Hace tres años el cártel más peligroso de los últimos tiempos, Los Zetas, tenía un campo de tiro “secreto” en San Buenaventura, en el corazón mismo del estado de Coahuila. Aunque el estruendo de las balaceras era escuchado por los vecinos, la policía no actuaba. Hasta que una tarde, los marinos reventaron el cuartel del grupo criminal. “La escuela”, como le llaman los vecinos, es un predio con bardas de block agujereadas, acribilladas con fusiles de asalto. “Los policías estaban con los malos. Aparte de recibir su sueldo, ellos les daban un salario”, dijo una habitante de San Buena que prefirió no revelar su identidad.
A las afueras de San Buenaventura, Coahuila, hay un predio solitario con bardas de block, rafagueadas todas con ametralladora, al que la gente de acá ha bautizado con el nombre de “La escuela”.
Algunos dicen que porque todavía hace unos tres años, este sitio era usado por Los Zetas, el cártel más peligroso y sanguinario de los últimos tiempos, para practicar el tiro al blanco.