Para el presidente López Obrador y el subsecretario López-Gatell, las Normas Oficiales Mexicanas (NOM) que proponen cancelar “no se requieren para regular la prescripción, terapéutica y diagnóstico” de las enfermedades en el país. Pero colegios de médicos, trabajadores de la salud, organizaciones sociales y legisladores advierten que el verdadero propósito gubernamental es evitarse gastos y responsabilidades, en detrimento de los servicios médicos, y ya están recurriendo a la Organización Mundial de la Salud y a la Organización Panamericana de la Salud para impedir esa medida.
Para profundizar aún más el “desastre” en el que ya tiene hundido al sistema de salud, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador intenta ahora cancelar 32 Normas Oficiales Mexicanas (NOM) que reglamentan la atención médica de las principales enfermedades del país, como diabetes, hipertensión arterial, cáncer de mama, cáncer de próstata y obesidad, entre otras.
Esta demoledora medida –anunciada el jueves 1 en el Diario Oficial de la Federación (DOF)– les traerá “mayor pobreza, enfermedad y muerte” a los millones de mexicanos que padecen esos males, pues el gobierno se quitará la obligación de atenderlos como estipulan las normas que intenta suprimir.