El aislamiento provocó que se disparan reportes de violencia familiar en varios estados; en más de la mitad de casos hubo agresión física.
A Lulú nunca le había pegado su marido, hasta que se vieron confinados en casa por la contingencia sanitaria que ha causado el COVID-19. Él es un tipo agresivo y con problemas de adicciones a las drogas, eso lo sabía, pero nunca se había visto en riesgo como ahora.
Lulú (nombre ficticio por seguridad) era quien trabajaba de los dos y pasaba la mayor parte del día fuera. Con las medidas de distanciamiento social, se quedó sin su fuente de ingresos, además de quedarse encerrada con él. Empezaron las discusiones y él comenzó a agredirla, a negarse a buscar una manera de sostenerse económicamente, y después de una semana, la golpeó.
A Lulú nunca le había pegado su marido, hasta que se vieron confinados en casa por la contingencia sanitaria que ha causado el COVID-19. Él es un tipo agresivo y con problemas de adicciones a las drogas, eso lo sabía, pero nunca se había visto en riesgo como ahora.
Lulú (nombre ficticio por seguridad) era quien trabajaba de los dos y pasaba la mayor parte del día fuera. Con las medidas de distanciamiento social, se quedó sin su fuente de ingresos, además de quedarse encerrada con él. Empezaron las discusiones y él comenzó a agredirla, a negarse a buscar una manera de sostenerse económicamente, y después de una semana, la golpeó.