El Operativo Frozen, que el 21 de octubre acordaron los gobiernos de Andrés Manuel López Obrador y de Donald Trump para congelar el flujo de armas de Estados Unidos a México, parece condenado al fracaso. En los últimos años, los compromisos bilaterales de ese tipo no han tenido éxito y es factible que en esta ocasión suceda lo mismo, pues hay poca disposición en el Capitolio para legislar al respecto; además, el presidente estadunidense, quien siempre se ha opuesto a ese tipo de controles, está en campaña.
Los acuerdos entre los gobiernos de México y Estados Unidos para “congelar” el tráfico ilegal de armas fracasan porque en el Capitolio no hay voluntad ni intención de aprobar una ley que los apoye, según muestra la historia de compromisos de este tipo.
En otro intento por contener el flujo ilícito de armas de Estados Unidos a México, que empodera a los cárteles del narcotráfico, los gobiernos de Donald Trump y de Andrés Manuel López Obrador anunciaron el 21 de octubre el Operativo Frozen.