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viernes, 22 de enero de 2016

Firma del TPP, el 4 de febrero en Auckland, “fin del proceso de negociación”

El TPP incluye a Australia, Brunei, Canadá, Chile, Japón, Malasia, México, Nueva Zelanda, Perú, Singapur, Estados Unidos y Vietnam.

El Acuerdo Estratégico Transpacífico de Asociación Económica (TPP), que pretende fijar las reglas del comercio y las inversiones internacionales , será firmado el próximo 4 de febrero en la ciudad neozelandesa de Auckland.

El polémico acuerdo, buscará crear la mayor zona mundial de libre comercio, que incluirá a países como Estados Unidos, México y Japón, y pretende empujar a China a adaptar sus propias reglas en materia de comercio, inversión y derecho comercial a las definidas por el acuerdo.

Los ministros de Comercio de los 12 países que conforman el acuerdo, que representa el 40 por ciento de la economía mundial, se reunirán en Auckland el 4 de febrero para la ceremonia de firma del TPP.

El ministro neozelandés de Comercio, Todd McClay, anunció este jueves que el texto se firmará el 4 de febrero en Auckland y “marcará el fin del proceso de negociación” del tratado internacional más ambicioso de la historia.

“Después de la firma, los 12 países podrán iniciar los procesos de ratificación. Tendrán dos años para hacerlo antes de que entre en vigor el acuerdo”, añadió.

En sus más de 26 capítulos de negociación, el acuerdo busca regular un gran número de temáticas, que van desde el comercio de lácteos, hasta la regulación laboral, pasando por derechos de autor, patentes, inversiones estatales y medio ambiente.


EL TTP abarca un mercado de 800 millones de personas y representará el 40 por ciento del Producto Interno Bruto mundial. Las ganancias netas están estimadas en 295 billones de dólares al año.

FUENTE: ARISTEGUI NOTICIAS.
AUTOR: REDACCIÓN.
LINK: http://aristeguinoticias.com/2101/mundo/firma-del-tpp-el-4-de-febrero-marcara-el-fin-del-proceso-de-negociacion-ministro-neozelandes/

martes, 12 de enero de 2016

México, menos beneficiado en exportaciones con el TPP: BM

El TPP fue impulsado por 12 países miembros, que programaron la firma del texto del acuerdo en Wellington, Nueva Zelanda, el próximo 4 de febrero.

México sería el menos beneficiado en el crecimiento de las exportaciones como efecto del Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP) entre los 12 países integrantes, concluyó el Banco Mundial, en su estudio sobre “Potenciales implicaciones macroeconómicas del TPP”.

De acuerdo con dicho análisis, las exportaciones de México crecerían sólo 4.7% entre el 2014 y el 2030 como resultado de la eliminación de las barreras al comercio por el TPP, muy por debajo del alza que tendría el país más favorecido, Vietnam, con 30.1 por ciento.

Otras naciones que obtendrían mayores ganancias, igualmente medidas como aumentos en sus exportaciones, son Japón (23.2%), Malasia (20.1%), Nueva Zelanda (12.8%) y Perú (10.3 por ciento).

En tanto, el resto de los países crecería un dígito en sus exportaciones: Estados Unidos (9.2%), Brunei (9%), Singapur (7.5%), Canadá (7%), Chile (5.3%) y Australia (5 por ciento).

“El impacto (positivo) podría ser considerablemente mayor en los países que enfrentan barreras elevadas al comercio, como Vietnam (10%) y Malasia (8 por ciento). Los países que exportan productos intensivos en mano de obra, con ingresos bajos y hogares de baja preparación podrían expandirse”, señaló la investigación publicada por el BM.


El análisis íntegro:
GlobalEconomicProspectsJanuary2016ImplicationsTransPacificPartnershipAgreement.pdfby Aristegui Noticias:



Por otra parte, en otro estudio del Banco, titulado Perspectivas económicas mundiales 2016, se establece que: “Si bien algo debilitado por los bajos precios del petróleo y las presiones fiscales conexas, se prevé que en México el crecimiento repuntará gracias a los beneficios de las reformas estructurales y el fortalecimiento de la demanda del mercado estadounidense”. 

FUENTE: ARISTEGUI NOTICIAS.
AUTOR: REDACCIÓN.
FECHA: 11 ENERO 2016.
LINK: http://aristeguinoticias.com/1101/mexico/mexico-menos-beneficiado-en-exportaciones-con-el-tpp-bm/

jueves, 7 de enero de 2016

Firma México el TPP el 4 de febrero; Senado ratificaría el tratado

Existe una cláusula del acuerdo que podría hacer que sea ratificado por México, sin necesidad de que lo avalen los legisladores.

El Secretario de Economía, Idelfonso Guajardo Villarreal, afirmó que México estará presente el próximo 4 de febrero en la firma el Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP por sus siglas en inglés) en Nueva Zelanda, cuya ratificación en el país ya fue abordada por el Senado en el cierre del periodo pasado.

“A partir de la firma cada país inicia su proceso de ratificación, en el caso de México una vez firmado, ya el Senado tomó un acuerdo al cierre del periodo pasado para iniciar una serie de diálogos y foros de consulta para analizar el balance de la negociación y someterlo a la comisión y al pleno”, explicó en un evento en la sede de la cancillería.

Guajardo Villarreal advirtió que, sin embargo, existe una cláusula del acuerdo que señala si a dos años de haber firmado el TPP hay seis países miembros que lo procesaron en sus poderes legislativos y representan 85 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) de la región, el acuerdo entra automáticamente en operación.

El TPP es un tratado de libre comercio entre varios países de la Cuenca del Pacífico que aborda una variedad de materias de políticas públicas. El acuerdo reúne a Estados Unidos, México, Chile, Perú, Australia, Brunéi, Canadá, Japón, Malasia, Nueva Zelanda, Singapur y Vietnam.

Más bienes de más países…

El socio en las Prácticas de Asuntos Gubernamentales, Fusiones y Adquisiciones y Telecomunicaciones de Jones Day México, Luis Rubio, afirmó que deben analizarse los riesgos y las oportunidades para los sectores productivos, tanto nacionales como extranjeros, con presencia en México.

En un reporte, precisa que cuando se habla del TPP hay que tener presente que no entrará en vigor de inmediato, sino que deberá transcurrir un periodo, el cual se estima sea de al menos de un año y unos meses más.

Más que de los riesgos que pudiere conllevar para los sectores productivos y comercializadores la entrada en vigor del nuevo tratado, deben conocerse las ventajas para los consumidores, quienes podrán acceder a bienes de más países, y para la plataforma exportadora que reside en México, argumenta.

En su opinión, además de las oportunidades económicas de acceder a nuevos mercados, durante el periodo en que se discute el TTP ante el Senado mexicano, los particulares deben abordar la oportunidad que tiene el sector empresarial de cabildear ante las distintas ramas del gobierno mexicano.


Dicho de otra manera, añade, la muy posible entrada en vigor del TTP y su periodo de análisis y aprobación brindan al sector empresarial la posibilidad de pronunciarse, de manera decidida, en la ampliación de las reformas que han brindado oportunidades a este sector productivo.

FUENTE: ARISTEGUI NOTICIAS.
AUTOR: REDACCIÓN.
LINK: http://aristeguinoticias.com/0601/mexico/firma-mexico-el-tpp-el-4-de-febrero-senado-ratificaria-el-tratado/

miércoles, 6 de enero de 2016

Defiende Guajardo inclusión de México al Acuerdo Transpacífico

MÉXICO, DF: México “no podía darse el lujo de quedar fuera” de las negociaciones del Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP, por sus siglas en inglés), cuyo fin es la liberalización del comercio entre 12 países de la región Pacífico, pues de ser así las cadenas de valor que comparte la economía mexicana con las de Estados Unidos y Canadá se hubieran “debilitado”, aseveró hoy el secretario de Economía Ildefonso Guajardo Villareal ante los integrantes del cuerpo diplomático.

Durante una ponencia de 30 minutos que sostuvo en la sede de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), el servidor público defendió el polémico acuerdo y la postura de México durante las negociaciones que la Secretaría de Economía (SE) llevó a cabo de la mano con el sector empresarial reunido en el Cuarto de Junta.

Guajardo informó que al acordar el acuerdo, México se comprometió a liberalizar de inmediato el 77% de su economía con los demás países. En los próximos 5 años, el gobierno tendrá que abrir otro 3% de su economía para que en el horizonte 2025 el 99% del comercio mexicano ingrese en el umbral del tratado.

La SE llevó a cabo las negociaciones en conjunto con la SRE y el sector privado, reunido en el cuarto de consultas. Pese que la sociedad civil no se enteró de los avances del TPP sino a través de escasas filtraciones de Wikileaks y conoció el texto el pasado 5 de octubre –cuando los 12 países lo pactaron–, Guajardo negó que el proceso de negociación se llevó a cabo en secrecía.

“Existían múltiples corchetes en las negociaciones”, comentó el funcionario, al añadir que “obviamente el publicar textos ocurre cuando tienes un acuerdo”, pues los textos anteriores incluyen “estrategias de bluff para lograr el objetivo de la negociación”. Publicarlos “generaría incertidumbre en la población”, aseveró.

Desde la ventilación de borradores del TPP, tanto Joseph Stiglitz como Paul Krugman –respectivamente ganadores del premio Nobel de economía en 2001 y 2008—emitieron críticas sobre los alcances del texto, al que acusaron de beneficiar a las empresas transnacionales en materia de propiedad intelectual y porque les abrirá un espacio para demandar a los Estados.

Al respecto, el secretario de Economía afirmó que “sólo son dos de cientos que han hecho comentarios críticos” sobre el texto, e insistió en la necesidad de “desmitificar los debates”.

Según Guajardo, el TPP garantiza a los gobiernos sus decisiones en materia de políticas públicas y de desarrollo social. Prueba que es un “buen tratado”, de acuerdo con el funcionario: el sector republicano del Congreso estadunidense, apoyado por las empresas farmacéuticas, multiplicó los ataques contra las medidas contenidas en el texto en materia de patentes de las nuevas medicinas.

Guajardo recordó que durante las negociaciones los gobiernos de México y de Japón tuvieron un fuerte diferendo sobre las reglas de origen de los productos, que les llevó a abandonar las negociaciones durante un lapso.

El TLCAN “no benefició” a las PyMEs

El funcionario añadió que, a diferencia del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), el TPP beneficiará a las Pequeñas y Medianas Empresas (PyMEs).

Precisó: Al implementar el acuerdo que liberalizó el comercio entre México, Estados Unidos y Canadá, el gobierno mexicano no abrió los sectores financiero y energético, y aplicó una ley de competencia mala. Según Guajardo, lo anterior impidió a las PyMEs mexicanas competir con sus contrapartes del norte.

Los 12 países de la región finalizaron el acuerdo el pasado 5 de octubre, y lo firmarán formalmente el próximo 4 de febrero en Nueva Zelanda. A partir de este momento iniciará el proceso de aprobación en las instancias parlamentarias nacionales.


Ante los embajadores y cónsules reunidos en la Cancillería, Guajardo reconoció que el ejecutivo puede entregar el texto al Senado “en cualquier momento”. Sin embargo, aconsejó “no enviarle de inmediato” para ver cómo evoluciona el debate sobre el TPP en Estados Unidos, donde resulta probable que el Congreso –de mayoría republicana—lo rechace hasta las próximas elecciones.

FUENTE: PROCESO.
AUTOR: MATHIEU TOURLIERE.
LINK: http://www.proceso.com.mx/?p=425385

miércoles, 11 de noviembre de 2015

Firma del ATP en febrero de 2016, prevé Guajardo

México, DF. El Acuerdo de Asociación Transpacífico (ATP) podría firmarse a partir de la primera semana de febrero de 2016 por parte de los presidentes de los 12 países que lo negociaron y entrar en vigor hasta 2017, previó el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, al detallar "la ruta crítica" que debe seguirse después de que la semana pasada se hicieron públicos los documentos preliminares.

Guajardo y Claudia Ruiz Massieu, secretaria de Relaciones Exteriores, detallaron el objetivo de los viajes oficiales que el presidente Enrique Peña Nieto, con una comitiva de 29 funcionarios, realizará este mes a Turquía y Filipinas, para asistir a Cumbre de Líderes del G-20 y la 23 Reunión de Líderes Económicos del Foro de Cooperación Económica Asia- Pacífico (APEC), respectivamente.

El secretario de Economía abundó que en este último foro habrá una reunión paralela el 18 de noviembre de los 12 países del ATP para definir la fecha en que los mandatarios deben firmar el acuerdo y calculó que ello podría ocurrir en el segundo mes del año próximo.

Cuestionado sobre los cambios legales que tendrá que llevar a cabo México con el ATP, el funcionario respondió que las adecuaciones que implica cualquier acuerdo o tratado internacional pueden llevarse a cabo con decretos y regulaciones administrativas, y no necesariamente en leyes.

Como ejemplo de "una remediación" acordada en el ATP que, dijo, "podría implicar o no el cambio específico de una ley", el funcionario destacó que en el capítulo de propiedad intelectual se estableció el acuerdo irrestricto a la libertad de expresión y al uso libre de las redes pero al mismo tiempo se obliga a los gobiernos a respetar los derechos de autores y compositores de video, películas música y canciones.

Los países del ATP adoptaron un punto intermedio entre los dos sistemas de protección que actualmente prevalecen en el mundo: el primero convierte a los administradores de las redes en policías del sistema, el cual no era aceptable para México, y el segundo "era tan libre que no era práctico".

Así que lo acordado al final fue que cuando un autor o compositor detecte que alguna de sus obras se difunde ilegalmente sin que se le retribuya ningún beneficio, lo denuncie al administrador de la red, quien a su vez debe notificarlo a la autoridad. Transitoriamente se congela la difusión de ese material hasta que la autoridad declare definitivamente la procedencia o improcedencia del caso.

Es un sistema que actualmente no existe y que, en el caso de México, dará un nuevo rol al Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) y al Instituto Federal de Telecomunicaciones (Ifetel) para que determinen la protección de los derechos de autores y compositores, sostuvo.

Revisión legal de los textos del ATP llevará 3 meses

El secretario reiteró que los textos negociados del ATP fueron traducidos de manera unilateral por cada país asociados para poder difundirlos públicamente a sus ciudadanos, pero acotó que para que el tratado esté listo para ser firmado por los presidentes está siendo revisado y sometido a un proceso de "limpieza legal, que es ordenar lo negociado en una forma congruente, capitular relaciones específicas, homologar términos, poner referencias concretas, apéndices, etcétera. Es un proceso de validación que involucra a los 12 países y conjuntamente se estará llevando en los próximos tres meses para que a partir de febrero lo puedan firmar los presidentes. Con la limpieza legal los textos lucirán en forma diferente pero no en sustancia porque será la misma".

Una vez que el acuerdo sea firmado de manera automática comenzarán los procesos de ratificación por los congresos legislativo o las cortes, según sea el caso para cada país, pues en México sólo corresponde al Senado y en Estados Unidos deben hacerlo la Cámara de Representantes y el Senado.

Guajardo calculó que el acuerdo podría entrar a discusión en el primer periodo legislativo de 2016, con foros de discusión y análisis "que nos llevaría, probablemente, a un periodo de aprobación que seguramente iniciará el primero de septiembre. El Senado tendrá la libertad de poder una decisión en cualquier sentido, incluyendo que consideren un periodo de aprobación distinto al periodo ordinario. En resumen, yo creo que en 2016 el ATP quedará aprobado y dependerá de qué tantos países hicieron el proceso para que pudiera entrar en operación desde la primera parte de 2017", indicó.


Incluso mencionó que el ATP puede entrar en vigor sin que México lo haya aprobado, siempre y cuando se cumpla una condición: "Una vez que sea esto discutido y ratificado por el Senado, en automático estaremos listos para incorporarnos al acuerdo. Hay una cláusula que dice que el ATP entrará en vigor una vez que las 12 economías terminen sus procesos internos de ratificación o, si a los 24 meses esto no ha ocurrido, entonces entrará en vigor si y sólo si hay al menos 6 economías que los hayan hecho y que en su conjunto representen el 85 por ciento del producto interno de la región (PIB)", puntualizó Guajardo.

FUENTE: LA JORNADA.
AUTOR: SUSANA GONZÁLEZ/ GEORGINA SALDIERNA.
LINK: http://www.jornada.unam.mx/ultimas/2015/11/11/firma-del-atp-quiza-en-febrero-de-2016-calcula-guajardo-7567.html.

sábado, 7 de noviembre de 2015

TPP, un negocio redondo para trasnacionales

MÉXICO, DF: Después de cinco años de negociaciones que 12 países llevaron a cabo en secrecía, el lunes 5 de octubre se oficializó la firma del polémico Acuerdo Transpacífico (TPP, por sus siglas en inglés), el cual establece una zona de libre comercio entre México, Estados Unidos, Canadá, Chile, Perú, Singapur, Japón, Australia, Malasia, Vietnam, Brunei y Nueva Zelanda.

Ayer, el ministerio de Economía de Nueva Zelanda publicó por primera vez la versión final –y en inglés– del documento que establece, a lo largo de sus 30 capítulos, las nuevas reglas de los intercambios comerciales y financieros –de orientación resolutivamente neoliberales–, a las que las legislaciones nacionales tendrán que adecuarse.

La zona de libre comercio elimina los aranceles a las importaciones y exportaciones, así como otras “barreras comerciales innecesarias”, entre ellas los subsidios, de decenas de miles de bienes –el gobierno de Barack Obama menciona más de 18 mil productos estadunidenses de exportación exentos de aranceles–, y abre su mercado a todas las empresas de la región, por lo que ellas operan en los demás países como si fueran nacionales.

En otras palabras, las empresas de toda la región competirán entre sí para captar los mercados nacionales de los 12 países firmantes del TPP, lo que, según los detractores del acuerdo, beneficiará en primer lugar a las transnacionales, que ya cuentan con la estructura para dominar cadenas internacionales de producción.

De hecho, el TPP dedica un breve capítulo al desarrollo y el reforzamiento de estas cadenas internacionales, en el que insta a los países a abrirse a las empresas para que ellas integren la totalidad del proceso de producción de sus mercancías.

“Ningún (país) adoptará ni mantendrá prohibiciones o restricciones sobre la importación de cualquier bien de otro (país) o sobre la exportación o la venta para exportar de cualquier bien destinado al territorio de otro país”, plantea el TPP, aunque en esta materia México determinó que las restricciones comerciales no se aplicarán a los hidrocarburos ni a las partes de automóviles usadas.

De acuerdo con el documento, los Estados deberán agilizar las leyes que rigen la competencia en sus territorios, reforzar la protección a los derechos de propiedad intelectual y combatir las prácticas monopólicas –aunque permita a los países a designar monopolios– y “anticomerciales”.

El TPP también plantea la apertura comercial de los sectores textil, agrícola, ambiental, financiero y de las telecomunicaciones, así como de la nueva economía digital.

Liberaliza la circulación de bienes financieros y bancarios, así como las inversiones en la zona y limita las acciones “directas o indirectas” de expropiación.

Con el mismo tono, el documento obliga los países a eliminar las “barreras técnicas” mediante la armonización de sus sistemas de regulación y de sus estándares para la comercialización de los productos. Para lo anterior, el TPP establece estándares compartidos para los licores, los productos farmacéuticos y cosméticos, los alimentos procesados o el material médico, entre otros.

El TPP también obliga a los Estados a informar a sus pares –con antelación– cuando elabora una nueva reglamentación o una ley que podrían impactar sobre uno de los capítulos del TPP. En estos casos, llamados “consulta”, el texto ofrece la oportunidad a un país firmante de hacer “comentarios” sobre el futuro texto de ley.

Incluso, permite a las empresas, nacionales y extranjeras –llamadas “personas” en el documento– participar “en la elaboración de las normas, regulaciones técnicas y procedimientos de evaluación de conformidad” de un Estado si así lo requieren.

Burocracia

El TPP tendrá su propia gobernanza, ya que el acuerdo crea un nuevo aparato burocrático, encabezado por la Comisión de la Alianza Transpacífico, conformada por ministros de los 12 países, los cuales estarán a cargo de revisar la implementación y la operación del acuerdo, así como de enmendarlo si fuera necesario.

Además, la comisión supervisará el trabajo de la batería de comités y grupos de trabajo que crea el TPP, cuya función recaerá en vigilar que los países respeten las obligaciones del acuerdo, así como establecer nuevas reglas, siempre hacia una mayor apertura comercial.

El Comité sobre Comercio de Bienes, por ejemplo, tiene la misión de promover el comercio de bienes entre los países, “acelerar la eliminación de tarifas” o “abordar las barreras al comercio entre los países”.

Por su parte, el Comité sobre Comercio Agrícola promoverá la aplicación del TPP en materia agrícola, y hospedará un grupo de trabajo sobre los alimentos y peces desarrollados con “biotecnologías modernas” –mejor conocidos como transgénicos–.

Este grupo se desempeñará como “foro” para discutir las normas en materia de transgénicos y para “destacar la cooperación entre dos o más (países) cuando exista un interés mutuo en el comercio de productos de biotecnología moderna”.

Prácticamente todos los capítulos del TPP tienen su comité, en los que sesionarán “representantes” de los gobiernos: el comité sobre materia en comercio textiles y de ropa, de barreras técnicas al comercio, de servicios financieros, de adquisiciones gubernamentales, de empresas estatales y monopolios designados; el comité ambiental, de desarrollo o de coherencia regulatoria, entre otros.

Disputas

Además de la apertura comercial y financiera, que diluye parte del poder de los Estados en las manos del sector privado, el TPP establece un protocolo de remediación de disputas, tanto entre Estados como entre empresas y gobiernos.

Así, si un Estado considera que otro país viola cualquier punto del TPP –porque adoptó medidas que estima demasiado proteccionistas o porque está inconforme con su nueva reglamentación–, dará a conocer su queja a su contraparte.

Si los gobiernos no logran un consenso ni existe una forma de mediación, nombrarán a un panel de tres miembros, quienes dictaminarán una resolución. Si el fallo recae a favor del país demandado, éste debe modificar la causa que originó la inconformidad del otro Estado.

En el caso de que una empresa extranjera se sienta afectada por las acciones de un gobierno o las autoridades de un país en el que invirtió, podrá acudir a los tribunales de arbitraje internacionales y demandar “al tú por tú” a los gobiernos para reclamar una compensación monetaria o la restitución de su propiedad.

Este tipo de juicios comerciales ya existe, y suele provocar la indignación en los países demandados. El año pasado, por ejemplo, el Estado de Uruguay perdió la demanda comercial que interpuso en su contra la multinacional del tabaco Philip Morris, con el argumento que la nueva cajetilla “neutra” –que impuso el gobierno uruguayo para desalentar, con éxito, el consumo de tabaco— violaba su propiedad intelectual.

Con el TPP, si la supresión de aranceles conlleva a la importación masiva de productos textiles que ponga en peligro la industria nacional, un gobierno puede decretar “medidas de emergencia” y elevar los aranceles durante un periodo no mayor a dos años –prorrogable un año–.

Sin embargo, en este caso tendrá que otorgar al país afectado concesiones “que tengan un efecto comercial sustancialmente equivalente al valor de los impuestos recaudados como resultado de la medida de emergencia”.

El documento prevé medidas para combatir la corrupción y el cohecho internacional que afectarían a los intereses comerciales de una empresa. Si una empresa pierde una licitación pública a pesar de presentar la mejor oferta y el Estado no investigó los hechos, su gobierno podrá acudir a las instancias de disputa.

En varios capítulos, el TPP aborda las regulaciones al comercio agrícola. Establece de manera clara que “ningún (país) puede adoptar o mantener cualquier subsidio a bienes agrícolas destinados al territorio de otro país”. En materia de transgénicos, el texto del TPP es muy prudente en su redacción –pues en ningún momento menciona a los transgénicos como tales–, y deja a los países una aparente margen de soberanía para comercializarlos o no.

Respecto de las normas sanitarias y fitosanitarias, si bien el TPP establece la necesidad de proteger la vida humana, animal y vegetal “mientras se facilita y se expande el comercio”, también plantea en sus objetivos “asegurarse que las medidas sanitarias y fitosanitarias implementadas por un (país) no crean obstáculos injustificados al comercio”.

Lo mismo ocurre en materia ambiental: el TPP incentiva las políticas de crecimiento sostenible, llama a reforzar las leyes de protección al ambiente y deja una aparente soberanía a los Estados en términos de normatividad, pero subraya que “es inapropiado el establecer o utilizar sus leyes ambientales en una forma que podría constituir una restricción disfrazada del comercio o de inversiones entre los países”.

Confidencialidad

Bajo el pretexto de proteger la “competitividad”, El TPP obliga a los países respetar estrictas reglas de confidencialidad sobre la información que recauden de las empresas extranjeras –para verificar si cumplen con las normas ambientales, por ejemplo– y que comparten entre sí.

En materia financiera, por ejemplo, los Estados no podrán solicitar a sus pares información acerca de los clientes de las instituciones financieras internacionales o proveedores de servicios financieros; ni tampoco pedir datos “confidenciales” que “perjudiquen los intereses comerciales legítimos de las empresas”.

Asimismo, el TPP restringe a los Estados la recolección de información sobre las fórmulas de los alimentos procesados o les prohíbe solicitar a los laboratorios farmacéuticos los datos financieros y los costos de sus estrategias de venta.

En la versión final del TPP permaneció una cláusula sobre los secretos comerciales, que causó alarma entre los activistas de la región cuando Wikileaks difundió un borrador del capítulo sobre propiedad intelectual, ya que atentaría contra la figura del Whistleblower.


Esta cláusula obliga a los Estados a perseguir en el ámbito penal a cualquier persona que acceda, utilice o divulgue de manera no autorizada a un “secreto comercial” en un sistema informático. Uno de los agravantes plantea “que el acto sea en detrimento de los intereses económicos, de las relaciones internacionales, de la defensa nacional o de la seguridad nacional de (un país)”.

FUENTE: PROCESO.
AUTOR: MATHIEU TOURLIERE.

miércoles, 4 de noviembre de 2015

#LeyFayad y TPP, provocaciones a derechos en Internet

MÉXICO, DF: “Pirómano” y excesivo como suele ser en sus declaraciones, el senador hidalguense Omar Fayad, del PRI, asumió así su derrota frente a la intención de lanzar una Ley Federal para Prevenir y Sancionar Delitos Informáticos: “No sólo la vamos a retirar, la vamos a quemar”.

El gusto al legislador priista no le duró ni una semana. Desde el martes 27 de octubre, cuando fue presentada tras una serie de consultas controladas con representantes de la Policía Federal Preventiva, la #LeyFayad nació muerta.

Fueron tan absurdos sus presupuestos y artículos que pareció más una provocación que un ejercicio legislativo serio. Organizaciones como la Red de Defensa de los Derechos Digitales (@R3dmx), así como Artículo 19, la AMEDI, el colectivo Anonymous y miles de usuarios y especialistas en la neutralidad de la red le demostraron al propio Fayad que antes de criminalizar debía entender el ciberactivismo y, en especial, la defensa de los derechos en la red.


Fayad no pudo defender de manera convincente ninguno de los artículos más polémicos de la ley que fue bautizada con su nombre porque simple y sencillamente era difícil argumentar a favor de artículos tan retrógrados como el 17 o los del 21 al 24 de la #LeyFayad.





Por ejemplo, el artículo 17 estipulaba que “a todo aquel que dolosamente destruya, inutilice, dañe o realice cualquier acto que altere el funcionamiento de un sistema informático o alguno de sus componentes, se le impondrá una sanción de cinco a quince años de prisión y multa de hasta mil días de salarios mínimos”.

La Red en Defensa de los Derechos Digitales (R3D) consideró que este ordenamiento puede constituir una criminalización al uso de la computadora personal o a considerar delito tirarla a la basura.

Fayad afirmó que este artículo hablaba de “actitud dolosa”. “Si la actitud no es dolosa, si tú tiras la computadora, ¿por qué se va a interpretar que cometes esta conducta?”, abundó sin explicar quién determinará el uso “doloso”.

En los artículos 21 al 24 hay una amplia interpretación respecto de lo que puede ser intimidación, hostigamiento y agresión en las redes sociales. Un párrafo de su artículo 21 ordena:

“A quien, a través de medios informáticos acose, hostigue, intimide, agreda o profiera cualquier forma de maltrato físico, verbal o psicológico en contra de usuarios de Internet de forma reiterada y sistemática, se le impondrá una pena de seis meses a dos años de prisión y multa de cincuenta a ochenta días de salario mínimo”.

En muchos sentidos, la #LeyFayad tuvo el descaro de revelar cómo piensa un sector del peñismo y del priismo frente a la nueva dinámica del uso del Internet y, en especial, de las redes sociales, auténtica pesadilla para un telepresidente acostumbrado sólo a la comunicación vertical, unilateral y analógica.

Sin embargo, lo verdaderamente retrógrada no es la hoy extinta #LeyFayad sino otros ordenamientos que, con el pretexto de proteger el comercio internacional, buscan imponer restricciones al uso del Internet.

Es el caso del Acuerdo Transpacífico (TPP, por sus siglas en inglés), negociado en secreto, sin consultar a ninguno de los organismos legislativos de las 11 naciones firmantes, incluyendo a Estados Unidos y México, mucho menos a las organizaciones defensoras de los derechos digitales.

El TPP prevé penalizar a quienes revelen delitos empresariales “a través de sistemas informáticos”. Y con el pretexto de proteger los derechos de autor, el TPP autoriza que proveedores de contenidos puedan eliminar publicaciones o videos en Facebook o YouTube si se recibe una queja formal.

“Es la peor ley de copyright”, han subrayado otras organizaciones como Electronic Frontier Foundation (@EFF), críticas del TPP.


En otras palabras, la amenaza al libre flujo de información y de contenidos en Internet no está en los policías o en los regímenes autoritarios solamente, sino en los acuerdos de libre comercio de reciente generación, a través de los cuales se pretenden conculcar derechos digitales.

FUENTE: PROCESO.
AUTRO: JENARO VILLAMIL.
LINK: http://www.proceso.com.mx/?p=419903

lunes, 26 de octubre de 2015

TPP puede crear un desempleo más alto en México: Joseph Stiglitz

A inicios de este mes se dio a conocer que diferentes países del Pacífico, entre ellos México, concretaron un pacto que busca reducir barreras arancelarias y establecer estándares para las naciones firmantes.

“La aprobación del TPP (Acuerdo de Asociación Transpacífico) entre Estados Unidos y Japón con otras 10 naciones puede crear un desempleo más alto en México, porque supone una vuelta a la situación previa al NAFTA (Tratado de Libre Comercio de América del Norte en inglés). Por ejemplo, piezas para coches fabricados en China podrían acabar en Japón y competir así con México. Por tanto, el TPP supone una amenaza”, aseguró Joseph Stiglitz, Premio Nobel de Economía, en entrevista con la revista Vanity Fair España y México.

“Creo que el gobierno ha tenido mucho éxito en esto, pero hacen falta todavía más reformas, ha habido mucha resistencia. En la educación (…) en el sector energético, están introduciendo la competencia en las telecomunicaciones (…) Así que lo han estado haciendo muy bien pero es evidente que aún tienen un déficit en infraestructuras y lo malo es que todos los beneficios de lo que las reformas ya han conseguido no se verán de inmediato y las consecuencias del desplome del precio del petróleo se notarán pronto”, alertó el economista

La entrevista completa con Joseph Stiglitz se publicará en Vanity Fair.

A inicios de este mes, la Secretaría de Economía dio a conocer un “resumen ejecutivo” del TPP en el que sólo destacó beneficios de éste. Por ejemplo, que la mayor parte de la eliminación arancelaria para bienes industriales se implementará de manera inmediata.

En el capítulo correspondiente a “Textiles y prendas de vestir”, sobresale que los países del TPP acuerdan eliminar aranceles en textiles y prendas de vestir.

Cabe destacar que la mayoría de estos aranceles serán eliminados de manera inmediata, excepto en productos sensibles, en donde serán eliminados durante plazos de mayor duración.

En el capítulo de “inversión” se establecen políticas no discriminatorias a la inversión, que aseguren la protección elemental del Estado de Derecho y de la capacidad de los gobiernos de las partes para alcanzar objetivos legítimos de política pública.

Para lograr dicho objetivo, el TPP proporciona las protecciones básicas de inversión, incluidas en otros acuerdos relacionados a la inversión; incluyendo trato nacional, trato de nación y trato de nación más favorecida, entre otras.

El capítulo también incluye un mecanismo de arbitraje internacional neutral y transparente para disputas de inversión, con fuertes medidas de salvaguardia para evitar reclamaciones frívolas y abusivas, y garantizar el derecho de los gobiernos a regular con base en el interés público, incluyendo la protección a la salud, la seguridad y el medio ambiente.

En el capítulo 18, correspondiente a la Propiedad Intelectual, el TPP facilitará a las empresas a identificar, registrar y proteger los derechos de propiedad intelectual en nuevos mercados, lo que es particularmente importante para las pequeñas empresas.

Los países integrantes acordaron establecer sistemas sólidos de observancia, incluidos, por ejemplo, procedimientos civiles, medidas provisionales, medidas en frontera, así como procedimientos y sanciones penales para la falsificación de marcas y derechos de autor o relacionados.

En particular, las partes proveerán de medios legales para prevenir la apropiación ilegal de secretos comerciales, establecerán procedimientos y sanciones penales para el robo de secretos, inclusive por medio de robo cibernético y para la videograbación en salas de cine.

En materia de Comercio y Trabajo, los 12 miembros se comprometen a no renunciar o derogar leyes que implementen los derechos laborales fundamentales para atraer comercio o inversión.

Asimismo, a no dejar de aplicar efectivamente su legislación laboral conforme a un patrón sostenido o recurrente, que pudiera afectar el comercio o la inversión entre los países parte.

En el capítulo sobre Pequeñas y Medianas empresas, se establece un comité que se reunirá periódicamente para revisar los avances del acuerdo, hacer mejoras y supervisar las actividades de cooperación o de fomento de capacidades.

Ello, a través de asesorías de exportación, asistencia y programas de capacitación para las Pequeñas y Medianas empresas, compartir información y financiamiento del comercio, entre otras actividades.

En el capítulo 30, se asegura que el TPP puede ser modificado con el acuerdo de todas las partes, y después de que cada una concluya con sus procedimientos legales aplicables y notifique por escrito a los miembros.

Se especifica que el TPP está abierto a la adhesión de los integrantes del Mecanismo de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC, por sus siglas en inglés) y de otros Estados o territorios aduaneros distintos.


Lo anterior, según lo acordado por las partes, después de haber concluido los procedimientos legales aplicables para cada país, y también se especifica los procedimientos bajo los cuales un país parte puede retirarse del TPP.

FUENTE: ARISTEGUI NOTICIAS.
AUTOR: REDACCIÓN.

martes, 20 de octubre de 2015

En 30 días el contenido del ATP estará disponible en Internet

México, DF. El secretario de Economía, Ildefonso Guajardo Villarreal, informó en la Cámara de Diputados que en 30 días los países que firmaron el Acuerdo Estratégico Transpacífico de Asociación Económica (ATP) difundirán en sus respectivas plataformas en Internet el contenido de ese acuerdo, y que en el caso de México permitirá “que esté al escrutinio de los diputados, de los senadores y de toda la opinión pública”.

En respuesta a críticas de legisladores de la oposición respecto de la falta de transparencia y los riesgos para la economía nacional del ATP, el funcionario explicó que en las negociaciones se cuidó de los sectores estratégicos, entre estos el de lácteos, textil y se rechazó la regla de 30 por ciento de contenido que se quería imponer en el sector automotriz. “Endurecimos la pierna”, describió.

Al comparecer ante la Comisión de Economía, Guajardo Villarreal dijo que en la reunión de este martes con el gabinete y el presidente Enrique Peña Nieto se presentaron los resultados de la negociación y, por instrucción presidencial, se inició la revisión del mapa de ruta para definir el esquema de fortalecimiento de los sectores estratégicos del país.

Expuso que la Secretaría de Economía mantuvo más de mil 100 reuniones con todos los sectores productivos y no se incluyó ninguna propuesta no consensuada antes con cada sector involucrado en el ATP. “Se reportó cada sesión de negociaciones al Senado puntualmente. Lo que no se podía hace era subir a una plataforma la estrategia de negociación, que se cerró hace dos semanas”.

Por otra parte explicó que la propuesta presidencial de las zonas económicas especiales se enfocará al impulso de industrias con capacidad de florecer en cada región. “No se trata de seducir a la industria automotriz del bajío para irse a Chiapas”, dijo.


Reconoció que el 50 por ciento de las zonas económicas en el mundo han fracasado y que en el caso de México no será suficiente que una comunidad sea pobre para que ahí se instale una zona económica especial, sino que se requiere de al menos “un volumen crítico de 500 mil habitantes y que se pueda conectar a una cadena de valor”.

FUENTE: LA JORNADA.
AUTOR: ENRIQUE MÉNDEZ.

domingo, 18 de octubre de 2015

Las trampas del TPP

MÉXICO, D.F: La semana pasada los países que tomaron parte en las negociaciones del Acuerdo Transpacífico (TPP) llegaron a un acuerdo final, entre ellos México. El gobierno mexicano es grandilocuente en lo que respecta a las bondades de este instrumento que, en buena medida, dejaría atrás al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), que nunca funcionó debidamente. La verdad de las cosas es muy distinta a la que quiere ver el gobierno. Veamos.

Primero. En la edición 2030 de Proceso abordé los principales rubros del TPP y el tema de por qué debería hacerse público su contenido.

No voy a repetirme aquí. Daré, en cambio, seguimiento al asunto relativo a los cambios inesperados que se han generado de una semana a otra. El primer punto es el hilo conductor del discurso del gobierno de Enrique Peña Nieto, que se sintetiza en los siguientes aspectos: a) Es una gran oportunidad para México firmar el más grande tratado de libre comercio del mundo; b) se eliminarían las paridades cambiarias del peso contra otras monedas, fundamentalmente contra el dólar; c) se darían trabajos a miles de mexicanos en el mediano y largo plazos; y d) se va a permitir que los productos mexicanos compitan en los mercados más grandes del mundo, lo que supondría una reactivación de la economía, entrada de divisas y mayores trabajos.

Así presentado, cualquiera preguntaría: ¿Dónde firmo? Pero esto no es verdad, al menos no todo. Hasta ahora lo que el gobierno pregona como supuestos beneficios es tan sólo un acto de fe, muy respetable si fuera un asunto de religión o de dogmas que deben aceptarse tal como son. No es, por supuesto, el caso. Se trata de una reforma constitucional cocinada en los hechos por la puerta de atrás y que no admite creer, sino, en cambio, revisar las letras grandes y las chiquitas para cotejar lo que se dice con lo que es.

Si todo suena tan idílico, la primera pregunta es: ¿Por qué no dejan ver el contenido del tratado y someterlo a los más distintos expertos en los temas que conlleva? Si fuera como dicen que es, el gobierno de Enrique Peña Nieto tendría muchos bonos sociales, que, por cierto, requiere con urgencia.

Segundo. La opacidad como signo distintivo de las negociaciones del TPP y las resistencias en varios países, como Chile y Estados Unidos, y por fortuna México, donde apenas empiezan a surgir, representa un signo de preocupación sobre el contenido final de esta pieza jurídica.

El problema es que el TPP no es un tratado de libre comercio tipo TLCAN, sino un acuerdo comercial y de restricción de derechos humanos. Esta última parte es la que debe preocupar a los ciudadanos. El presidente Barak Obama ha engañado con la verdad en torno al TPP: “No podemos permitir que países como China escriban las reglas de la economía global. Nosotros debemos escribir esas reglas, abriendo nuevos mercados a los productos estadunidenses”, de acuerdo con The Wall Street Journal (http://blogs.wsj.com/washwire/2015/10/05/text-of-obamas-statement-on-trans-pacific-partnership/).

Nada se ha dicho sobre México que, hoy como ayer, es convidado a una fiesta por razones de seguridad nacional estadunidenses, pero no porque estas nuevas reglas tengan un impacto positivo para el país. Me voy a detener en un problema que impactará en los casi vacíos bolsillos de los mexicanos: el relativo al sector farmacéutico.

Éste es uno de las más grandes donantes de dinero a diputados y senadores de Estados Unidos, en retribución, por supuesto, de apoyo en sus áreas estratégicas. Sólo en 2014 los laboratorios farmacéuticos gastaron 229 millones de dólares en contribuciones políticas hasta donde se tiene registrado (http://www.truth-out.org/news/item/33010-how-much-of-big-pharma-s-massive-profits-are-used-to-influence-politicians).


Tercero. Gracias a este lobby, en el proyecto del TPP se incluyeron cláusulas para que las patentes se extiendan más tiempo, lo que obra en perjuicio de los medicamentos genéricos y, por ende, de los bolsillos de los mexicanos.

Peor todavía: sobre este punto, en otros de los países firmantes del acuerdo internacional se ha dicho que la extensión de las patentes a los medicamentos no tendrá un impacto necesariamente negativo en los ciudadanos por las políticas generales de descuento a varios de los países firmantes.

Resulta, sin embargo, que el gobierno de México, justo en el marco de su ingreso a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) en mayo de 1994, firmó una solicitud en la cual pedía que no se le considerara “país en vías de desarrollo” y, en consecuencia, rechazaba los descuentos en medicamentos de genéricos para dichos países.

De esta forma, los fármacos de patente en el país tienen precios más altos que los de Alemania, Canadá, Italia y Francia, y están a la par del Reino Unido (http://content.healthaffairs.org/content/early/2003/10/29/hlthaff.w3.521.full.pdf), con la diferencia de que en México los sueldos son sustancialmente más bajos que en Canadá y los países europeos. Esta decisión del gobierno mexicano ha sido un flagelo para las familias de más bajos recursos. Y así se podrían enumerar otros casos en los que el gobierno de México, de manera irresponsable, ha aceptado precios internacionales o ha requerido expresamente que no se le considere país en desarrollo y, por tanto, no sea sujeto de precios diferenciados a la baja.

En este marco, es urgente que se conozca el contenido del TPP y sólo se ratifique por el Senado si existen mayores beneficios que perjuicios para la mayoría de la sociedad, dictámenes de expertos en cada uno de los rubros de por medio.

FUENTE: PROCESO.
AUTOR: ERNESTO VILLANUEVA.

lunes, 5 de octubre de 2015

Sellan 12 países Acuerdo Transpacífico; EU debe guiar economía mundial: Obama

WASHINGTON: Luego de cinco años de negociaciones, Estados Unidos y 11 naciones más de América, Asía y Oceanía, que en conjunto representan el 40% del Producto Interno Bruto mundial, concretaron hoy el Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP, por sus siglas en inglés).

El acuerdo comercial concretado esta mañana en Atlanta, Georgia, establecerá el área de intercambio comercial más grande del mundo y es el segundo acuerdo de libre comercio al que se integra Estados Unidos desde que se negoció el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (Telecan).

Bajo las reglas del nuevo compromiso, las naciones que lo integran se comprometen a bajar aún más sus aranceles, unir las reglas de especificación técnica de los productos para facilitar las exportaciones e importaciones, y mejorar las regulaciones para combatir el proteccionismo.

Tras congratularse por concretar el acuerdo, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, destacó que el TPP creara más empleos en su país.

“Podremos exportar más productos hechos en Estados Unidos a todo el mundo, lo cual empujará la creación de más empleos y mejor pagados (…).

“Cuando más del 95% de nuestros clientes potenciales se encuentran fuera de nuestras fronteras, no podemos dejar que países como China escriban las reglas de la economía global”, dijo Obama a través de una declaración por escrito que divulgó la Casa Blanca.

Estados Unidos, abundó, debe “escribir la reglas de la economía mundial, abrir nuevos mercados a nuestros productos al mismo tiempo que definimos estándares más altos para proteger a los trabajadores y al medio ambiente”.

El mandatario estadunidense aseguró que durante toda su presidencia ha luchado por mejorar la situación económica de su país, por la creación de empleos y fortalecer la competencia económica global bajo reglas justas como las que definirán al TPP.

El compromiso comercial que asocia a las economías de Australia, Brunei, Canadá, Chile, Estados Unidos, Japón, Malasia, México, Nueva Zelanda, Perú, Singapur y Vietnam, fue considerado por Obama como “un resultado bipartidario” gracias al respaldo que ofreció el Congreso federal de su país para sacarlo adelante.

Al presidente Obama le corresponde ahora cabildear en el Congreso para que los legisladores ratifiquen el TPP, el cual se negoció durante cinco años.

En el Capitolio de Washington existe una oposición férrea al TPP por parte de legisladores demócratas y republicanos, que podrían hacer difícil la tarea de ratificación a la Casa Blanca.

La oposición al TPP en el Capitolio sostiene que acuerdos comerciales como el TLCAN, sólo provocan pérdida de empleos en Estados Unidos. Con ellos coinciden los sindicatos laborales estadunidenses quienes encabezan el cabildeo para derrocar al compromiso logrado en Atlanta.

El presidente aclaró que “tienen varios meses” para leer los detalles del TPP, por lo que indicó que “no los firmará” para su entrada en vigor hasta que el Congreso y el poder ejecutivo tengan la seguridad de que beneficia a Estados Unidos y a sus trabajadores.


“Estoy listo para trabajar con los legisladores de los dos partidos mientras analizan este acuerdo”, concluyó el presidente Obama.

FUENTE: PROCESO.
AUTOR: J. JESÚS ESQUIVEL.

miércoles, 23 de septiembre de 2015

Obama y Peña dialogaron sobre el polémico Acuerdo Estratégico Transpacífico

El acuerdo que negocian actualmente 12 naciones del Pacífico, incluyendo México y Estados Unidos, ha sido calificado como el más progresista en la historia por unos, pero como una fuerte amenaza para las economías débiles por otros.

Los presidentes de Estados Unidos, Barack Obama, y Enrique Peña Nieto, de México, coincidieron este miércoles en la necesidad de fortalecer la relación económica entre las dos socios de cara a la creciente competitividad internacional.

Al sostener una conversación telefónica en la que discutieron temas de la agenda bilateral, los dos mandatarios hicieron un repaso de las negociaciones que se llevan a cabo con miras al establecimiento del Acuerdo Estratégico Transpacífico (TPP, por sus siglas en inglés).

La Casa Blanca precisó que durante la llamada, Obama y Peña Nieto estuvieron de acuerdo en la importancia de fortalecer la relación económica entre los dos países para asegurar que “continúen siendo lideres en la economía global”.

“Específicamente, discutieron el estatus de las negociaciones del Acuerdo Estratégico Transpacífico y la importancia de concluir de manera rápida las negociaciones”. apuntó la oficina de prensa presidencial en un comunicado.

El acuerdo que negocian actualmente 12 naciones del Pacífico, incluyendo México y Estados Unidos, ha sido calificado como el más progresista en la historia, y una vez puesto en vigor dará lugar al mayor bloque comercial del mundo.

Obama ha insistido en la necesidad de que el Congreso apruebe el acuerdo al destacar las oportunidad que ofrecerá a las exportaciones estadunidenses, aunque ha venido enfrentando resistencia al interior de su partido por el efecto negativo que algunos le atribuyen en el frente laboral.

La Casa Blanca destacó que Obama y Peña Nieto concluyeron la llamada reafirmando la importancia de todos los aspectos de la relación bilateral.

Críticas

La zona de libre comercio se extendería desde Vietnam hasta Chile, la población total de los países miembros de la unión sería de unos 800 millones de personas, y su PIB alcanzaría un 40% del índice mundial.

Sin embargo, mientras que los beneficios potenciales del acuerdo son muy tentadores, existe un cierto peligro para algunos países de la zona. Lori Wallach, una de los líderes del grupo estadounidense Public Citizen de defensa del derecho del consumidor, contó a RT, televisora pública de Rusia, cuáles son las perspectivas del tratado.

Según Wallach, el Acuerdo Transpacífico amenaza a los países con las economías más débiles incluidos en el área y a sus habitantes con acabar en las manos de las grandes corporaciones extranjeras.

De acuerdo con los documentos filtrados -las negociaciones se llevan a cabo a puerta cerrada-, las partes están tratando de eliminar todas las barreras al comercio, incluyendo las leyes que garantizan la seguridad de los alimentos, la protección de la agricultura y la privacidad de la información de los ciudadanos.


Otro punto preocupante del tratado, opina Wallach, es la creación de un tribunal secreto en el que las empresas podrán demandar a los Gobiernos ante paneles de arbitraje secretos integrados por abogados corporativos que evitan los tribunales nacionales y que anulan la voluntad de los Parlamentos en caso de no conseguir lo que quieren. Según la activista, esta medida destruirá por completo la legislación y pondrá en peligro los derechos fundamentales que habitualmente proporcionan los Estados democráticos.

FUENTE: ARISTEGUI NOTICIAS.
AUTOR: REDACCIÓN.

martes, 11 de agosto de 2015

EL TPP: asalto a la democracia

Cada vez más los gobiernos se debilitan frente al poder de las grandes corporaciones que a través de los acuerdos comerciales avanzan imponiendo sus intereses sobre los colectivos.

Los resultados de estos acuerdos pasan a afectar directamente la vida de cada uno de nosotros, permitiendo a la industria realizar sus prácticas sin que los gobiernos puedan o quieran intervenir cuando éstas prácticas representan un riesgo para la población.

Estos acuerdos pueden volver los medicamentos más caros, con patentes que duren más y con regulaciones que compliquen la introducción de genéricos. Estos tratados han ido dando mayor poder a las transnacionales y afectando cada vez más a los pequeños productores, a las pequeñas y medianas empresas.

A través de ellos, la industria extractiva minera, petrolera, forestal, del agua, tiene un mayor poder sobre las comunidades para extraer sus recursos y debilitar las herramientas legales para que los pobladores puedan evitar este saqueo y demandara las empresas por la destrucción y contaminación que generan.

El Acuerdo de Asociación Transpacífico, el TPP, es la mayor expresión en este proceso que representa un asalto a lo que nos queda de democracia. El TPP es el acuerdo regional de comercio más grande en el mundo que va a gobernar 40 por ciento de la economía mundial.  Sin embargo, este acuerdo está siendo negociado a puertas cerradas.

La propia senadora Gabriela Cuevas, presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, cuerpo legislativo que debe aprobar todo tratado internacional, declara que no tiene acceso al Acuerdo. Existen sólo versiones que se han filtrado, sin saberse cuáles son verdaderas, cuáles son las más avanzadas, qué corchetes corresponden a quién, a dónde va.

Los únicos que tiene acceso a las definiciones de este instrumento internacional, que representa una amenaza contra los derechos ciudadanos, son los representantes de las grandes corporaciones transnacionales y los ministros de economía de los países participantes. EL TTP incluye a México, los Estados Unidos, Australia, Brunei Darussalam, Canadá, Chile, Japón, Malaysia, Nueva Zelanda, Perú, Singapur y Vietnam.

Según los proponentes el objetivo es profundizar el comercio y la inversión entre los 12 países y reducir las barreras de comercio y tarifas, pero el acuerdo va mucho más allá del comercio: afecta la salud, el ambiente y las condiciones laborales y productivas de los pueblos.

Algunos ejemplos nos dan la dimensión del TTP y su efecto:

Los medicamentos: El TPP es un gran paso atrás para la salud pública. El acuerdo va a disminuir y retrasar el acceso a medicamentos genéricos. Documentos que han sido filtrados señalan que el acuerdo está dominado fuertemente por los intereses de las grandes farmaceúticas dando una mayor protección para sus patentes, prolongando su vigencia,  favoreciendo los intereses privados, no la salud pública.  Los negociadores de las farmaceúticas están introduciendo  un lenguaje en el acuerdo que hace más fácil  prolongar la vida de una patente usando un término técnico referido como “evergreening” a través del cual los productores de drogas cambian levemente un producto (un cambio que no da beneficios adicionales terapéuticos) para obtener una nueva patente sobre el mismo medicamento.  Además, están introduciendo en el TPP la “exclusividad de datos” de 12 años para un tipo de medicinas que incluye medicamentos contra el cáncer y vacunas, este prohíbe a los productores de alternativas genéricas usar los estudios clínicos existentes que fueron presentados para aprobar las marcas no genéricas. Esto tendrá efectos deprimentes e impedirá a los medicamentos genéricos entrar al mercado o hacerlo a mucho mayor costo. Resultado para los consumidores: medicamentos cada vez más caros y sin opciones genéricas accesibles.

Los medicamentos accesibles han sido fundamentales para salvar millones de vidas. Por ejemplo, hace una década el tratamiento antirretroviral por un año costaba aproximadamente $161,617 pesos (10,000 USD) mientras que con una alternativa genérica que está accesible hoy en día el costo para un paciente en un país de desarrollo puede ser de 3,232.34 (200 USD). Hay que subrayar que la industria farmacéutica es una de las industrias que mayores ganancias obtiene y que una parte importante de sus principales medicamentos patentados fueron desarrollados, en principio, en instituciones públicas con fondos federales.

El Tabaco. En materia de salud destaca el caso del tabaco. Esta industria obtiene una ganancia aproximada de 10 mil dólares por cada fumador a lo largo de su vida. Uno de cada dos de esos fumadores muere por una enfermedad causada por el tabaco: la sociedad en su conjunto es la que paga los costos en salud. La industria tabacalera utiliza todo tipo de tácticas y herramientas en los acuerdos de comercio para bloquear las políticas públicas que los gobiernos establecen para el control de tabaquismo. Por ejemplo, Australia y Uruguay enfrentan demandas por parte de la industria tabacalera que está usando estos acuerdos de comercio para bloquear medidas para el control de tabaco o intimidar a los países a no actuar. No obstante, estas medidas son recomendadas en el Convenio Marco de la OMS para el Control de Tabaco. No importa que el tabaco vaya a matar 1 mil millón de personas este siglo de no implementarse estas políticas públicas. Los mayores daños en salud y en las finanzas públicas por el tabaco se presentarán en las naciones en desarrollo.

La estrategia que la industria tabacalera está usando se basa en una provisión conocida como Sistema de Arbitraje Inversor (Investor State Dispute Settlements o ISDS, en inglés) que está en varios acuerdos de comercio y que le permite a la industria demandar a un gobierno si tiene medidas que considera una barrera de comercio. Por lo tanto, esta provisión permite a las empresas extranjeras pasar por encima de la soberanía del estado. EL TPP fortalecerá este proceso dando mayor poder a las empresas para desafiar las medidas del estado para la protección de la salud.

Los Alimentos: El TPP también pone en riesgo la seguridad alimentaria. Borradores del acuerdo señalan que etiquetados—y medidas estatales sobre pesticidas, aditivos, organismos genéticamente modificados y otros etiquetados que explican de donde viene un producto y como fue producido—no pueden ser establecidos argumentando que son barreras al comercio. Esto puede implicar que un estado perderá la soberanía para establecer reglas más estrictas que los estándares internacionales. Y como vemos, estos estándares internacionales son elaborados por las corporaciones en contubernio con los ministerios de economía. Actualmente, los etiquetados frontales de alimentos desarrollados en Ecuador y Chile para que los consumidores tengan la información sencilla y útil que les indica que un producto es alto en azúcar, grasas y/o sodio, están siendo demandados por las grandes industrias de alimentos y bebidas como barreras al comercio. El derecho básico a que sepamos los consumidores que un producto es alto en azúcar es combatido por las grandes trasnacionales de la comida chatarra y las bebidas ante los organismos internacionales de comercio. Este es el extremo al que hemos llegado: que la información básica al consumidor para proteger su salud sea considerada y combatida como una barrera al comercio.

El proceso del TPP ha sido un asalto a la democracia, un proceso sin transparencia.  La sociedad civil, así como los propios poderes legislativos, estamos excluidos de las negociaciones.  Tenemos que recurrir a documentos filtrados para entender mejor los detalles del acuerdo. Mientras, grupos de cabildeo que representan a las empresas multinacionales intervienen en la redacción de  los capítulos del acuerdo. Más de 500 corporaciones e instituciones financieras son partes de comités de asesoría que tienen acceso a los capítulos de este acuerdo.

Existe una oposición entre los organismos de Naciones Unidas que trabajan por la protección de la salud (OMS), del medio ambiente (PNUMA), del desarrollo (PNUD), de los derechos laborales (OIT), entre otros, y los acuerdos comerciales regionales, así como con la Organización Mundial de Comercio (OMC). Mientras los primeros ponen el interés común por encima, los segundos ponen el interés privado de las grandes corporaciones por encima del común. La desgracia es que los organismos de Naciones Unidas no cuentan con mecanismos de sanción, únicamente el consejo de seguridad puede llegar a ellos, mientras los acuerdos comerciales y la OMC si los tienen.


El acuerdo del TPP se encamina a ser una victoria para los intereses privados y un impedimento para la salud pública y los derechos de los consumidores, un golpe para los objetivos de salud, ambiente y desarrollo de la comunidad global.

FUENTE: SIN EMBARGO.
AUTOR: ALEJANDRO CALVILLO.
LINK: http://www.sinembargo.mx/opinion/11-08-2015/37886.

lunes, 27 de abril de 2015

Avance en el Pacífico

Después de meses de negociaciones hostiles entre los dos mayores países que lo componen, el tratado comercial más importante para México desde el TLCAN por fin muestra avances positivos.

En vísperas de la visita del primer ministro japonés, Shinzo Abe, a Estados Unidos, el mayor acuerdo comercial para México desde la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) en 1994 nuevamente muestra señales de avance.

Después de haber sido puesta en riesgo por estancamiento legislativo en Estados Unidos y por desacuerdos entre este país y Japón (sus dos mayores economías participantes), la negociación del Acuerdo Estratégico Trans-Pacífico de Asociación Económica (mejor conocido como TPP, por sus siglas en inglés) parece acercarse a un acuerdo definitivo.

En cuanto al primer obstáculo, el impulso viene gracias a avances legislativos que podrían darle la autoridad fast track (que impide al Congreso enmendar acuerdos internacionales pactados por el poder ejecutivo) al gobierno del presidente Barack Obama en las negociaciones del TPP.

Por otro lado, en entrevista con el diario The Wall Street Journal, la semana pasada Abe dijo que su gobierno piensa que un acuerdo entre Japón y Estados Unidos está cerca, aunque aún faltan afinarse algunos detalles y diferencias.

Entre los principales puntos de tensión que aún podrían descarrilar las negociaciones se encuentran políticas comerciales que protegen a los agricultores japoneses, cuestiones de propiedad intelectual, y críticas acerca del impacto que el TPP tendrá sobre la fuerza laboral estadounidense.

Magno acuerdo

La negociación del TPP involucra hasta el momento a 12 países: Estados Unidos, Japón, México, Canadá, Malasia, Vietnam, Perú, Australia, Singapur, Nueva Zelanda, Chile, y Brunei. Adicionalmente, China, Corea del Sur, Tailandia y Taiwan han expresado interés de unirse al acuerdo en el futuro.

En conjunto, los 12 países participantes representan casi el 37 por ciento de la economía global, con un Producto Interno Bruto (PIB) total de aproximadamente 28 billones de dólares, y más de un cuarto del comercio global, con más de 11 billones de dólares en intercambios de bienes y servicios.

La revista The Economist reporta que, de concretarse, el TPP daría un impulso de 220 mil millones de dólares anuales al PIB mundial para el 2025.

El gobierno mexicano ha enfatizado que el TPP le permitiría a México diversificar su actividad comercial y asegurar un lugar privilegiado para sus exportaciones en la región Asia-Pacífico, cuyo crecimiento económico es uno de los más veloces del mundo.


De los 12 países participantes, México ya sostiene acuerdos de libre comercio con Estados Unidos, Canadá, Japón, Chile y Perú, mientras que a los otros seis les aplica un arancel promedio de 7.8 por ciento al momento de importar sus productos.

FUENTE: REPORTE INDIGO.
AUTOR: ROLANDO HINOJOSA.