La administración federal renunció a dar estímulos fiscales grandes a empresas lo que marcó el panorama para la economía mexicana: un menor crecimiento, pero también evitar un déficit fiscal mayor. Los analistas de Bloomberg destacaron la posibilidad de que la fortaleza del bono no sea duradera debido a que la falta de crecimiento enfile un posible recorte de la calificación crediticia del país.
En medio de la peor crisis económica mundial en un siglo y de la recesión mexicana el Gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador optó por la austeridad. La decisión, que dejó sin grandes rescates financieros al sector privado, le está dando frutos a México en el mercado de bonos, de acuerdo con especialistas consultados por Bloomberg.