrar-a-esteban-moctezuma-a-equipo

domingo, 8 de enero de 2017

Tiempos de Calderón: brotan casos de impunidad militar

Un día de 2009 Alicia Saláis Orrantia, activista por los derechos humanos de Nuevo Casas Grandes, Chihuahua, llegó a las oficinas de la Procuraduría General de la República (PGR) en Ciudad Juárez a denunciar el acoso al que, afirmaba, la sometían militares.

Su queja fue a parar a manos del Ejército, porque la instrucción (una “instrucción superior” que nunca fue especificada) era que todas las denuncias contra militares fueran enviadas a la guarnición de la plaza. Alicia fue a quejarse dos veces más a la PGR. Meses después asesinaron a su hijo. Después, a su esposo. Al final la mataron a ella.

Saláis Orrantia, de la Asociación Civil de Derechos Humanos en Nuevo Casas Grandes, fue secuestrada afuera de su oficina el 5 de noviembre de 2009 luego de testificar sobre el homicidio de su esposo, Paz Rodríguez Ortiz, ocurrido un mes antes y tras denunciar el asesinato de su hijo Paz Alberto. Todos eran activistas por los derechos humanos.

Con 10 casos de defensores de derechos humanos ultimados, 2009 fue el peor año para éstos en Chihuahua.

Acoso gubernamental

En 2008 la abogada Rosa María Sandoval Chávez fue defensora particular de tres hombres detenidos en Ciudad Juárez, a quienes les encontraron drogas y una caja fuerte con dinero. La caja la abrieron soldados, quienes entregaron poco más de 100 mil pesos a las autoridades. Los detenidos dijeron que había más de 300 mil, según el expediente PGR 277/2008.

Tiempo después Sandoval colaboró con el gobierno de César Duarte: fue fiscal en la Unidad Especializada en Control, Análisis y Evaluación de la Fiscalía del estado de Chihuahua.

En ese puesto fue acusada por Manuel García –ayudante de Marisela Escobedo, la activista social asesinada en diciembre de 2010 frente al Palacio de Gobierno de Chihuahua mientras protestaba por la desaparición de su hija Rubí Marisol Fraire Escobedo– de presionarlo y amenazarlo para que cambiara su declaración ministerial y se incriminara junto a su fallecida compañera, de pertenecer al cartel de Joaquín El Chapo Guzmán.

Manuel García aseguraba que la acusación, según la fiscal Sandoval, la iba a armar basada en una narcomanta aparecida el 21 de diciembre de 2010 en Ciudad Juárez, y en la cual supuestamente la organización criminal se solidarizaba con la familia de Escobedo y solicitaba información sobre Sergio Rafael Barraza Bocanegra, asesino de Rubí.

Recordaba que se negó a “manchar la memoria de Marisela Escobedo”. Fue amenazado de muerte y le retiraron la protección policiaca que tenía tras el homicidio de la activista. En diciembre de 2011 declaró a losangelespress.org que tuvo que salir por sus propios medios de Ciudad Juárez, pues su vida corría peligro.

El caso Unzueta

Federico Unzueta fue detenido por soldados y encerrado en la guarnición militar casi un mes. Su delito fue vivir en un barrio conflictivo y saber quién era quién en el lugar. Durante su paso por la base militar de Ciudad Juárez lo tuvieron vendado de los ojos todo el tiempo, pero aun así pudo platicar con otro detenido del mismo barrio, pues los colocaron juntos.

Era lo que contaba su esposa, quien iba a preguntar a diario a las oficinas de la PGR por él. Comentaba que en el cuartel militar le decían que ahí no estaba. Después de casi un mes, un muchacho buscó a la mujer, le dijo que traía un recado de su esposo. A este chico lo torturaron para sacarle información y lo dejaron salir. Unzueta creyó, porque así le dijeron, que él también iba a salir. Entonces le comentó a la esposa que no se preocupara, que lo iban a dejar salir, que sólo le habían sacado información de todos los consumidores de drogas del barrio.

Pasaron los días, Federico no aparecía y el Ejército seguía diciendo que no lo tenía. Después, con huellas de tortura, su cadáver apareció en la calle. Testigos dijeron que fue arrojado desde un automóvil. Su esposa lo encontró dos semanas después, en calidad de desconocido, en el Servicio Médico Forense.

Se tenía que iniciar una averiguación por homicidio contra quien resultara responsable. Pero el agente de la PGR no quiso hacerlo por temor a los militares y porque a él le hubiera correspondido la investigación e integración del expediente. Así que se levantó acta circunstanciada. Se iba a elevar a averiguación previa pero se archivó el expediente.

Testimonios de exfuncionarios

“Hubo un tiroteo entre sicarios en Ciudad Juárez. Los que quedaron en el lugar de los hechos iban en una camioneta Durango azul. Al parecer había cuatro tripulantes. Uno quedó muerto al volante; otro, en el asiento trasero. Hubo un sobreviviente que recibió un tiro en la cadera y quedó paralítico. Estuvo en una clínica privada y nunca se supo quién pagaba la cuenta. El médico decía que era una obra de ‘humanidad’”, narra un exfuncionario de la PGR quien pide la reserva de su nombre.

“El caso”, continúa, “es que uno de los sicarios muertos era gemelo de un (agente del) Ministerio Público del estado asignado a homicidios. Cierto día en las instalaciones de la Procuraduría de Justicia de Chihuahua, los agentes federales estaban dando fe de la camioneta, mientras los militares tomaban los chalecos antibalas que estaban dentro del vehículo. Se llevaron lo que pudieron… parecían aves de rapiña.

“Días después llevaron detenidos a los hermanos del sicario muerto, el que era Ministerio Público del fuero común y otro, de la Policía Municipal, junto con la esposa del primero, que también era perito en la Procuraduría local. Los tres habían estado detenidos varios días en la guarnición militar sometidos a torturas; a la mujer la desnudaban y la hacían darse vuelta y dice que le tomaban fotos. Siempre negó que la hubieran violado.

“Los presentaron ante la PGR con drogas y armas y fueron consignados. Después un periódico publicó que la camioneta en la que supuestamente los detuvieron había sido decomisada días antes en la cochera de una casa donde se hizo un cateo y ahí salía en la foto. Así que todo el parte informativo de los militares era una farsa y así lo manejó el defensor de los detenidos y logró tumbar el proceso. Pero ellos no querían salir libres, decían que los militares los fueron a amenazar al Cereso: si salían, los matarían.

“Dos o tres meses después, al revisar los objetos de los sicarios, se hallaron las pertenencias de un policía municipal que había desaparecido ese mismo día (el del tiroteo de sicarios en Ciudad Juárez) al salir del turno a las seis de la mañana. Su cartera estaba salpicada de sangre, estaba su licencia, su IFE, su credencial de policía, su placa, además de documentos personales; también fornitura. Pero nunca se supo si él iba en la camioneta Durango y escapó durante el tiroteo.

“Era la cuarta persona, porque había rastros de sangre de la camioneta hacia la banqueta cercana y ahí se perdían. Nos pareció un caso extraordinario para investigar, pero el jefe no quiso. Decía que si se iba a fondo podrían matar a todos. Y así quedó. Nos comunicamos con la esposa para entregarle sus cosas y lo agradeció, porque la Policía Municipal le iba a cobrar la fornitura, la credencial, la gorra. Porque según ellos había sido abandono de trabajo, aunque no había cuerpo. Increíble. Fue en 2008 en las instalaciones de la guarnición militar de Ciudad Juárez, que se encuentra al lado del Cereso.”

El saqueo

“Por esos meses en la guarnición se veían camionetas último modelo estacionadas junto a cuatrimotos de colores brillantes, hasta remolques con lanchas. ¿Lanchas en Ciudad Juárez? Se sabía que era todo lo que robaban los militares en los cateos. A veces abrían las puertas de las camionetas verdes del Ejército y se veía pintura roja o de otro color en la orilla de la puerta y varias tenían rines cromados”, narra a Proceso otro exfuncionario de la PGR adscrito en esa época a Ciudad Juárez.

“Cierta ocasión los militares detuvieron a un hombre, ya no recordamos cuáles fueron los cargos, pero la camioneta no era objeto de delito y la fue a reclamar la esposa. Un oficial del cuartel no la quería entregar, le daba muchas vueltas hasta que llamó por teléfono; antes preguntó de qué color estaba pintada… la señora dijo que roja. Entonces comentó al hombre con el que hablaba que la volvieran a pintar de rojo, porque se iba a entregar.”

“Otro día, eran como las seis de la mañana, cuando salimos de trabajar. Vimos un camión militar de redilas grande como con un menaje de casa: llevaba televisiones, refrigeradores, lavadoras, sillas, motos, micros, de todo. Iba rumbo a la guarnición. Era requisito que cuando llevaran autos decomisados, siempre deberían ir con el número de averiguación previa que correspondía. Pero a veces había más de 10 vehículos que decían les habían sobrado –obvio, desvalijados–, sin número de averiguación ni nada.

“Muy probable, porque eso se comentaba, que el general Felipe de Jesús Espitia Hernández, comandante de la Operación Conjunta Chihuahua, repartiera el botín antes de salir de Juárez. Se había hecho muy cercano de una agente del Ministerio Público Federal; cada que ella estaba de turno casualmente era cuando más detenidos llegaban, porque la Ministerio Público hacía negocio con los detenidos, ya que los cargaban ligero de drogas o con armas para que alcanzaran fianza y ahí era el negocio.

“Muchas de las armas que llevaban con los detenidos eran recicladas, porque las reconocíamos al verlas tanto el perito de armas como el resto de los agentes. A veces llevaban matrícula o se la borraban, pero eran las mismas.

“Muchos de los detenidos eran ‘cargados’. Nos decían que al ser asegurados les encontraban droga para su consumo –eran consumidores–, pero los militares les decían: ‘Si me llevas con tu vendedor, a ti te suelto’. Y ellos con esa esperanza los llevaban. Al llegar, los soldados extorsionaban al vendedor y consignaban al consumidor cargándolo con más droga. Varios detenidos declararon lo mismo. Después se supo que algunos salieron porque comprobaron que no traficaban ni vendían.”

La prepotencia

“Cuando se desató la violencia en Ciudad Juárez, iba acompañada de desapariciones. Por tal motivo había muchos amparos de toda la gente desaparecida que era detenida por militares y llevada a la guarnición, donde estaba el puesto de mando de la Operación Conjunta Chihuahua”, cuenta a este semanario otro exfuncionario de la PGR.

“Entonces los actuarios de los juzgados iban a buscarlos a la guarnición y los dejaban esperando a veces horas antes de dejarlos entrar para buscar a los detenidos. Porque los militares siempre negaban tener detenidos ahí. Después de que los dejaban pasar, los llevaban por toda la guarnición, y el actuario gritaba los nombres de los desaparecidos… y nada. Y los militares les decían: ‘Ya ve, aquí no tenemos a nadie’.

“Después un detenido reveló el truco. Resulta que cuando iban los enviados del juzgado, los hacían esperar un buen rato porque subían a los detenidos a los camiones. Con ellos iban también soldados con armas largas. Los encañonaban y los andaban paseando por toda la guarnición justo del lado contrario de donde andaba el actuario. Ellos escuchaban cómo los llamaban por su nombre, pero no podían hablar.

“Inclusive se dijo alguna vez que tuvieron encerrado a un actuario en la guarnición más de cinco horas, porque les molestaba ser visitados y cuestionados. Hasta que un juez habló con el delegado de la PGR y éste a su vez llamó al general Espitia para que lo soltaran."





Fuente: Proceso
Autor: Juan Veledíaz
http://www.proceso.com.mx/468963/tiempos-calderon-brotan-casos-impunidad-militar

viernes, 6 de enero de 2017

“Entre más trabajos destruyas en México, más inmigrantes tendrás”, advierte Calderón a Trump

CIUDAD DE MÉXICO: El expresidente Felipe Calderón envió un mensaje al próximo mandatario de Estados Unidos en el que le pide que piense un poco sus acciones en contra de México.


A través de su cuenta de Twitter, el panista advirtió que entre más empleos destruya para el país, más inmigrantes llegarán al suyo.







El pasado 3 de enero, cuando la empresa automotriz Ford anunció la cancelación de su proyecto de construir una nueva planta en San Luis Potosí, Calderón criticó la presión que el magnate está ejerciendo para impedir inversiones en el país.





“Si @realDonaldTrump presiona a las empresas y ellas no invierten en nuestro país, ¿qué harán nuestros trabajadores? ¿(Trump) piensa que así reducirá la inmigración?”, aseguró.

FUENTE: PROCESO.
AUTOR: REDACCIÓN.
LINK: http://www.proceso.com.mx/469020/trabajos-destruyas-en-mexico-inmigrantes-tendras-advierte-calderon-a-trump

Los Calderón nadan en la abundancia

CIUDAD DE MÉXICO: Después de entregar el poder presidencial a Enrique Peña Nieto, en 2012, Felipe Calderón sostenía a Margarita Zavala y a sus tres hijos con su pensión vitalicia de 205 mil pesos al mes; pero desde julio pasado la empresa Avangrid –dedicada a la energía– lo contrató y le paga la mayor parte de los 8 millones 267 mil pesos de sus ingresos anuales.

Por su parte, Margarita Zavala, quien busca llegar al mismo cargo que tuvo su marido y obtener otra pensión de por vida de 205 mil pesos al mes, tiene ingresos anuales de 868 mil pesos para llegar a un total, como pareja, de 9 millones 135 mil pesos al año –761 mil al mes–, libres de impuestos.

Aun así la pareja goza de diversos lujos sin pagar un centavo, como pasear en el ostentoso yate de la familia Mouriño, como lo hizo apenas el 19 de noviembre, y asistir a espectáculos muy costosos.

Calderón asistió al Gran Premio de México de Fórmula Uno por cortesía de los patrocinadores de automovilistas mexicanos –es comisario de la Escudería Hermanos Rodríguez– y aceptó de Coca Cola FEMSA cuatro lugares en un palco para presenciar el Juego de la NFL en México, en el Estadio Azteca.

También de manera gratuita, Calderón y Zavala asistieron, en febrero de 2015, al Súper Bowl 49, en Phoenix, Arizona, gracias a la invitación de la CEO de la trasnacional Pepsico, Indra Nooyi, con quien se tomaron fotografías. A ese juego entre Nueva Inglaterra y Seattle asistieron también Juan Ignacio Zavala, hermano de Margarita, y el senador panista Ernesto Cordero.

Y el año pasado, también en febrero, Zavala aceptó el regalo que la cadena Fox Sports le hizo de un viaje todo pagado al Súper Bowl 50, en California, cuyo boletaje fue el más caro en la historia de este tipo de juegos y que para palcos, donde esa televisora atiende a sus invitados, costaron hasta 12 mil 100 dólares.

Este último dato lo proporcionó Zavala como parte de sus declaraciones patrimonial, de intereses y fiscal –las 3 de 3–, que presentó, el 19 de diciembre, y en la cual no dijo que el propietario de Fox Sports en México es el empresario Manuel Arroyo, presidente de Grupo Lauman, entre cuyos negocios se encuentra el diario El Financiero, donde publica su hermano Juan Ignacio.

Por cortesía del Comité Central de la Comunidad Judía en México, Zavala viajó a Israel el pasado septiembre, para “conocer programas de innovación, inclusión, agronomía y seguridad pública que se han implementado en Israel; así como reunirse con liderazgos”, entre ellos, el premier Shimon Peres, quien pocos días después murió.

3 de 3

Zavala desglosó sus ingresos anuales por 868 mil pesos, la mayoría de los cuales –765 mil– son por servicios profesionales: 404 mil como conferencista, 305 mil como colaboradora del diario El Universal y 56 mil como profesora del Instituto Asunción.

El patrimonio inmobiliario del matrimonio prácticamente no observa un incremento respecto a lo que se detalló en el reportaje “Trucos y ocultamiento de los Calderón”, publicado por este semanario (Proceso 2079), salvo que en una de sus propiedades en Ayapango, Estado de México, se instaló la empresa Agros Navidad, S.A. de C.V., cuyo objetivo es la plantación y comercialización de árboles de Navidad.

Lo que más revela la declaración de intereses de Margarita Zavala es el voluminoso ingreso de su marido desde que, en julio, se incorporó al consejo de administración de Avangrid, empresa ligada a Iberdrola, que le reporta la mayor parte de sus más de 8 millones de pesos anuales de ingresos.

Según la declaración de la panista, el Estado Mayor Presidencial les proporciona a ella, a su marido y a los demás integrantes de la familia transportación terrestre segura con dos vehículos blindados, aunque no precisa cuántos efectivos de ese cuerpo militar los custodian.

La 3 de 3 de Zavala, que la presentó como “persona de interés público” –imitando al también presidenciable Jorge G. Castañeda–, menciona que es fundadora de la asociación civil Dignificación de la Política, por medio de la cual financia su activismo con el movimiento Yo Con México, alterno al PAN.

De acuerdo con la información que Zavala entregó al reportero a petición expresa, esa asociación civil recaudó de enero a agosto de 2016 un total de 14 millones 282 mil pesos, de los cuales gastó 11 millones 672 mil en financiar sus actividades proselitistas.

La asociación civil emplea a 42 personas, a las que ha pagado 5 millones 810 mil pesos, mientras que 1 millón 525 mil 281 pesos se destinaron a viáticos y pasajes y 3 millones 155 mil 63 pesos se gastaron en la organización de actos de Zavala Gómez del Campo.

La información, que según el equipo de prensa de Zavala está validada por el despacho Gómez y Sánchez-Aldana, S.C., Auditores y Consultores, establece que “los ingresos (de la asociación civil) provienen de donativos individuales, eventos de recaudación y venta de artículos promocionales”.


Sobre el número de donadores, el documento difundido por el equipo de prensa de la aspirante presidencial explica que “son muchos los ciudadanos que han donado este año de distintas maneras, al mes de octubre eran 2 mil 826 donadores”.

FUENTE: PROCESO.
AUTOR: ÁLVARO DELGADO.
LINK: http://www.proceso.com.mx/468953/los-calderon-nadan-en-la-abundancia

miércoles, 28 de diciembre de 2016

Los gasolinazos en los sexenios de Calderón y Peña

Los gasolinazos a lo largo del sexenio de Felipe Calderón y lo que va la administración de Enrique Peña Nieto en gráficas.







Fuente: Proceso
Autor: Redacción
http://www.proceso.com.mx/467875/los-gasolinazos-en-los-sexenios-calderon-pena-graficas

lunes, 12 de diciembre de 2016

Calderón “congeló” hasta 2018 dos datos cruciales: por qué la guerra, y por qué la estrategia

El 12 de diciembre de hace diez años fue el primer día de la Guerra en contra del Crimen Organizado, una de las etapas más sangrientas en la Historia reciente de México y que aún no encuentra fin. ¿Había razones fundadas para mantener esta ofensiva? Por lo menos los documentos públicos no pueden ser consultados. Felipe Calderón Hinojosa, Presidente de México de 2006 a 2012 y quien lanzó la ofensiva, dejó clasificada bajo reserva la Agenda Nacional de Riesgos (ANR) de 2011, el año más violento de su sexenio.

La Agenda Nacional de Riesgos (ANR) de 2011, el documento elaborado por el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN) que indica el grado de vulnerabilidad del Estado, fue reservado hasta 2018 por el entonces Presidente Felipe Calderón Hinojosa, lo que impide conocer si en verdad había razones para mantener la estrategia en contra del llamado crimen organizado.

Además, los “factores determinantes” para que el Gobierno federal emprendiera la llamada guerra o combate contra el narcotráfico, o de manera general, lucha contra el crimen organizado” fueron declarados “inexistentes” por Los Pinos ese año, cuando a Calderón le faltaban meses para dejar la Presidencia.

Según el CISEN, la ANR es un producto de inteligencia y un instrumento prospectivo que identifica riesgos y amenazas a la Seguridad Nacional, la probabilidad de su ocurrencia, las vulnerabilidades del Estado frente a fenómenos diversos y las posibles manifestaciones de los mismos. Este documento que debe ser aprobado por el Presidente de la República cada año, permite orientar las acciones, los mecanismos de coordinación y las políticas.

Cuestionado su triunfo en las elecciones de 2006 y apurado para conseguir legitimidad, el Presidente Felipe Calderón inició una estrategia de seguridad el 11 de diciembre de ese año con la Operación Conjunta Michoacán que implicó el despliegue en ese estado de seis mil elementos del Ejército, la Fuerza Aérea, la Armada y la Secretaría de Seguridad Pública.

Los años calderonistas transcurrieron y a pesar de que hubo varias advertencias de que el costo de la ofensiva era una crisis de Derechos Humanos, el Presidente no quiso o no pudo detenerse. En 2008, dio varios discursos triunfalistas. El 11 de junio de 2008 expresó:
“Eso es lo que estamos haciendo, amigas y amigos colaboradores, enfrentando a la delincuencia y derrotándola en una guerra, en una batalla que será de muy largo plazo […] Soy partidario de que las batallas, las guerras se ganan, precisamente, con información, con inteligencia y con estrategia […] Y estamos escalando las potencialidades de inteligencia, particularmente en el nivel federal, porque queremos y sabemos, verdaderamente, cómo vamos a ganar esta guerra”.
Y el 17 de septiembre del mismo año, dijo: “… Es imprescindible que todos los que nos sumamos a ese frente común pasemos de la palabra a los hechos y que declaremos, verdaderamente, la guerra a los enemigos de México y vayamos por la victoria que la Patria reclama y a la que tiene derecho. Estoy convencido que esta guerra la vamos a ganar y la vamos a ganar con el apoyo y la participación de todos”.


ADEMÁS

En sus palabras estaba la victoria, pero el entonces Presidente no pudo responder cuáles eran los criterios para indicar que la guerra se estaba ganando o que por lo menos, había una expectativa sustentada para ganarla. A la solicitud de información con el folio 0210000150808 en la que se le requirió cualquier elemento para la elaboración de sus discursos respecto al triunfo, Los Pinos respondió que no contaba con información y el Comité de Información los declaró “inexistentes”.

Así llegó el 20 de enero de 2011, cuando Felipe Calderón negó haber pronunciado el término “guerra”.
“Yo no he usado el término “guerra”. Y sí puedo invitar a que se revisen todas mis expresiones públicas y privadas. Yo no elegí el concepto de guerra. Yo he usado permanentemente el término de lucha contra el crimen organizado y lo seguiré usando”.

Más allá de si la ofensiva se llamó “guerra” o “lucha” o “batalla”, 2011 fue el año más violento del sexenio de Felipe Calderón Hinojosa, según los conteos de muertos del Instituto Nacional de Estadística Geografía e Informática (Inegi). Ese año, se registraron 27 mil 213 muertes violentas, el número más alto en esa categoría desde 1990. En el sexenio, el número de homicidios se incrementó en 150 por ciento.

Mientras en México, el entonces Presidente clasificaba las razones de la guerra, la Corte Penal Internacional de La Haya, Países Bajos, recibía una demanda en su contra interpuesta por un grupo de abogados y 23 mil ciudadanos mexicanos que pedían juicio para el ex Mandatario por responsabilidad individual en crímenes de lesa humanidad. El legajo lo integraron con 50 mil muertos y 10 mil desaparecidos.  Además, describieron la brutal forma en que en ese tiempo -como ocurre ahora mismo- se encontraba la hora última en México. Era un panorama de despojo y desolación. Dijeron que era la guerra.

FUENTE: SIN EMBARGO.
AUTOR: LINALOE R. FLORES.
LINK: http://www.sinembargo.mx/12-12-2016/3124139

domingo, 6 de noviembre de 2016

La sombra del pacto

El Partido Acción Nacional se debate en una lucha interna. Por un lado los anayistas, y por otro los calderonistas-zavalistas, van en pos de la candidatura a la Presidencia. Y en medio de esa disputa, Enrique Peña Nieto homenajeó a Felipe Calderón en lo que podría interpretarse como la confirmación de un pacto de apoyo del PRI a las aspiraciones presidenciales de Margarita Zavala.

CIUDAD DE MÉXICO (Proceso).- En medio de la cruenta disputa por la candidatura presidencial del Partido Acción Nacional (PAN) que ambicionan Margarita Zavala, Ricardo Anaya y Rafael Moreno Valle, un hecho insólito ocurrió en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM): Enrique Peña Nieto homenajeó a Felipe Calderón, su antecesor en la Presidencia, por su contribución “al desarrollo de una sociedad más libre, más justa y más próspera”.

Nunca en los 70 años del ITAM había asistido un Presidente de la República en funciones a entregar un reconocimiento como el que, el martes 1, Día de Muertos, dio en mano a Calderón por ser “un modelo a seguir” para la comunidad de esa institución presidida por Alberto Bailleres González, el segundo hombre más rico de México.

La ceremonia se realizó a puerta cerrada, en día de asueto, con invitación personalizada y sin ninguna difusión –ni para la fuente presidencial–, con el fin de evitar brotes de inconformidad contra Calderón o Peña, quien el año pasado hizo que el Senado otorgara la medalla Belisario Domínguez a Bailleres, con una fraudulenta votación (Proceso 2037).

Mientras Anaya, presidente del PAN, era exhibido mediáticamente por su vida de lujos en Estados Unidos, donde tiene radicada a su familia; al gobernador Moreno Valle le era cancelada por ilegal su propaganda como “nuevo presidenciable” y Zavala convalecía de una operación ocular, Calderón recibió el reconocimiento que le otorgó la Asociación de Exalumnos del ITAM, presidida por Lorenzo Meade Kuribreña.

La distinción no es fortuita: Lorenzo es hermano de José Antonio Meade Kuribreña –galardonado también ese día–, a quien Calderón hizo secretario de Energía y Hacienda, mismo cargo que, desde octubre, ostenta con Peña, luego de haber sido, también en este sexenio, secretario de Relaciones Exteriores y de Desarrollo Social, por cuya trayectoria es identificado como presidenciable.





Fuente: Proceso
Autor: Álvaro Delgado
http://www.proceso.com.mx/461527/la-sombra-del-pacto

miércoles, 2 de noviembre de 2016

A puerta cerrada, EPN entrega reconocimiento del ITAM a Calderón

CIUDAD DE MÉXICO: Ante el patriarca del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), Alberto Bailleres, el presidente Enrique Peña Nieto entregó anoche un reconocimiento a Felipe Calderón, su antecesor en el cargo, por sus supuestas contribuciones al desarrollo político, económico y social del país.

El reconocimiento de Peña a Calderón se produce a un año de que Bailleres, uno de los principales multimillonarios del país, recibió la medalla “Belisario Domínguez”, impulsada por las bancadas del PRI y PAN en el Senado, y cuando la esposa del panista, Margarita Zavala, busca ser la candidata presidencial.


La información fue publicada hoy como primicia por el diario capitalino Reforma, pero la Presidencia de la República y Peña Nieto nada dieron a conocer al respecto. Calderón, a su vez, agradeció el reconocimiento al ITAM, recibido en el marco del 70 aniversario de su fundación.





El diario publicó una fotografía en la que aparece Bailleres flanqueado por Peña Nieto y Aurelio Nuño, secretario de Educación, y cerca de ellos Miguel Ángel Mancera, jefe de gobierno de la capital del país.


Calderón estudió una maestría en economía en el ITAM, y el premio que Peña le entregó se llama Carrera al Universo, la máxima distinción que esa institución brinda a un exalumno por su aporte al desarrollo del país.





Según la información del diario Reforma, que recogió testimonios de asistentes –porque la ceremonia se realizó de manera privada–, cuando Peña entregó a Calderón el reconocimiento en propia mano, “el auditorio respondió con una ovación. Ambos lucieron sonrientes, así como los integrantes del presidium”.

Justo cuando ya está en curso el proceso para la sucesión presidencial de 2018 y una de cuyas contendientes pretende ser Margarita Zavala, esposa de Calderón, se celebra este hecho en el ITAM, institución que es semillero de la alta burocracia federal en las más recientes tres décadas.

Esta es la primera vez que un presidente de la República entrega a su antecesor de otro partido un reconocimiento del ITAM, galardón que también fue entregado al gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, primer secretario de Hacienda de Calderón.

Bailleres, dueño del Grupo Ball y uno de los hombres más ricos de México, recibió el año pasado la medalla Belisario Domínguez en un proceso deslucido de principio a fin: Por primera vez desde que el Senado creó la presea, hace seis décadas, se rompió la unanimidad; sólo un voto –el de un perredista– evitó el rechazo, y la ceremonia de la entrega fue desairada por la mitad de los legisladores.

Pero sucedió algo peor: En el Senado se maquinó un fraude para alterar la votación y aumentar el número de senadores que se pronunciaron por honrar al tercer hombre más rico de México, dueño de múltiples negocios y beneficiario de la privatización del petróleo aprobada justamente por sus premiadores.

Los 65 votos computados en la sesión del 4 de noviembre –una raquítica mayoría de la mitad más uno– se convirtieron en 72. Siete sufragios de senadores aparecieron, repentinamente, en la versión estenográfica y en la votación oficial.

Eso también pasó con los votos en contra de otorgar el reconocimiento al magnate: De 12 pasaron a 13.

Se trata de una adulteración de la voluntad del Senado que presidía en ese momento el panista Roberto Gil Zuarth, egresado del ITAM, y cuya Junta de Coordinación Política estaba encabezada por el priista Emilio Gamboa Patrón, máximos jerarcas de ese órgano del Poder Legislativo federal y de quienes pudo venir la orden para cometerla.

La turbia operación de la triada PRI-PAN-PVEM para entregarle la medalla a Bailleres, que se otorga a los mexicanos que se han “distinguido por su ciencia o su virtud en grado eminente como servidores de nuestra patria o de la humanidad”, tuvo un desenlace sin lustre.

La ceremonia solemne del jueves 12 de noviembre fue desairada por casi la mitad de los senadores –la sesión se instaló con sólo 68 de los 128–, a tal punto que 21 de 38 panistas que votaron por él se ausentaron y también 11 de los 22 perredistas, cuyos escaños fueron ocupados por ujieres.

Miguel Barbosa, coordinador de los senadores del PRD, aseguró que la entrega de la Belisario Domínguez a Bailleres fue una orden de Peña Nieto.

“Tengo perfectamente claro que de Los Pinos se le hace al grupo parlamentarios del PRI una orientación política para galardonar a un empresario emblemático de ese sector y con ello mandar un mensaje de reconocimiento del poder hacia los empresarios”.

Para el perredista, el respaldo de la bancada del PAN a Bailleres –quien incrementó su fortuna en los sexenios de Vicente Fox y Calderón– es lógico, porque “este partido tiene un perfil político cercano al sector empresarial y este reconocimiento es también un asunto de concepción de país”.

Barbosa le dijo al reportero Arturo Rodríguez que en la ceremonia de premiación, los discursos de Bailleres y de su promotor, el senador Roberto Albores Gleason, fueron a favor del sector privado.

“Son discursos de empresarios para los empresarios. El reconocimiento del poder público, en este caso del Senado, es para los empresarios de México”.


Bailleres se hizo acompañar de los dos máximos jerarcas de la cúpula del sector privado: Claudio X. González Laporte, presidente del Consejo Mexicano de Hombres de Negocios, y el entonces dirigente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Gerardo Gutiérrez Candiani.

FUENTE: PROCESO.
AUTOR: ÁLVARO DELGADO.
LINK: http://www.proceso.com.mx/461074/a-puerta-cerrada-pena-entrega-reconocimiento-del-itam-a-calderon

viernes, 22 de julio de 2016

Calderón salvó al PRI; Peña lo hunde

CIUDAD DE MÉXICO: Los peores momentos del Partido Revolucionario Institucional, previos a los que hoy vive, ocurrieron durante los sexenios de Ernesto Zedillo y Vicente Fox, cuando perdió 12 gubernaturas (tenía 29 en 1994 y 17 en 2006); 62 senadores (95 en 1994 y 33 en 2006); 194 diputados (300 en 1994 y 106 en 2006); más de 21 puntos porcentuales de preferencias electorales (de 50.3 en 1994 a 29 en 2006, en alianza con el PVEM); y pasó de ser la primera fuerza electoral en el país en 1994 a la tercera fuerza en 2006, tanto en la elección presidencial como en la legislativa.

Sin embargo, la llegada de Felipe Calderón a la Presidencia le permitió revertir la tendencia decreciente y en la primera mitad del sexenio ya había logrado recuperar dos gobernadores (para llegar a 19), 136 diputados (de 106 a 242) y la mitad del porcentaje de votos perdidos (de 29 a 39.6%); y aunque no logró mantener la recuperación en las preferencias electorales y los diputados, sí lo hizo en las gubernaturas, pues concluyó el sexenio con 21 gobernadores; además en las elecciones de 2012 obtuvo 33.6% de los votos; 214 diputados y 52 senadores, es decir, 108 diputados y 19 senadores más que en 2006.

Con el regreso del PRI a Los Pinos la tendencia nuevamente se revierte: en 2015 perdió siete puntos porcentuales y 11 diputados respecto a los que había obtenido en 2009 y se quedó con 32.6% de los votos, ya muy cerca de su mínimo histórico, y 203 diputados. Y en 2016 la debacle se acentúa: al perder siete de las 12 gubernaturas en disputa, tiene únicamente 16 gobernadores (incluyendo al chiapaneco militante de su aliado, el Partido Verde Ecologista de México y postulado en coalición); y la preferencia electoral, en las 12 entidades donde hubo elecciones a gobernador –estados donde el PRI normalmente obtenía porcentajes de votación superiores al promedio nacional– regresó al 29% de 2006.

Tal como señaló el flamante dirigente nacional del PRI, Enrique Ochoa Reza, estos momentos son “particularmente difíciles… en la vida de nuestro instituto político”. También acierta al señalar: “No cabe duda que el elemento más adverso a la clase política hoy en México son las acusaciones de corrupción y de impunidad”.

Sin embargo, sesgado por la lealtad a sus mentores o contaminado por la endogamia, equivoca rotundamente la lectura de la realidad mexicana: Peña Nieto no es “el mayor activo del Partido Revolucionario Institucional y de México” y tampoco la corrupción se encuentra únicamente a nivel de los gobiernos estatales y municipales. Permea los tres niveles de gobierno (federal, estatal y municipal) y desde luego, como evidencian las reiteradas denuncias públicas (particularmente a partir de noviembre de 2014), alcanza directamente a varios de los integrantes del gabinete federal e incluso al mismo presidente de la República y su familia.

Si, como señaló en su discurso de toma de protesta Ochoa Reza, el PRI tiene “que ser un partido que señale la corrupción de los gobiernos emanados de nuestras filas, que exija su fiscalización, incluso su destitución”, no debe voltear únicamente hacia los gobernadores y los alcaldes; primero debe observar muy de cerca al gobierno federal, pues es allí donde más presupuesto se maneja y más contratos se asignan.

Y aunque la corrupción y la impunidad son el elemento más adverso, no son el único factor que explica el hartazgo de la ciudadanía con los partidos políticos y el voto de castigo de los electores mexicanos; hay muchos otros factores que influyen y, entre ellos se encuentran de manera relevante: la incapacidad de los gobernantes para resolver los problemas más acuciantes (inseguridad, pobreza, desigualdad y violación de derechos humanos, entre los más destacados) y la intromisión de los titulares del Ejecutivo en la vida de sus institutos políticos.

No es ninguna casualidad que los votantes nacionales hayan castigado al PAN durante el gobierno de Calderón, cuyo gobierno muestra pésimos indicadores en los rubros señalados en el párrafo anterior; su intervención en los asuntos de Acción Nacional provocó conflictos internos, fracturas y renovación precipitada de dirigentes, pues durante su sexenio tuvo cuatro presidentes (Manuel Espino, a quien obligó a renunciar anticipadamente; Germán Martínez, quien renunció anticipadamente tras la derrota electoral de 2009; César Nava; y Gustavo Madero, con quien acabó enfrentado).

El escenario se repite con Peña Nieto, quien empezó a utilizar su poder en el PRI, desde marzo de 2011, cuando ungió a Humberto Moreira, para que le asegurara su postulación y a quien tuvo que separar tras el escándalo de las finanzas de Coahuila; posteriormente nombró a Pedro Joaquín Coldwell, para conciliar la designación de candidatos a diputados, senadores y gobernadores, en las elecciones concurrentes; César Camacho, que aunque vendió muy bien los resultados de la elección intermedia de 2015, en realidad no salió muy bien librado; Manlio Fabio Beltrones, que tuvo que renunciar tras la histórica derrota electoral del tricolor; y ahora Enrique Ochoa Reza. Van cinco dirigentes en cinco años y medio.

Si a eso se le suman los escándalos de corrupción y los malos indicadores de su gobierno (por más que Ochoa Reza, haya logrado arreglar algunas estadísticas para argumentar logros) es más que explicable que todas las encuestas muestren que menos de la tercera parte de la población mexicana aprueba su gestión.

El pacto de sobrevivencia con Beltrones (Proceso 2023) fracasó para ambos, pues resultó funesto para el futuro político y, particularmente, las aspiraciones presidenciales del exdirigente tricolor y dejó en condiciones deplorables al PRI para enfrentar las elecciones de gobernador en el Estado de México, en 2017, y desde luego la presidencial de 2018.


En estas circunstancias Peña Nieto cambió radicalmente el perfil del dirigente tricolor: seleccionó a alguien de su círculo íntimo, desconocido para la inmensa mayoría de los militantes priistas, sin haber siquiera aspirado a un puesto de elección popular y sin experiencia en la operación política. Paradójicamente, ante la debacle, se aferra a quienes piensan como él y son corresponsables de los malos resultados de su gobierno y su partido.

FUENTE: PROCESO.
AUTOR: JESÚS CANTÚ.
LINK: http://www.proceso.com.mx/448097/calderon-salvo-al-pri-pena-lo-hunde

miércoles, 20 de julio de 2016

Iberdrola incorpora a Felipe Calderón a su filial Avangrid

Ciudad de México. La empresa española de energía Iberdrola, incorporó al ex presidente mexicano Felipe Calderon a su filial estadunidense Avangrid.

Iberdrola tiene en México importantes inversiones con la Comisión Federal de Electricidad, y tiene trabajo en el desarrollo de energías limpias.

A tres años de haber dejado la Presidencia de México, Calderón será comisionado de Avangrid que es una de las mayores empresas de generación de electricidad en Estados Unidos, resultado de la integración de Iberdrola USA y UIL Holdings Corporation.

Antes de que Calderón se integrara al equipo de trabajo de Iberdrola por medio de Avangrid, lo hizo su ex secretaria de Energía, Georgina Kessel quien aparece como vocal en el Consejo de Administración de Iberdrola España.


Felipe Calderón es presidente de la Comisión Global de sobre la Economía y el Clima, y la Fundación Desarrollo Humano Sustentable.

FUENTE: LA JORNADA.
AUTOR: MIRIAM POSADA.
LINK: http://www.jornada.unam.mx/ultimas/2016/07/20/iberdrola-incorpora-a-felipe-calderon-a-su-filial-avangrid

lunes, 18 de julio de 2016

Felipe Calderón reservó el informe sobre News Divine entregado por Joel Ortega

La tarde del 20 de junio de 2008, en la discoteca News Divine de la delegación Gustavo A. Madero (GAM) fallecieron nueve adolescentes y tres policías durante un operativo que devino en estampida. Joel Ortega Cuevas, a la sazón Secretario de Seguridad Pública, fue responsable de esa acción policiaca. Siete días después de los funestos hechos, le entregó al entonces Presidente de la República, Felipe Calderón Hinojosa, un informe que hoy, pese al tiempo de la tragedia, no puede ser conocido por los ciudadanos. El ex Primer Mandatario lo clasificó de manera indefinida en tanto se realizaran las investigaciones. Hasta ahora, sólo uno de los protagonistas tuvo la cárcel como destino.

El pasado 20 de junio, Nochixtlán amaneció con ocho muertos, 55 policías heridos, 53 civiles lesionados y 21 detenidos después de que elementos de la Policía Federal desbarataron el bloqueo que maestros disidentes de la Reforma Educativa realizaban en la carretera del municipio, en la región mixteca.

Con la tragedia, esa fecha se convirtió en maldita. Hace ocho años –la tarde del 20 de junio de 2008- en la discoteca News Divine de la delegación Gustavo A. Madero (GAM) de la Ciudad de México, fallecieron nueve adolescentes y tres policías durante un operativo que devino en estampida.  Y esa vez, las risas, los brindis y el baile cambiaron por zozobra, asfixia y muerte. También por parálisis cerebral, como le ocurrió a Jenniffer Jiménez, una distinguida estudiante de 14 años que perdió el habla y la movilidad en esas horas de espanto. 350 jóvenes habían abarrotado la disco, en el oriente de la ciudad de México.

Elementos de la extinta Unipol (Sistema de Coordinación Policial del Distrito Federal) ingresaron al establecimiento. Un camión de la RTP permanecía estacionado a la entrada. Desde el micrófono, se escuchaba la voz de Alfredo Maya, dueño del antro. Pedía desalojar con la promesa de entradas gratis para el siguiente sábado. Pero la policía, bajo el mando de Guillermo Zayas González y la autorización de Joel Ortega Cuevas, había bloqueado la salida.

Los protagonistas de esa historia fueron Marcelo Ebrard Casaubón (cumplía dos años como Jefe de Gobierno del Distrito Federal); Joel Ortega Cuevas (era Secretario de Seguridad y dirigió el operativo), Rodolfo Félix Cárdenas (era procurador General de Justicia del DF), Francisco Chíguil Figueroa (era Delegado de la Gustavo A. Madero) y Guillermo Zayas González ( Sistema de Coordinación Policial del Distrito Federal, Unipol).

Esta infamia se cuenta, cada vez más, en voz baja. Ya pocos de los personajes vinculados hablan de News Divine. Cada año, menos. Algunos de los involucrados continúan en la escena pública, otros no; pero sólo para Alfredo Maya, el fundador de la disco, la cárcel fue destino.

En enero de este año, la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) absolvió a cuatro ex elementos de la SSPDF, entre ellos, a la ex jefe de sector La Raza. En junio, el caso dio un giro. Pero al final, nada ocurrió. El Juzgado Sexto de Distrito de Amparo en Materia Penal ordenó al Juzgado 19 penal reanudar el proceso instruido en contra de Zayas González. La determinación se debió al desistimiento del amparo promovido por el ex funcionario (luego de News Divine fue titular de la Policía Municipal de Ciudad del Carmen, Campeche, cargo que también dejó) en contra del artículo 16 del Código Penal para la Ciudad de México.

La escena no cambió. El único que sigue preso es Alfredo Maya quien ha rehuido de los reporteros y ha dejado claro que no desea brindar su relato de los hechos. Han pasado ocho años de aquel caos. Y la cortina de humo cae, otra vez, sobre la tragedia.

EL INFORME DE JOEL ORTEGA: RESERVADO

La noche del mismo 20 de junio, Joel Ortega ofreció una conferencia de prensa en la que justificó el operativo. Según él, había varias denuncias vecinales sobre venta de alcohol a adolescentes. Las fallas –dijo- se debieron al dueño de la discoteca quien habría provocado la estampida al quejarse por micrófono de la presencia policiaca. Lo acompañaba Francisco Chíguil, el entonces delegado de la GAM. Pese a que sus palabras responsabilizaron sólo al dueño de la discoteca renunció después de que la CDHDF presentó un informe sobre los hechos: la policía había sido la responsable por bloquear las salidas del bar. Su carrera se desmoronó en ese momento. Había sido líder estudiantil en el Instituto Politécnico Nacional, colaborador de Manuel Camacho Solís cuando este fue Regente, así como de Cuauhtémoc Cárdenas en el primer gobierno capitalino electo, delegado de la Gustavo A. Madero, jefe de la policía con Andrés Manuel López Obrador y ratificado por Marcelo Ebrard en el mismo cargo.

Según el acta de XIII sesión extraordinaria del comité de información de la Presidencia de la República, archivada en el Portal de Obligaciones y Transparencia, Joel Ortega le entregó al entonces Presidente de la República, Felipe Calderón Hinojosa, un informe sobre los hechos de News Divine, el 27 de junio de 2008.

Hasta ahora, el documento se encuentra en la Oficina de la Presidencia, pero está clasificado de manera indefinida. Ese mismo año, Calderón Hinojosa lo guardó apegado a los lineamientos generales para la clasificación y desclasificación de la información de las dependencias y entidades de la Administración Pública de Ley Federal de Transparencia. Estos preceptos implican no revelar datos cuando los procesos judiciales y averiguaciones previas estén en curso por parte de las autoridades del Distrito Federal porque su difusión podría causar “un serio perjuicio” a las actividades que ejerce el Ministerio Público.


Después de News Divine, Ortega Cuevas estuvo fuera de la administración pública y en 2010 creó la organización civil Ciudadanía y Democracia con el fin de participar en las elecciones internas del Partido Revolucionario Democrático para candidato a jefe de Gobierno. En enero de 2011 anunció su precandidatura. Él mismo reconoció en entrevistas: “Me estoy reinventando, no lo niego, hice un diseño de cómo regresar, por abajo”. Tras señalar “inequidad” en el proceso, en febrero de2011, se incorporó a la campaña de Miguel Ángel Mancera como coordinador de campaña. Mancera lo nombró Director General del Sistema de Transporte Colectivo Metro. Bajo su dirección, el boleto se incrementó de tres a cinco pesos, lo que ocasionó el movimiento #PosmeSalto. El cargo lo dejó en 2015.

News Divine nació en la esquina de Molina y la 312. En el espacio, el sonidero Alfredo Maya intentó evocar  la música que en los ochenta recorría la ciudad de México y al mismo tiempo, dar cabida al Regueaton. Pero el 20 de junio, la vida cambió. Un día después de los funestos hechos, el entonces Jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard, apareció en la sala de prensa del edificio contiguo al Palacio del Ayuntamiento en la GAM. Llevaba un discurso escrito y el rostro desencajado. “La ciudad está de luto. Los acontecimientos acaecidos este viernes nos llenan de consternación, dolor e indignación”, dijo.


Asumió como compromiso personal llegar al esclarecimiento de los hechos. Aunque aún reinaba el desasosiego, sus palabras fueron firmes: “Vamos a buscar el castigo de los responsables de la tragedia. En primer lugar de aquellos servidores públicos que ejecutaron el operativo porque, a la luz de la información que tengo disponible desde ayer por la noche y hoy en la mañana, hubo errores graves”.

FUENTE: SIN EMBARGO.
AUTOR: LINALOE R. FLORES.
LINK: http://www.sinembargo.mx/18-07-2016/3067398

lunes, 4 de julio de 2016

Peña-Calderón: Mediocridad y corrupción los unen

CIUDAD DE MÉXICO: En medio de una crisis política semejante a la del fin del sexenio de Vicente Fox, incluidas la rebelión magisterial y las acciones represivas, este sábado 2 de julio se cumplió una década de la fraudulenta elección de 2006 y del amasiato que iniciaron Enrique Peña Nieto y Felipe Calderón, un pacto de complicidades e impunidad que está vigente hacia el 2018.

Llama la atención que sobre la efeméride se unieron en el silencio Calderón y Andrés Manuel López Obrador, rivales desde entonces, pero lo relevante es que a diez años de esa elección, en la que Peña le transfirió al menos 200 mil votos al panista –un favor que éste le pagó seis años después–, se ha consolidado ese amasiato del que forman parte también Margarita Zavala y su primo político Luis Videgaray.

Más allá de si se materializa en el Partido Acción Nacional (PAN) la candidatura presidencial de Zavala, enfurecida porque ya fue rebasada por Ricardo Anaya –colocado como puntero hasta en la encuesta de GEA-ISA, de los amigos y contratistas de Calderón–, y aun si se concreta el apoyo a su favor de Peña y Videgaray, es preciso examinar qué resultados ha tenido, para los mexicanos, el amasiato de estos personajes en una década.

Aunque el cogobierno PRI-PAN inició con Carlos Salinas, en 1988, fue en el sexenio de Calderón y en los casi cuatro años del de Peña –una década– cuando se materializaron las reformas energética, laboral, educativa, fiscal y de telecomunicaciones que supuestamente llevarían a los mexicanos al paraíso.

Lo que hoy vemos en el país es, en buena medida, obra de Calderón y Peña.

Calderón encabezó una administración mediocre en economía, seguridad y combate a la pobreza, los tres principales ejes de su oferta de campaña –“Para que vivamos mejor”–, pero Peña, quien se presentó como un gobernante eficaz –“Peña sí cumple”–, ha sido igual de inepto que el panista.

En economía, según las cifras oficiales, la tasa de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) en el sexenio de Calderón fue de 1.91% anual, la más baja en un cuarto de siglo, peor que el gobierno de Fox (2.43%), Ernesto Zedillo (2.94%) y Carlos Salinas (3.17%).

En los tres primeros años del sexenio de Peña, el crecimiento del PIB fue de 5.7%, un promedio de 1.9% anual, exactamente la misma cifra que en el sexenio de Calderón. Es una mediocridad idéntica.

En cuanto a la violencia y la inseguridad, Calderón apostó a una estrategia de militarización de la seguridad pública y, sin un diagnóstico, ensangrentó el país: Las cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) establecen que, en su sexenio, acumuló 121 mil 683 muertes violentas, un crecimiento de más del doble con respecto al de Fox.

Con Peña, aunque bajó la fascinación por ufanarse de la sangre, las cosas no cambiaron sustancialmente. Las propias cifras oficiales indican que, en los tres primeros años del sexenio, se acumularon poco más de 50 mil homicidios dolosos.

En 2016 se reactivó la tendencia a la alza de los homicidios violentos, a tal punto que este año podrían acumularse más de 20 mil, como en 2012, y hacia el final del sexenio podría alcanzarse la cifra de Calderón. Otra vez, como en la economía, Peña y Calderón son iguales.

Hay un tercer aspecto en el que Peña y Calderón son también un fiasco: El combate a la pobreza o, si se quiere, eficaces en la fabricación de pobres.

Calderón incrementó la pobreza en casi diez millones de personas, según cifras del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) y como lo reconoció la propia Josefina Vázquez Mota, excandidata presidencial del PAN.

Con Peña, las cosas han sido semejantes: En los dos primeros años de su gobierno, según el propio Coneval, cayeron en situación de pobreza dos millones de personas y, ante la crisis en curso, lo que se prevé es que el número crezca.

¿Cuáles son, entonces, los saldos de los gobiernos de Calderón y Peña, en connivencia durante una década? Lo que aquí se ha descrito con cifra oficiales y pese a contar con todos los instrumentos para diseñar e instrumentar políticas públicas –incluida la mayoría en el Congreso–: La mediocridad que resultad de la ineptitud.

No sólo eso: Peña y Calderón están unidos, también, por la corrupción. ¿O alguien ha escuchado a Calderón –y a su mujer– reprobar al menos verbalmente la Casa Blanca de Las Lomas de Peña o la de Videgaray en Malinalco, o Peña ha procedido contra las raterías de Calderón y sus cómplices, como en el presupuesto del Bicentenario de la Independencia?


Son diez años de la elección de 2006, una década de complicidades Peña y Calderón, de Margarita Zavala y de su primo Videgaray, como se documenta ampliamente en “El Amasiato. El pacto secreto Peña-Calderón y otras traiciones panistas”…

FUENTE: PROCESO.
AUTOR: ALVARO DELGADO.
LINK: http://www.proceso.com.mx/446164/pena-calderon-mediocridad-corrupcion-los-unen

lunes, 27 de junio de 2016

Diez años de guerra: Calderón ofrece más empleo… pero hereda informalidad, violencia y dolor

Como lo ofreció en campaña, Felipe Calderón Hinojosa, quien gobernó México de 2006 a 2012, sí logró ser el Presidente del Empleo. Pero del informal, precario y de bajo ingreso. En 2012, cuando le entregó la banda presidencial a Enrique Peña Nieto, la informalidad se había convertido en la fuente principal de ocupación. La Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo mostró ese año que casi 14 millones de mexicanos obtenían su ingreso del ambulantaje o trabajos eventuales, 649 mil más que los 13.32 millones de connacionales que tenían trabajo formal. Pero además estaba la Guerra. Esa Guerra que no consigue concluir y cuyos cálculos alcanzan a veces los cien mil muertos, 30 mil desaparecidos y cientos de desplazados. Tocado o no por el destino, con razones de peso o sin ellas, el ex Mandatario está detrás de este presente.

Ciudad de México, 27 de junio (SinEmbargo).– Fue el Presidente del empleo; pero del informal y precario. Además, fue el autor de una guerra. Los números –que ahora pueden recolectarse y compararse- arrojan la estampa: en 2006, cuando Felipe Calderón Hinojosa tomó posesión había una Población Económicamente Activa (PEA) de 44.4 millones y México era un país con un millón 600 mil 891 desempleados. Cuando concluyó su Gobierno en 2012, la PEA alcanzó apenas los 50.9 millones y dos millones 468 mil 62 mexicanos padecían las amarguras del desempleo.

Pero además, en ese fin de sexenio, la informalidad se convirtió en la fuente principal de ocupación en México. La Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) mostró ese año que casi 14 millones de mexicanos obtenían su ingreso del ambulantaje o trabajos eventuales, 649 mil más que los 13.32 millones de connacionales que tenían trabajo formal.

No se trata de un pasado que pueda sepultarse. En el presente, hay dos millones más de pobres que en 2012, según los datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval). José Luis de la Cruz, director del Instituto para el Desarrollo Industrial, encuentra un vínculo directo con el viraje que dio México de la formalidad hacia la informalidad con ese número creciente de pobres.

“La mayor parte de los mexicanos obtiene su ingreso por su empleo. De su actividad. Hoy, los pequeños negocios son el mecanismo del bienestar. Así que empleos informales y precarios de bajos salarios condiciona un círculo de pobreza”, dice.

También los muertos se amontonaron. A la hora de la asunción del poder de Calderón Hinojosa, la tasa nacional de homicidios había bajado a ocho por cada 100 mil habitantes, de 19 para la misma proporción en 1992, según el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi). Cuatro años después –en 2011- ocurrieron 27 mil decesos. El año anterior habían sucedido 25 mil. De repente, los números se revolvieron y desde el Gobierno dejaron de publicarse los conteos. Y entonces, lo que importó fue la forma, la forma de la muerte. Los cuerpos de hombres, mujeres y niños aparecieron en casas, carreteras o centros comerciales. A veces estaban colgados, decapitados, desnudos, desmembrados o amoratados.

Un abultado expediente documentó ante la Corte Penal Internacional de La Haya, el máximo tribunal de la Organización de las Naciones Unidas, 50 mil muertos y 10 mil desaparecidos, así como la brutal forma en que habían encontrado la hora última.

Felipe Calderón Hinojosa llegó al poder sin el voto de la mitad del electorado. “Espurio” lo llamó desde ese momento, Andrés Manuel López Obrador, quien con el abanderamiento del Partido de la Revolución Democrática (PRD), fue su más cercano contendiente en los comicios presidenciales de 2006. Así, al filo de la desconfianza, con el desconcierto sobre sus espaldas, el Mandatario debió elegir su impronta.

En esa hora de decisiones, lejos, muy lejos, quedaron sus palabras de candidato, cuando grabó un anuncio especial en el que usaba el tema del empleo como un último y directo ataque en contra de Andrés Manuel López Obrador. Decía: “Amigas y amigos, les he propuesto cómo generar empleos para que vivamos mejor. Cómo atraer la inversión para que haya trabajo bien pagado para todos, para los jóvenes, las mujeres, los adultos mayores. Empleos en el campo, en más industrias, en el comercio, en más viviendas y en el turismo, que será mi prioridad. El PRD propone endeudar a México como ya lo hizo en el Distrito Federal y como lo hicieron gobiernos que nos llevaron a las peores crisis económicas. Hoy, tú vas a decidir entre el empleo y la estabilidad que yo te garantizo o la deuda y la crisis que propone el PRD. Soy padre de tres hijos y lucho por construir para ellos y para los tuyos un México mejor, un México justo, un México ganador, seguro y limpio donde puedan vivir en paz y ser felices. Este 2 de julio, a la hora de votar, piensa en tus hijos”.

Y así fue. Se convirtió en el Presidente del empleo. Pero del informal. Y también en el de la guerra.

Que la legitimidad le importaba a Felipe Calderón Hinojosa está claro en el gasto de 141.6 millones de pesos que hizo en encuestas en sus primeros dos años de Gobierno. Según los archivos del Instituto Nacional de Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), el 1 de diciembre de 2006 mandó preguntar a la población: “Para usted, ¿quién es ahora el Presidente legítimo de México? Las respuestas le susurraron: “Calderón con 93.1 por ciento y Andrés Manuel López Obrador con 4.8 por ciento”.

Pero, en los hechos, no había elementos suficientes para irse por el camino bélico. Cierto que en 2006, Michoacán –la tierra del flamante Mandatario– era la escena de una disputa. El cártel de Los Valencia, asociado con Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, se enfrentaba al del Golfo y una organización delincuencial apenas efervescente: La Familia Michoacana. Cuando tomó posesión, Calderón recibió un informe: Jetzabel Abarca Parra, de 27 años, había sido asesinada a balazos en el municipio de Coalcomán, y dos personas más habían sido ejecutadas a balazos en los municipios de Aguililla y Cotija.

Crueldad, misterio y muerte en Michoacán. Todo era cierto.

Pero si se revisan las cifras del Inegi, retomadas por Fernando Escalante Gonzalbo en su artículo “Homicidios 2008-2009. La muerte tiene permiso” en la revista Nexos, la tasa nacional de homicidios había bajado ese año a ocho por cada 100 mil habitantes, de 19 homicidios en 1992. En realidad, no había un despunte de inseguridad a nivel nacional.

2009-2010: LA ÉPOCA DE LAS PÉRDIDAS

Habían transcurrido tres años de Gobierno y el mundo había colapsado por una crisis financiera. La fatídica historia se había iniciado el 15 de septiembre de 2008, cuando el banco de inversión Lehman Brothers se declaró en bancarrota. A partir de ese momento, la burbuja inmobiliaria en Estados Unidos se deshizo y luego –por una u otra razón– siguió el resto de economías desarrolladas.

La Secretaría de Hacienda declaró recesión económica con una prospectiva de crecimiento económico negativo diferente al planteado al principio del Gobierno de un incremento del Producto Interno Bruto (PIB) de tres por ciento. A partir de ese momento, las proyecciones gubernamentales sufrieron repetidas correcciones que llegaron a plantear una contracción de 4.1 por ciento, la más grande desde la crisis de 1995.

Pese a ello, en medio de la crisis se acumularon frases que por su optimismo resultaron simbólicas. El entonces Secretario de Hacienda, Agustín Carstens, indicó el 2 de febrero de ese año que a México no le daría una pulmonía como en el pasado, si acaso, apenas un catarrito.

El entonces Jefe del Ejecutivo, Felipe Calderón y las autoridades económicas anunciaron un programa de medidas para enfrentar la situación. Entre ellas destacó la ampliación del gasto de infraestructura, el cambio de reglas del ejercicio de ese gasto, la construcción de una nueva refinería para Petróleos Mexicanos (Pemex), el impulso de manera extraordinaria a las pequeñas y medianas empresas, y la desregulación y la desgravación arancelaria. El empleo no repuntó. Por el contrario: la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo encontró que 2.5 millones de mexicanos habían perdido su empleo con una tasa que se ubicó en 4.5 porcentuales.

En cambio, ese año, hubo algo espectacular.

Arturo Beltrán Leyva, “El Barbas” estaba en una fiesta con el Rey del Acordeón, Ramón Ayala, y con Los Cadetes de Linares, en Morelos. Ahí llegaron los elementos de la Secretaría de la Marina. Intentaron capturarlo, pero se les fue. Con los días, lo persiguieron, a él y a sus huestes. En Cuernavaca, dieron con él, y lo mataron frente a cámaras de televisión. Cayó en una recámara llena de muñecas, como princesas. El Gobierno presumió la hazaña y demostró que más que nunca, estaba concentrado en la política en contra del crimen organizado.

A decir de José Luis de la Cruz, director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico, en esta parte del sexenio se perdió la oportunidad para generar empleo.


“Se subestimó el efecto de la crisis de Estados Unidos. En el discurso se habló del famoso catarrito y que estábamos blindados. Fue el primer evento económico que acabó marcando el sexenio. Nos fuimos a recesión en 2009 y no hubo plan b en materia económica ni de empleo. Los programas que se empezaron a proyectar en los primeros años de Gobierno de primer empleo para los jóvenes naufragaron”, explica.

Los desempleados surgieron por aquí y por allá. En octubre, decenas de soldados disfrazados de policías federales tomaron las instalaciones de Luz y Fuerza del Centro (LyFC). Mediante un decreto, el Presidente había requisado la paraestatal con el argumento de que era “un lastre”. Más de 44 mil trabajadores agremiados en el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) perdieron su puesto laboral y se lanzaron a las calles a protestar.

14 ex trabajadores de Luz y Fuerza del Centro iniciaron una huelga de hambre en la plancha del Zócalo de la Ciudad de México el 25 de abril de 2010. Pasaron tres meses y una noche, el dirigente sindical Martín Esparza alcanzó un acuerdo con el Gobierno federal en una reunión que se prolongó ocho horas. Con los años, vinieron reclamos prolongados y suspendidos.

En febrero de este año, Esparza anunció que el SME consiguió, en asociación con la empresa portuguesa Mota-Engil y con el apoyo del Gobierno, un nuevo contrato colectivo para operar 14 plantas eléctricas, cuatro central de ciclo combinado y la recuperación de una parte de la materia de trabajo en la operación de un paquete de mil 700 megawatts.

Así pasó 2010.

Y otro evento puso en los brazos del fantasma del desempleo a miles de trabajadores. El vuelo 886 de Mexicana de Aviación que partió del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) a las 14:15 horas con destino a Toronto el 28 de agosto de 2010, fue el último en la operación de la aerolínea que cayó en concurso mercantil.

Después de 43 meses, la titular del Juzgado Décimo Primero de Distrito en Materia Civil en el Distrito Federal, Edith Alarcón, eliminó la posibilidad de que la aerolínea y sus filiales volvieran a volar.

Ocho mil 500 trabajadores desde trabajadores de mantenimiento, administrativos, sobrecargos y pilotos aviadores Cada uno protestó a su manera. Algunos llenaron algunos espacios del Aeropuerto con casas de campaña y pancartas. Un grupo de sobrecargos hizo un calendario. Los más, probaron por completo la amargura del desempleo.

En sentido contrario a la que alguna vez fue su pretensión principal, de ser Presidente del Empleo, en 2009, la Federación Internacional de Trabajadores de la Industria Minera (FITIM) interpuso ante la Organización Internacional del Trabajo, una queja contra la política laboral de México por privilegiar y avalar los contratos de protección en beneficio de los empresarios, y por la existencia de sindicatos blancos.

Luego, el 8 de abril de 2010, el Centro de Reflexión y Acción Laboral (Cereal), la Unión Nacional de Técnicos y Profesionistas de Pemex y el SE), entre otros gremios, acudieron al Tribunal Internacional de Libertad Sindical. Ahí, acusaron violación sistemática de los derechos laborales en México.

LA REFORMA LABORAL

Javier Lozano Alarcón, hoy Senador del PAN, fue el artífice de la polémica Reforma Laboral en el sexenio calderonista. Foto: Cuartoscuro.

Acorde con el perfil que promovió en campaña, como opción para encontrar la legitimidad, Felipe Calderón también tenía en la baraja a la reforma laboral y energética. El politólogo de la Universidad de Guadalajara (UdeG), Enrique Toussaint, reconstruye que asesores como Germán Martínez Cázares y César Nava se empeñaron en aconsejar una estrategia armada en lugar de las enmiendas constitucionales.

De hecho, Calderón –quien se había anunciado como el Presidente del Empleo– esperó al tramo final de su Gobierno para enviar la iniciativa de la reforma laboral. El sábado 1 de septiembre de 2012, el expresidente mandó el documento con carácter de “preferente” para que a más tardar el 1 de octubre de ese año fuera votada en el pleno. Las enmiendas propuestas por Felipe Calderón se abrían a la “flexibilización del mercado laboral”, en dos vertientes: nuevas modalidades de contratación y la facilitación de la conclusión de la relación laboral.

El otro tema era los sindicatos. La iniciativa atacaba la anquilosada estructura del PRI. Proponía que las directivas gremiales fueran electas mediante el voto libre, directo y secreto, y no a mano alzada. Para Alfonso Bouzas, del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), ni la Reforma Laboral ni la Ley General de Transparencia y Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (promulgada por el Presidente Enrique Peña Nieto en mayo de 2015) lograron superar el escollo de falta de rendición de cuentas de los gremios mexicanos.

El impulso de la reforma laboral estuvo a cargo de Javier Lozano Alarcón Alarcón, el hombre-alfil de Felipe Calderón. De 2006 a 2012, la voz del entonces Secretario del Trabajo jamás varió en la defensa de la modificación de Ley Federal del Trabajo. Que era necesaria para incrementar la productividad. Que quienes se le oponían eran “cobardes, brutales, egoístas y miopes”. Era una campaña personal, diaria, por todos los medios: prensa, redes sociales, foros. Una obsesión al grado que esa ley hoy es conocida como Ley Lozano y no Ley Calderón.

A cuatro años de aquel impulso legal, Alfonso Bouzas, especialista en política laboral, hace una evaluación: “La deficiencia más importante de la Reforma Laboral es que no cambió nada. Ni para bien ni para mal. Lo único que cambió es la facilidad de correr a los trabajadores. Y lo más grave también es que dio paso a que se legalizara la tercerización que ya se practicaba desde la firma del Tratado de Libre Comercio, sin ser legal”.

Javier Lozano Alarcón, en su calidad de Secretario del Trabajo, asistió en 2011 a un encuentro con el Consejo Estatal para el Diálogo con los Sectores Productivos (Cedsip) de Aguascalientes y dijo lo siguiente: “Mienten cobardemente quienes dicen que estamos esclavizando el trabajo, que estamos yendo contra los derechos de los trabajadores. Eso es parte del procedimiento de una minoría que se autodenomina representante del movimiento obrero, de los derechos de los trabajadores y de los derechos humanos, cuando lo único que buscan son posiciones”. Luego, a quienes se oponían, no dejó de llamarlos “cobardes, brutales, egoístas y miopes”.

Según él, las bondades de la reforma se desgranaban y la principal era el aumento de productividad. Apenas se aprobó, exclamó que se había dado un paso adelante.

En sentido contrario al discurso triunfal, llegó la crítica. En su XVI Informe de Violaciones a los Derechos Laborales 2012, el Cereal definió en México la actitud de Calderón y de su secretario del Trabajo, Javier Lozano Alarcón, como una “violencia laboral de Estado”.

LA GUERRA DE CALDERÓN 

La guerra contra el narcotráfico, emprendida por el entonces Presidente Felipe Calderón es calificada por especialistas como un “total fracaso”. Foto: Cuartoscuro

Tocado o no por el destino, con razones de peso o sin ellas, detrás de la guerra en contra del crimen organizado hubo un hombre: Felipe de Jesús Calderón Hinojosa. Los porqués para lanzar la ofensiva más cruenta de la historia moderna se hallan en su circunstancia política, pero también en su biografía y personalidad. ¿Por qué la guerra? ¿Por qué no el empleo? Alfonso Bouzas de la UNAM, responde: Porque jamás se lo propuso, porque en las condiciones económicas que se condujo al país evidentemente no podía ser el Presidente del empleo”.

A sólo 10 días de haber asumido la primera magistratura, Felipe Calderón envió al Ejército a Michoacán, Sinaloa y Veracruz. En palabras del entonces Procurador General de la República, Eduardo Medina Mora, el objetivo era abatir el poder del crimen organizado; sobre todo, del narcotráfico. Ese mismo día, el Secretario de Seguridad Pública Federal (SSP), Genaro García Luna, anunció un cambio en el perfil de los policías federales.

Conforme a la estrategia, se debilitaría el flujo de dinero, la red operativa y la distribución. Así que se atacaría al tráfico de armas, se abatiría al circulante y se tomarían las carreteras. Se empezaría por el negocio principal: la cocaína. La consideración: aunque su ciclo de retorno era más largo, su valor subía casi 56 veces en su recorrido de Colombia a las calles de Estados Unidos, principal mercado.

No ocurrió eso. No, hasta el momento. Los expertos en Seguridad de la Universidad Iberoamericana (UIA), Pablo Monzalvo y Eruviel Tirado, ya no observan una batalla; sino tres: familias del narco por territorios y mercados de distribución de la cocaína, la Policía Federal en contra del narcotráfico y el Ejército tras criminales. En las tres, se cometen errores que implican confusión sobre quién es el enemigo.

En seis años de Gobierno de Felipe Calderón, el presupuesto para Seguridad se incrementó en 76 mil 711 millones 874 mil 763 pesos, según el Presupuesto de Egresos de la Federación. Hay casi dos millones de mexicanos sumados a la pobreza según la medición del Coneval por ingreso. Millones salen a trabajar a empleos informales o precarios, de esos que no tienen ninguna condición social.





Fuente: Sin Embargo
Autora: Linaloe R. Flores
http://www.sinembargo.mx/27-06-2016/3058718