El fin de semana pasado, Isidro Cortés Jiménez, jefe de la policía de Texcaltitlán, Estado de México, se quitó la vida al ser detenido en la Operación Enjambre, que hasta el momento ha dejado 24 funcionarios aprehendidos relacionados con homicidios, secuestro y extorsión.
Isidro Cortés Jiménez ganaba 9 mil 200 pesos al mes, como jefe de la Policía municipal de Texcaltitlán, Estado de México, y los agentes que coordinaba ganan 5 mil 300 pesos al mes, cada uno, de acuerdo con documentos obtenidos vía transparencia. El pasado 22 de noviembre el jefe de la policía se quitó la vida durante su detención por el delito de secuestro en la llamada Operación Enjambre.
Su caso muestra la crisis por la que atraviesan las policías municipales en todo el país, por los malos sueldos, la inexistencia de prestaciones y sus nulas capacidades frente a amenazas como el crimen organizado, con el que lidian cotidianamente.